Corrían los tiempos del puntofijismo lacayo, eran los años de juventud rebelde universitaria, buscando patria, me encontraba en las escaleras junto a los monederos de la plaza del rectorado de la UCV, esperando una reunión nacional con compañeros de la FCU y de otras universidades, rebeldes todos, a favor de una patria justa y libre, en mi condición se Secretario General de la Federación de Centros de Estudiantes de la UPEL, Maracay.
De pronto se me acerca un compa alto, moreno, con una barba al estilo del Che, con un jean, unas botas Frazani, camisa a cuadros y me pide un cigarro, se lo obsequio y por supuesto que llama mi atención su aspecto de Guerrillero y me pregunta que es lo que yo hago allí, y claro yo con unas botas militares, un jean, una Franela y mi inseparable boina, como simbolo de lucha, que hasta hoy conservo, y le explico que hago parte del movimiento estudiantil universitario, anti capitalista, opuesto a la dictadura pro gringa, adeco copeyana, y con una concepción Bolivariana y Guevarista, participando dentro de la dirigencia estudiantil, con miras a construir una patria libre y justa para todos, seguidamente me pregunta que si conozco a un hombre de nombre Chema Zhaer, a lo cual respondo con honestidad que no, entonces me explica que fue su papá y que fue un Guerrillero Falconiano alzado en armas y asesinado por los adecos-copeyanos, en la decada de los 60, razón por lo cual el y sus hermanos tuvieron que salir hacia Cuba, ayudados por Alí primera y en Cuba el se hizo Medico pediatra y la razón de su presencia en Caracas era conseguir apoyo para los campecinos e indios en Ciudad Bolívar, los cuales estaban siendo masacrados por los adecos y copeyanos con apoyo de los gringos y de la iglesia, traia oro para comprar armas y ayudar en la organización de los campecinos e indios para enfrentar esa arremetida Fascista y me pidio expresamente que una vez que yo llegase a Maracay convocara a una rueda de presa y denunciara todo lo que estaba sucediendo allí, que era desconocido para el pueblo Venezolano, y en efecto hice, pero además que preguntara en el pedagógico a los de la vieja guardia quien fue el Chema, lo cual tambien hice, le sugerí que se viniera para Maracay conmigo que allá yo le brindaba un espacio para que pudiera cumplir su misión y me dijo que no, porque tenía tareas pendientes en Caracas y mas nunca supe de él.
Pero cuando llegué a Maracay, hice todo lo que me pidio y le conté lo sucedido a un compañero que hoy es egresado de la escuela de sociología de la UCV y continuamos nuestra vida y nuestra lucha universitaria, pasaron unos años cuando de pronto leyendo un periódico de circulación nacional, aparece la noticia de que mataron al hijo del Chema, en un motín en una carcel Venezolana, con la misma historia que aquel hombre me habia contado, busque al compañero y le mostré la noticia, nos miramos y lo lamentamos mucho, yo en el silencio de mi hogar llore amargamente por la pérdida de ese valioso compañero, pero ese llanto de aquellos tiempos duramente humanos lo que hizo fue convertirse en fuerza para continuar la lucha de aquellos valerosos hombres hoy en dia, honor y gloria al Chema y a su hijo.
Chávez vive, la lucha sigue
todo el poder para el pueblo
volveremos por todos los caminos.