“Sólo podemos dar una opinión imparcial sobre las cosas que no nos interesan, sin duda por eso mismo las opiniones imparciales carecen de valor”.

Oscar Wilde…




La “Victoria Pírrica”, ha significado a través de la historia que el éxito obtenido fue insignificante, para el despliegue de recursos que se empleó para ello; y significa que el triunfo dejó tan agotado al vencedor que puede ser víctima fácilmente de una nueva arremetida del derrotado; significando también que el vencedor sufrió graves daños, tantos como las de su adversario, por lo que no le quedan ganas, y menos fuerzas, para la celebración.

Pirro, fue un general griego sumamente exitoso. Marchó una vez sobre Apulia con un ejército de 20 mil hombres a su mando, de donde regresó triunfante, habiendo perdido un tercio de sus soldados. A partir de ese momento se impuso la celebre frase de “victoria pírrica”. El General Pirro fue llenando de triunfos su historia militar, hasta quedar sin ejército que lo defendiera; fue asesinado en Argos en el año 272 A de C. “Al entrar en Argos al frente de su ejército, una mujer desde lo alto de su casa le arrojó una teja que lo golpeó en la cabeza. Pirro murió sin pelear, distraído, en un desfile y por medio de un objeto contundente proveniente de la mano de una mujer. Otras historias dicen que, la teja lo dejo atontado, cosa que fue aprovechada para asesinarlo, y luego cortarle la cabeza. Quedando entonces para la posteridad la expresión de marras para calificar las victorias que causan más penas que glorias.


Con más de 2000 años, el legado de Pirro, aun es emulado por ingenuos. Las operaciones políticas se hacen fuertes cuando son usadas con sentido para construir proyectos, y tener control sobre el futuro de la Historia. Esto es muy claro cuando un proceso revolucionario entra en su fase decisiva, como acontece hoy en Venezuela.

Capriles Radonsky es el candidato de la oposición, el tercer candidato que se le enfrenta a Hugo Chávez desde 1998. Pero no se parece a los otros dos anteriores, tal vez tenga una simpatía incombustible. Pero el ciclo político que viene no es para “arrechos o simpáticos”.

Estos momentos de la geopolítica mundial, se requiere que el gobierno bolivariano, defienda seriamente los proyectos de gran envergadura: los terminados, los que están en construcción, los paralizados, y los futuros planes etc. En esta campaña del 7-O, Hugo Chávez necesita conectarse con el pueblo venezolano desde el contenido de fondo, y no en la forma. El candidato de la oposición esta echando el resto quiere ganar tiempo frente a la ciudadanía, y las descalificaciones de Chávez, hoy 9 de agosto en Catia la Mar-Vargas le facilita unas buenas herramientas para su campaña. Para este humilde analista esta estrategia es equivocada señor presidente. Aquí se necesita mucho más. A dos meses del 7-O, sea cual sea el ganador, por la situación mundial; Venezuela estará en una situación más difícil que la actual. Creer que Capriles superará la supuesta crisis de la que habla en sus discursos, es como creer en forma estúpida que con la ‘bendita gorra’ que usa se derrotará a Hugo Chávez.

Existen dos candidatos presidenciales a la caza del pueblo (perdido) indeciso y descontento. El gobierno bolivariano o el comando Carabobo, ha desarrollado su estrategia electoral, dejando en el camino, a presuntos hombres-obstáculo, y los que faltan (ejemplo de: Lacava en Carabobo, y el gato en Monagas) continuando el rumbo hacia las regionales del 16-D, con una pata hinchá. Pero el 7-O, no puede ser una victoria a lo Pirro. Si en el camino dejan agonizando a mucho líder de los suyos, y de ganar la reelección, habrá perdido el comandante, que tenía el plan de cómo salvar a la revolución bolivariana.

Percasita11@yahoo.es