Seguido del carterazo salió disparado un puñetazo hacia el bandido por parte de una de las personas que transitaba por allí en esos momentos, más adelante de la entrada del MPPP la Cultura.
Más adelante porque aquello fue todo un show criminal- alguien sentenció que había sido hecho por esos refugiados que tiene el Ministerio de la Cultura en sus salones y eso lo saben los policías y los GN, pero nunca hacen nada al respecto.
Lo cierto del asunto, es que si el Ministro Rodríguez Torres está dispuesto, como lo ha dado a conocer, a enfrentar a los delincuentes a como dé lugar, ¿Por qué no empieza con un programa piloto de limpieza de delincuentes en las torres del CSB? ¿Por qué no se investiga esa realidad? Hay una gran cantidad de comercios en esas torres, cuyos gerentes saben cómo se bate el cobre, como es el trajín de los robos y la matraca, solo que no se atreven a hablar porque temen ser asesinados.
Realmente da pena el gran deterioro a que ha estado sometido el Centro Simón Bolívar. Fue bien gerenciado en sus inicios, cuando las caraqueñas y caraqueños solían pasear por sus pasillos. Hoy en día, las personas casi corren por esos pasillos para salir de ellos lo más pronto posible. Los delincuentes se orinan y hacen otras cosas y las autoridades lo saben. Si a nadie le interesa el destino de las emblemáticas torres, ¿Por qué no las derriban?
No creemos que institución alguna haya realizado alguna investigación para tomar una decisión sobre el futuro que le pueda deparar a las mismas, lo seguro es que nadie está a salvo en los pasillos de las torres del Centro Simón Bolívar.