El domingo primero de diciembre de 2002 estaba yo en el Universitario desbordado en un partido de excepción, pues jugaba Omar Vizquel después de varios años de ausencia, por consejo de su papá.

El famoso short stop aceptó hacerlo durante cinco innings. Era un partido de los Leones del Caracas contra La Guaira. La verdad, en esas entradas no había mostrado nada de su clase, así es que decidió continuar, y en las entradas restantes lo hizo de maravillas fildeando y al bate.

Supongo que nadie de quienes estábamos en el estadio pensó que la temporada sería interrumpida. La Liga, entonces presidida por Ramón Guillermo Aveledo, hoy ejecutivo de la opositora MUD, suspendió el campeonato.

Al día siguiente comenzó el paro patronal y seguidamente en la industria petrolera, promovido por sus directivos y gerentes. A partir de ese día, Fedecámaras, la CTV y Gente del Petróleo dieron un parte de guerra sobre ese paro. En Pdvsa fue casi total. El transporte “Pilín León”, así como una docena más de petroleros, fueron controlados por los parados, y se hicieron símbolos del sabotaje. Imagínense que de los casi tres millones de barriles que producía Venezuela, bajó a 25 mil a mediados de diciembre. Hubo que traer gasolina de Brasil, Trinidad, etc, para suplir la escasez.

El transporte y los bancos semiparalizados. No había clases, en fin casi todo el país se paralizó.

El expresidente de Pdvsa, Luis Giusti, había dicho antes de comenzar que si se paraba la industria petrolera en una semana habría un caos. El gobierno no lo aguantaría, y tendría que negociar la salida de Chávez o unas elecciones anticipadas. En la cabeza de quienes lo promovían había la seguridad de que se producirían estallidos en todo el país, explosiones sociales, que la gente se rebelaría, y el país sería ingobernable.

Pero nunca tuvieron capacidad para pensar que el pueblo soportaría esas acciones, que haría sus colas para adquirir bombonas de gas, pacíficamente; que tuvo paciencia para aguantar la falta de productos alimenticios elementales. Como si supiera que lo que estaba en juego era la salud del gobierno de Chávez, el gobierno de los pobres.

En los más altos niveles se organizó el Grupo Colina, con civiles y militares, que asumió la dirección del contragolpe.

La gente se turnó en las instalaciones petroleras y, apoyada por contingentes de la Fuerza Armada, fue posible debilitar el paro. Después se recapturó el Pilín León, símbolo del paro, y así gradualmente fueron cediendo posiciones. Últimas Noticias tituló “El Paro Boquea”, cuando apenas faltaban dos o tres días para su fracaso. Nadie asumió la derrota.

Entre las conclusiones necesarias, destacaremos tres: primero, los partidos, comenzando por AD, Copei y Primero Justicia, aun cuando estuvieran en desacuerdo, no tuvieron valor para oponérsele; temían hasta el castigo del silenciamiento por parte de algunos medios. Segundo, que este episodio le costó al país mucho más de los 20 mil millones de dólares que se ha dicho, que parece nadie pagará por tantos males causados; y tercero, que fue la ejemplar conducta del pueblo venezolano, en armonía con la unidad de la Fuerza Armada, el factor fundamental de la derrota del paro-sabotaje.

* El PCV ha postulado candidatos en otras elecciones regionales distintos a los del Psuv, y siempre acordó retirarlos; ahora, por primera vez, ha mantenido los cuatro que tiene con el riesgo de que, al menos, en un caso podría significar la victoria del candidato de la oposición. ¿Cómo explicar ese cambio? Posiblemente por su votación del 7-O, la más alta en toda su historia; pero veamos los porcentajes en cada uno de esos estados donde tiene candidatos: Amazonas 2,86; Bolívar 5,68; Mérida 2,47 y Portuguesa 8,43. Como es fácil deducir, no tiene ninguna posibilidad de triunfar y puede ayudar a la victoria de un candidato opositor. Es tiempo para la reflexión, imbricados como están en el proceso revolucionario, sin abandonar principios ni su independencia.

* Palestina logró una importante victoria cuando las Naciones Unidas lo reconoce como estado no miembro, igual que al Vaticano. La votación fue 138 a favor, 9 en contra, de Panamá el único de América Latina, y 41 abstenciones. Los bombardeos del 14 al 21 de noviembre con saldo de 186 muertos, entre ellos 43 niños, debió influir en esa votación.

*Si el alto gobierno estudia la posibilidad de liberar a varios políticos presos y autorizar el regreso de algunos exiliados, no entiendo por qué la Liga de Beisbol no reconsidera en esta Navidad la sanción al catcher Yorvit Torrealba.

* La foto de cadáver de Fabricio Ojeda guindando de una persiana en las dependencias de la DIM, en junio de 1964, mostrada en José Vicente Hoy el domingo pasado, parece una irrefutable prueba de que no hubo suicidio, sino que fue sencillamente asesinado. Exhumado el cadáver, se supone que la Fiscalía ahondará en una investigación que ha sido entorpecida durante muchos años.

*La construcción del sector privado no solo ha disminuido en 10 por ciento, sino que se ha encarecido. Vean estas cifras: una cabilla de 12 metros de 3 octavos está regulada en Bs 18,70, pero los constructores deben pagar hasta Bs 230 por unidad!, y si construye para el Gobierno, debe facturar a precio regulado. El cemento está regulado en Bs 22, pero hay que pagar Bs 50 ó 60 por saco de 43 kilos.

*La campaña del supuesto secretísimo sobre la salud del presidente Chavez no tiene sentido. ¿Por qué no creerle cuando informó que iba a La Habana para un tratamiento de oxigenación herbárica y de fisioterapia? Como saben algunos lectores, yo sufrí de cáncer y supongo que me creerán si les digo que aquí tuve un tratamiento de 20 sesiones diarias de oxigenacion herbárica.

* El jueves me presenté sorpresivamente en una asamblea de partidarios de los consejos de trabajadores, en el salón Carlos Escarrá, de Ipasme, para vivir un poco el proceso de discusión del programa de gobierno que presentó Chávez al CNE.

Lo hicieron en mesas de trabajo, con conclusiones de las cuales informaron el viernes Últimas Noticias y El Mundo. Se trata de sectores radicales, pero muy conscientes del rol que deben jugar los trabajadores, con propuestas de avanzada, pero seguramente sin fuerza mayoritaria.

*Simultáneamente, una comisión de alto nivel de Copei entregaba en otra asamblea, que dirigía Darío Vivas en la plaza Diego Ibarra, un conjunto de proposiciones para su discusión, en la confianza de que sea un punto de partida para un diálogo nacional. El otro partido del siglo XX, AD, buscó una vía más directa de participación en los debates, de acuerdo con las instrucciones emanadas del CEN de incorporarse al examen del proceso de discusión sobre las comunas y del estado comunal.

*El domingo escribí que la denuncia de violación a la exjueza Afiuni debía ser investigada a fondo, y sancionados severamente quienes resulten culpables, pero la decisión de la exjueza de negarse a denunciar, porque no confía en las autoridades, comienza a despertar sospechas sobre si realmente hubo tal violación. ¿Cómo conocer la verdad si la más interesada se niega a denunciarlo?