“Puedes cruzar montañas, océanos, superar tragedias, dificultades, responsabilidades, con solamente una cosa: Confianza en ti mismo.”
Yogi Bhajan…
En la política venezolana se están lanzando a la opinión pública, asuntos que erizarían la paciencia de Job, y que mantienen a muchos venezolanos hartos, agüeboneados, y desganados. El martilleo retorico, alarmista y cansón, para no utilizar el lenguaje procaz, escatológico, grosero, insultante y descalificador de muchos columnistas, tanto de la revolución, como de la oposición. Con el que ciertos medios de comunicación de tendencia opositora: televisivos, radiales, impresos, y portales de internet etc. Los cuales tratan diariamente en sus espacios de opinión e información, intentando hacer vivir al pueblo venezolano en una permanente desesperación.
Esto es igual como si a un enfermo en estado terminal sometido a quimioterapia, le dijeran durante la aplicación de los medicamentos que su curación no será posible, por muchas sesiones que le apliquen, y de nada le servirá el tratamiento para curarse. Cuando uno se encuentra en una situación difícil, lo que más necesitamos es que nos ayuden, a elevar la moral, ayudándonos a sentir que no todo está perdido, así nos apliquen las llamadas ‘cotorras o muelas’ piadosas.
La oposición venezolana en estos momentos de la recta final de sus primarias, se notan desesperados, machacándonos en forma continua con datos y cifras, que nos hunden en un mar de confusiones, y conflictos donde nos sumergen en el día a día.
Lo correcto de los pre-candidatos opositores y sus asesores, seria que sus mensajes traten de ayudar y aconsejar al trabajador y al empresario progresista. Que Venezuela es una puerta a la esperanza, y no cerrárnoslas con sus discursos de oráculos del desastre, hasta las ventanas para que no pueda colarse, ni siquiera un rayo de sol. Que disipe las tenebrosas y oscuras perspectivas, a que nos tienen acostumbrados con sus agoreras predicciones.
Cuando leemos las cifras de esas voces agoreras, y los que le siguen el juego macabro, con sus fatídicos presagios sobre nuestra economía, y los alarmantes descensos que pronostican sobre el PIB, que nadie sabe quién se los elabora, y a que intereses obedece. Hay la sospecha que tras los oscuros vaticinios que siempre pregonan, hay mucha falsedad en las cifras que manejan.
Los autores de esa desesperada y crítica información que maneja la MUD, de lanzar a la quiebra a las empresas estratégicas del estado venezolano, bajar a límites inconcebibles las inversiones extranjeras en nuestro país, y poner en riesgosa situación económica, a esas empresas, a las cuales mantienen en jaque con sus declaraciones.
La dirigencia opositora con su actitud esta demostrando su insaciable codicia, y un egoísmo sin límites. Dan la impresión que gozan con sus temores, y fatigas sobre el pueblo venezolano, haciendo creer que todo está perdido en la revolución bolivariana. Y que de esta hecatombe económica no salimos si ellos no llegan al poder, y según estos oráculos del desastre, a Venezuela sin ellos en el gobierno no la salva ni un milagro, como el de la multiplicación de los panes, y los peces como reza en el Evangelio.
Solamente Dios sabrá qué demonios esconden tras sus oscuras predicciones, según ellos ni ayunando todo el año podríamos salir de esta crisis, que en la mayoría de los casos, ellos mismos han provocado con sus augurios, que han sembrado con su alarma, y angustia entre los venezolanos.
Hay noticias que avivan el fuego del pesimismo, y la desesperación del ciudadano trabajador que nada contra corriente, y entre fuertes oleajes sin saber adonde lo llevan, estos augurios opositores.
La reelección de Hugo Chávez el 7-O de 2012. Será la única manera que dejen de atosigarnos con esa cantaleta repetitiva, pesada, inaguantable con las que nos bombardean en forma diaria sus noticias televisivas. No hay otras informaciones con la que abran sus noticieros sin tener que estresar, y amargar a los usuarios. Contrarrestarlos esta fuera de nuestras posibilidades (mucha gente preparada en la revolución para estas lides) y conscientes de que no podremos luchar con nuestros medios de comunicación públicos contra esos huracanes mediáticos, por la mala calidad de nuestros espacios de opinión e informativos públicos; ya que la mayoría solo sirve para jalarle bolas al comandante, así no vamos a derrotar e estos vendavales mediáticos de la oposición, y si los cierran será peor el remedio que la enfermedad.
Es el alto gobierno, y los más versados políticos del psuv los que siempre deben informar en forma coherente, como iremos superando la difícil situación socioeconómica de las familias venezolanas que no tienen ningún ingreso, y que se encuentran en situación de pobreza, y de exclusión social.
Al ciudadano venezolano hay que explicarle los que manejan los espacios de la información de los medios públicos, quienes son los oráculos del desastre, y quienes se benefician de sus macabros vaticinios para ir desmontándoles su juego. Hay que pensar más y mejor, con la misma celeridad, con que los ascensores de los medios opositores manejan la información que predice el desastre. Ya que son ellos los que las provocan la mayoría de las veces, convirtiéndolas en buenos negocios.
Hay que darle un parao a muchas orquestas desafinadas.
