No comparto lo que dices, pero defenderé hasta la muerte tu derecho a decirlo.

Voltaire

En Venezuela no habrá paz si muere el diálogo entre el gobierno de Nicolás Maduro, y los factores políticos que se le oponen. Un país en conflicto, y sin diálogo será siempre victima del odio, y del miedo al otro. La insensatez política siempre es derrotada por la violencia, y el terror.

Tolerancia y diálogo indican el camino para vivir juntos en paz. Cuando la claridad de los puntos a debatir en el diálogo esté libre del miedo, y de la desconfianza hacia el otro. Lo demás es la gran alternativa hacia la guerra.

El dialogo no debilita la posición política de nadie, mas bien permite redescubrir lo mejor de uno mismo y del otro. Nunca se pierde nada con el diálogo. Este escribe la historia mejor, mientras que la confrontación abre abismos. El diálogo es el arte de vivir juntos. El diálogo es el don que debemos hacer de la revolución bolivariana.

Muchos radicales inopes de ambos bandos dicen en muchas de sus intervenciones a través de las redes sociales, y diversos medios de comunicación: que el diálogo es un camino débil y perdedor. Pero la violencia produce violencia. La intolerancia hace que resuciten los muros de odio, y el resentimiento social. Muchos analistas sensatos piensan, con mucha confianza que el diálogo escribe mejor la historia. El suscrito se ha mantenido al margen, ante los que reniegan del diálogo o sus resultados. El diálogo es, algo que no se puede medir con argumentos miopes o mediocres.

Mi opinión así como la de otros socialistas es una opción. Pero hay otra opción. La que consiste en insultar y descalificar a quienes, descartamos y condenamos la violencia, y propiciamos el diálogo, para poder expresarnos libremente.

El diálogo tiene que estar por sobre la insensatez del insulto. Y por su naturaleza, la Asamblea Nacional, era la instancia de discusión por su diversidad, y ser la real representación política del país, donde los más variados puntos se deberían conocer y, por supuesto, se iban a enfrentar en el debate las distintas posturas político-ideológicas disímiles.

Los venezolanos aspiran a que los integrantes al dialogo que asistirán hoy al Palacio de Miraflores hoy 10/04/2014 lugar escogido para ese magno evento por la paz, presenten, discutan y eventualmente aprueben o no. Los diferentes temas muy álgidos que son muy complejos y sensibles. Como, una Comisión Sobre Los Derechos Humanos, donde se aborden los distintos tópicos de gran relevancia para el resguardo y la promoción de la dignidad, la justicia y los derechos de todos los ciudadanos.

Esta mesa de dialogo debe tratar principalmente sobre los temas de los derechos humanos o sobre las regulaciones específicas de la convivencia humana, esto requiere de una discusión serena, respetuosa y responsable sin maniqueísmos ramplones.

Las posturas divergentes siempre existirán no solo son inevitables sino también enriquecedoras, cuando se dan mediante el debate de ideas, cuando se coloca la dignidad del ser humano por encima de cualquier prejuicio, comentario o acción discriminatoria e injusta.

Siempre existirán los argumentos válidos a favor o en contra de ciertas posturas específicas que pretenden adoptar diversos actores.

Una lectura apropiada, con una sosegada interpretación de la realidad exige la necesidad de arribar, con urgencia a escenarios donde el debate serio, y los acuerdos prevalezcan por sobre la insensatez del insulto, del menosprecio, y la descalificación mutua que saltan de la ignorancia, y de los prejuicios de todo tipo.

Sin embargo, todas las posiciones deben darse con aplomo y respeto, protegiendo y elevando siempre la dignidad humana, de los participantes en el lugar que le corresponde, por el solo hecho de ser hombre o mujer. Todas las posturas deben estar fundamentadas en una auténtica ética política. En el momento actual, este diálogo debe ser respetuoso. Ya que es justo y necesario, porque la opinión publica nacional e internacional nos estarán observando.