Es curioso: solo bastó para que el Presidente Constitucional de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, celebrara en el Palacio de Miraflores una akelarre con los sectores de las derechas venezolanas, representantes de los sectores sociales opositores a la Revolución Bolivariana de Venezuela para que las matrices de opinión desde los medios de las derechas comenzaran a cambiar sus discursos escritos y comentados en el marco de haber alcanzado sus objetivos en el proceso de “golpe de estado suave” en su “nueva etapa contrarrevolucionaria” con comentarios precisos y bien reflexionados de ese proceso de desgaste sicológico que se viene desarrollando durante todo el precedente año 2013 con el “sabotaje económico”, con la “escasez programada”, con el desarrollo de “colas de miembros de la sociedad venezolana” en las puertas de supermercados tanto de las zonas de la burguesía como de los sectores sociales de la pequeña-burguesía.
A ese “espontaneo escenario contrarrevolucionario” se le ha adicionado la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) con motivo del abominable asesinato de una figura pública, su ex-esposo y haber salido herida su hija en una zona geográfica bien conocida por su inseguridad que obliga a la reflexión seria y profunda desde la Revolución Bolivariana venezolana.
No vamos a excusar absolutamente a ningún funcionario porque no es nuestra tarea hacerlo pero sí vamos a reflexionar sobre todo el escenario actual en este primer mes del año 2014 que nos está comunicando como viene el tema de la contrarrevolución y de los errores que están cometiendo sectores de la revolución. En primer lugar, la prensa de las derechas tiene un muy bien definido discurso; el discurso donde cualquier figura pública, aún siendo partidaria de la Revolución Bolivariana, cuando “camina por dificultades” en el amplio escenario público, esa prensa de derechas logra darle un sentido sicológico de rechazo a la revolución. Por ejemplo, El Nacional titula en los pasados días posteriores a los asesinatos arriba referidos que aquellas personas que se ejercitan para “bajar sus kilitos” tiene que invertir hasta un monto de “billullo” en bolívares fuertes de hasta BsF12mil. (El Nacional, Ciudadanos. Sábado, 11 de enero, 2014, pág. 1 en portada). Cuenta la periodista Dulce María Rodríguez, redactora de la mencionada y la ”muy cruel” situación de “los gorditos y estéticas” que “…contar con un entrenador persona es un privilegio…”. Diría Brito García que con la supuesta escasez y las colas en supermercados para nada necesitaría de “…un entrenador personal…”. Por cierto, nos que somos compradores compulsivos de “papa”, todos los días de mercado libre en el mercado Guaicaipuro, nos acercamos “a donde Manuel” para adquirir “toda la papa necesaria para el condumio”.
En ese orden, nos preguntamos: ¿Qué comenta el aparato ideológico de la Revolución Bolivariana para confrontar esta “guerra sicológica” sobre, por ejemplo, la escasez de alimentos y las colas? Pareciera que el aparato ideológico del Gobierno tendría que contratar con expertos. En ese mismo cuerpo de El Nacional, en título, expone la “siguiente seguridad temporal”: “…prevén inestabilidad educativa por cambio de ministros…” (Idem, pág. 3) En la misma línea del sector educación superior, colocan el siguiente texto: “…terreno de la UCV no es apto para la construcción de viviendas…” (Ibidem, pág. 2).
Pero cambiemos el periódico y vayamos a los textos de Tal Cual cuando comenta en título que “…las balas esquivan los planes de seguridad…” (Tal Cual. 13 de enero del 2014, pág. 4). Sí, como pontifica Tal Cual “…las balas esquivan los planes de seguridad…”, bien mal estará trabajando la Central de Inteligencia Americana, comúnmente conocida como CIA, para que con dicha información poder evitar que semanalmente “caigan en combate” soldados estadounidense en Afganistán.
