Saludo y reconozco el pronunciamiento de la fiscal general al decir que nuestro compañero Julian Conrrado no será extraditado porque no hay elementos para aplicar ese procedimiento, con lo cual recuperamos la ezperanza sin lugar a dudas,pero como no todo puede ser felicidad recibimos ese balde de agua hirviendo con la liberación de un asesino y golpista responsable de la masacre de puente llaguno con lo cual se comprueba de que no debemos descuidar nuestra capacidad de asombro y menos aún en franco proceso de construcción de una patria como la que nos merecemos los Venezolanos decentes, digna y prospera para los hombres de buena voluntad con base en el estudio y el trabajo.
Quienes decidieron esto es decir liberar un mercenario no merecen llevar el gentilicio de la patria que dio origen a seis naciones libres en nuestra America como es el gentilicio Venezolano, porque sencillamente no tienen patria, no tienen alma, son verdaderos desperdicios putrefactos, los desconozco definitivamente como especie humana al igual que los que como ellos se creyeron con el derecho de imponernos una tiranía que duró menos que un peo en un chinchorro.
Si al caso vamos la figura que utilizaron como es razón humanitaria por enfermedad la deberían haber aplicado tanto con Julian como con todos los privados de libertad en la cual se demostrace su existencia pero que pudieramos esperar de estos engendros que solo se colocan honorarios inmerecidos y groceros, bonos de alimentación de Bs.F. 10.000.-, jugosas jubilaciones e inconfesables contratos colectivos y aguinaldos.
Solo nos resta esperar que prive el sentido común y esto se corrija mas rapido que inmediatamente dado el respeto que merecen nuestros mártires, victimas, sobrevivientes y familiares del 11, 12 y 13 de Abril del 2002, comprendo perfectamente nuestra realidad y su complejidad, lo cual no quiere decir que la acepte, al contrario todo el que me conoce lo sabe, nada de esto estuviese pasando si los hubiesemos fusilado a toditos previo juicio popular asi pienso y así lo expreso porque en una guerra como la que nos declaro la burguesía parasitaria al enemigo se le respeta solo en condiciones igualitarias en aceptación de las normas internacionales en comflictos armados, pero lo que ellos cometieron fue un delito de lessa humanidad contra un pueblo desarmado incluyendo los de su propio bando y con armas de guerra para lo cual no hay razón humanitaria que valga.
Vaya desde aquí mi mas energico repudio a estos apatridas y mal nacidos jueces y mi mas absoluta solidaridad para con las victimas y sobevivientes de esos hechos inevitables y honor y gloria a nuestros martires de Abril de 2002.
Juramos vencer y venceremos
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