En un tiempo el espíritu fue Dios, luego se hizo hombre, y ahora hasta se ha hecho plebe.
Me recuerdo cuando Venezuela tenía una moneda fuerte, y lo barato que salía el viajar al exterior por placer, y de compras: así lo reflejaban los medios de comunicación social cuando los venezolanos con la convertibilidad del bolívar en las décadas del 70 y el 80, invadían los centros comerciales en Miami de compras, y exclamaban “ta’ barato dame dos".
Hoy en pleno siglo XXI de este año 2013, aquel Bolívar Fuerte moneda orgullo que lleva el nombre de nuestro Libertador, ha ido mermando como el queso fresco, y que en el exterior todos le sacan el cuerpo, hasta en la fronteriza ciudad colombiana de Cúcuta. La alta inflación por la que está atravesando nuestra querida Venezuela, hace que la velocidad de circulación del dinero este creciendo a niveles peligrosos, ya los billetes de 100 bolívares ahora representan más del 80% del circulante, el pasado viernes 25 de octubre en un viaje a Barcelona en un kiosco de la carretera me comí dos arepas, me tome un jugo, y un café; del billete arriba mencionado recibí de vuelto 15 bolivarcitos. Lo que es un claro diagnóstico de la debilidad de nuestra moneda.
Ahora bien, dada esta situación desbastadora que está causando la inflación contra nuestro pueblo en la que el Bolívar Fuerte circula moribundo mientras se devalúa inexorablemente día a día, y mes a mes.
Salir de paseo al exterior está prohibido para la clase media trabajadora cualquier venezolano que haya viajado a Miami en estos días, no ha delinquir raspando la tarjeta para venir a estafar a sus hermanos venezolanos, podrá confirmar que la "invasión de turistas" ha desaparecido, y que el "ta’ barato dame dos" ya no se escucha en los distintos centros comerciales.
Desde abril en adelante, la inflación no ha bajado del 40%. En este mismo lapso, lo que creció, fue la entrada de los ‘raspa cupos’ a los Estados Unidos. Buscando sacarle provecho a la convertibilidad del dólar frente al bolívar que ha alcanzado los valores actuales.
Si bien todavía las cifras oficiales eluden hablar de este genocidio monetario, todo parece indicar que la tendencia se mantendrá hasta finales de diciembre. En las líneas aéreas internacionales, los pasajes con destino a Miami si se consiguen, están a precios muy altos.
¿Cómo se explica que Venezuela el país más rico de América Latina tenga una de las monedas más débiles de la región, y haya bajado su tasa de crecimiento, el turismo que generaba divisas ha desaparecido?
La Embajada de los EE.UU. desde hace meses se ha convertido en el objetivo de aquellos venezolanos que solicitan la visa, y que pretenden emigrar a ese país, buscando mejorar sus condiciones de vida en términos materiales, ante la grave situación económica que atraviesa Venezuela.
Lo que si debe pedirle el gobierno bolivariano a la embajada americana es que le eliminen la visa a aquellos venezolanos que se excedan de los seis meses en ese país, y así reducir al mínimo la posibilidad de que se siga fugando el talento venezolano hacia ese país con la excusa de hacer turismo, y terminen viviendo, y trabajando como indocumentados, de cachifos, lavando pocetas, y recogiéndole la mierda a los gringos pobres, ya que son puestos de trabajo que se consideran indignos para nuestros ciudadanos venezolanos profesionales, y uno más que otro aventurero, que están abandonado su patria.