En ese mismo discurso de “golpe de estado suave” dicho panfleto matutino en el marco de confrontar a la Ministra del Poder Popular para la Comunicación y la Información titula en el texto: “¿Y por qué Cuba?” (Idem, pág. 6) donde el y/o la responsable de la columna titulada: “Por mi madre” escribió que dicho ministerio “…adjudica al Instituto Cubano de Radio y Televisión (ICRT) los bienes que se señalan en la Resolución Nº 417…” para así conjugar, apropiadamente, desde la “guerra sicológica” que “…el asunto no hubiera pasado de ahí de no ser por unos camaradas [negrillas nuestras] de una emisora comunitaria de Antímano que ha estado pidiéndole explicaciones a Delcy (Rodríguez), la lista de viajeros, preguntándoles: “¿Y por qué no los donó a las emisoras comunitarias de aquí? Verdad Delcy (Rodríguez)…” (Ibidem) Por último, por ahora, al tiempo y en el mismo ejemplar, colocan el título: “…80% de sindicatos no pudieron registrarse…” (Idem, pág. 9) Es decir, la “democracia participativa” que promueve la Revolución Bolivariana se está expresando “chucuta” porque ello es lo que tratan de imponer las derechas de Tal Cual en la siquis del sector obrero cuando se considera que el Presidente Maduro Moros además de ser chavista es obrero.
Al Presidente Maduro Moros, en la misma línea de lo ante-puesto, El Nacional le da el título de primera página: “…radicales presionan a Maduro para que no libere a presos políticos…” (El Nacional. Caracas, 6 de enero del 2014, pág. 1 en Portada). Nos preguntamos: ¿quién le ha dado respuesta a tan tamaña acusación? Además, nos inquirimos: ¿a cuáles radicales se refiere ese periódico matutino? Y, por último: ¿a cuáles “presos políticos” se está refiriendo El Nacional? porque nos tenemos entendido que en Venezuela no hay presos políticos como sí se presentaron durante los gobiernos de la burguesía venezolana durante la 4ta. República. Disculpen, un chismecito más que dejábamos en el tintero. En ese mismo periódico matutino, es decir, El Nacional, del mismo día arriba en referencia, en la página Nº 8, expertos de las derechas le explican al lector que la “…situación interna restó proyección a la política exterior de Venezuela…” (Idem). Es decir, pareciera que los opinadores y opinadoras de oficio aceptan que durante los 15 años del Gobierno del Comandante en Jefe, Hugo Rafael Chávez Frías, teníamos una y la Política Exterior de Estado. Quien los comprende!!!
El matutino El Universal, en entrevista a Diego Padrón, presidente de la CEV, tituló su texto: “No acepto que el Gobierno evada su culpa ante la violencia”. (Domingo 12 de enero, de 2014, vía página web). El también matutino, Correo del Orinoco, así mismo en entrevista al referido obispo Padrón, tituló su texto: “Diego Padrón: todos estamos dispuestos a colaborar en lucha contra la delincuencia” (Política. Lunes, 13 de enero del 2014, pág. 6) Dos (2) títulos, dos (2) mensajes profundamente diferentes. Pero vayamos a los textos y tratemos de compararlos.
Le expone el Obispo Padrón a El Universal que “…lograr que el Gobierno escuche a quienes no piensan como él y que busque con ellos puntos de acuerdo para combatir los graves problemas que aquejan al país…[pero] estos diálogos no pueden quedarse en unos encuentros en los que dos partes que piensan distinto se sientan y hablan, sino que eso debe materializarse en algo...[porque en ello] está la base para que podamos lograr la pacificación del país…[el diálogo] tiene que tocar aspectos que constituyen la realidad del país; debe ser permanente y sobre todo de contenido para que a la final uno vea resultados…[advirtiendo, vehementemente, que] del diálogo con la Iglesia, si por ejemplo se utilizara como una estrategia, es decir, acudo a esta institución cuando me veo en problemas, pero cuando me siento firme no escucho a nadie entonces lo que nos depara como país es un futuro fatal…habría que ver qué entienden [Gobierno] por diálogo…[en un claro ataque a Diosdado Cabello, el Obispo Padrón explica que] la reelección de la directivo de la AN (Asamblea Nacional) y el inicio de las sesiones no vaya a aparecer en los libros de texto como modelo de diálogo, porque allí ni el lenguaje ni la metodología fueron los correctos…”. Por último, para El Universal, expresó que “…prefiero una libertad riesgosa a una paz o un diálogo sumiso…” Es nuestra opinión que el Obispo Padrón oye pero no escucha como pudimos comprobar en alguna reunión de hace algunos años atrás.
