¿Rezará la Iglesia venezolana?

¡Nunca más la guerra! ¡Nunca más la guerra!

Queremos un mundo de paz, queremos ser hombres y mujeres de paz.

¡Cuánto sufrimiento, cuánta destrucción, cuánto dolor ha ocasionado y ocasiona el uso de las armas!

Queremos que en nuestra sociedad, desgarrada por divisiones y conflictos, estalle la paz.

Que el grito de la paz se alce con fuerza en todas las partes de la tierra #prayforpeace

Tweets recientes del papa Francisco

Nicolás Maduro aceptó el llamado papal a rezar y ayunar este sábado por Siria, país fundamental de la humanidad, que Julio Borges no sabe dónde queda. Evo Morales también aceptó el llamado papal, a pesar de que no es católico muy exacto. Con todo, tuvo cita vaticana este viernes. «Lo malo de las revoluciones de antes era que había que hacerlas contra Dios». Así comentaba Fidel el episodio de Bolívar con la Iglesia, que dijo que el Terremoto de 1812 lo había provocado la Independencia. Parecido dijo de la Tragedia de Vargas. ¿No estudia?

Terminada la Guerra Federal, la Iglesia quedó mal parada porque la perdió. Años después la joven dictadura de Juan Vicente Gómez necesitaba apoyos e hizo numerosas y pingües concesiones a la Iglesia, que ya había declarado a Venezuela territorio de misiones, para recuperar la feligresía perdida, ya con la anuencia del dictador. Predicó para oligarcas y clase media casi exclusivamente. No sé de dónde salió tanto dinero para colegios tan opulentos. Míralos. Dejó la clase humilde a evangélicos y curas y monjas que con los pobres de la tierra quieren hoy su suerte echar.

Concluida la Segunda Guerra Mundial, la Iglesia tuvo que cuadrar con el Imperio. El entonces papa Pío XII había bendecido tropas fascistas y callado el genocidio de población comunista, judía, homosexual y demás gente diversa, ad maioram mala vitanda, ‘para evitar males mayores’. El mal mayor que no se evitó fue la masacre de millones. En 1963 una ruidosa pieza de teatro en Alemania, El vicario, una tragedia cristiana (Der Stellvertreter, ein christliches Trauerspiel), de Rolf Hochhuth, describió con documentos ese llamativo descuido. En 1944 en Italia el nazismo fusiló al sacerdote carabobeño y antigomecista Salvador Montes de Oca. Su monasterio protegía perseguidos. Por su cuenta. Todo debo decirlo (http://es.wikipedia.org/wiki/Salvador_Montes_de_Oca).

Sé que curas, monjas y feligreses de base rezarán y ayunarán este sábado, lo que no sé es qué hará la alta jerarquía por Siria y por su voto de obediencia.

@rhm1947



Esta nota ha sido leída aproximadamente 6393 veces.



Roberto Hernández Montoya

Licenciado en Letras y presunto humorista. Actual presidente del CELARG y moderador del programa "Los Robertos" denominado "Comos Ustedes Pueden Ver" por sus moderadores, el cual se transmite por RNV y VTV.

 roberto.hernandez.montoya@gmail.com      @rhm1947

Visite el perfil de Roberto Hernández Montoya para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes:

Comparte en las redes sociales


Síguenos en Facebook y Twitter



Roberto Hernández Montoya

Roberto Hernández Montoya

Más artículos de este autor