Ahora vayamos a lo que el Obispo Padrón le expresó al Correo del Orinoco. Para “su conocimiento y fines consiguientes” debemos informar que El Universal es un matutino de derechas mientras que el Correo del Orinoco es de “equilibrada izquierda”. Entrémosle al trapo. El Obispo Padrón reitera que el “…Gobierno es el responsable…” de “…garantizar la vida y la integridad de los venezolanos le corresponde al Gobierno Nacional…” (Idem, pág. 6, Política). Verdad verdadera pero el Obispo Padrón “se moja” cuando reconoce que “…el Ejecutivo Nacional puede pedir un apoyo a otros sectores [sociales]…en la Iglesia estamos dispuestos a colaborar, lo que no podemos es confundir roles…sin duda alguna que el desbordamiento de la delincuencia se debe a la situación del país, que está muy desequilibrada…[porque está presente] un gran desequilibrio social…[nos comunican los periodistas que el Obispo Padrón] mencionó el desempleo y la pobreza pero también mencionó el factor jurídico legal como es la impunidad…[como] también cree que se trata de un problema cultural, moral y de valores…” (Ibidem). Es decir, el Obispo Padrón puso sobre la mesa las variables de lo que considera como Iglesia cual buscaría “dialogar” con lo que llama como “Gobierno”, la entelequia.
Durante la entrevista suponemos que ni el Obispo Padrón ni los representantes del Correo del Orinoco trataron el tema de la “Democracia” en sus dos (2) conceptos: democracia representativa y democracia participativa; nos referimos a ello porque cuando nos acercamos a la Teología como base fundamental para poder comprender a la Verdad (con mayúscula) en tratando ambos conceptos socio-históricos conjuntamente con la “norma jurídica teologal” impuesta por Jesús de Nazareth: “…amar al prójimo como a uno mismo…”, en su praxis humana sustentada por ese contenido teologal de esa norma referida y su íntima relación impresa en el concepto de Democracia, obligadamente, la Conferencia Episcopal Venezolana tendría que asumir realidades históricas que, evidentemente, la CEV se niega a aceptar cuando, a título de ejemplo, confunden, en su discurso lógico-formal, al socialismo con lo que, conceptualmente, han denominado como “marxismo-leninismo” y, también, “castro-comunismo”. En ese marco referente, nos atrevemos sugerir la lectura del texto: “El primer socialismo. Temas, corrientes y autores” del catedrático italiano de Historia de las Doctrinas Políticas en la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad de Turín, Gian Mario Bravo (Akal Ediciones. Madrid, 1998, pp. 62).
En conclusión, nos preguntamos: ¿Qué estamos considerando cuando hablamos de Política de Estado, diálogo y responsabilidades sociales? Es decir, al tiempo, nos inquirimos en aceptando las responsabilidades del Gobierno Bolivariana: ¿cuáles son las responsabilidades de Estado que le corresponden a los actores sociales no gubernamentales? Históricamente y repitiendo las mismas palabras que nos comunicara el doctor Rafael Caldera Rodríguez en la ciudad de Beijing por aquel enero del año 2002, a unos quince (15) días del “4 de Febrero”, fecha de profundidad histórica, cuando nos expresó que “…Venezuela es un país presidencialista…” pero y la CEV debería ya aceptarlo, la Revolución Bolivariana ha impactado ese hecho histórico y esa realidad histórica con las responsabilidades contenidas en la praxis de la democracia participativa y sus expresiones comunales que no son ni tan diferentes a aquellas comunidades catacumenales romanas.
Nos, nos permitimos sugerir que dejemos la práctica cotidiana del pecado del “ángel caído” (la soberbia) y practiquemos las virtudes humanas y/o como lo expresó Jesús de Nazareth: “…dad al Cesar lo que es del Cesar y a Dios lo que es de Dios…” es decir, seamos responsables y vivamos la virtud del patriotismo.
