El 26 de mayo de 2.014, las Alcaldesas electas en San Diego y San Cristóbal pidieron, en la primera plana de algunos períodicos, respeto al gobierno para sus gestiones y yo creo que es al revés, si hubiera en ellas un mínimo de vergüenza, de conciencia ciudadana y de responsabilidad, lo primero que ellas debieron hacer es pedir perdón a todos los venezolanos por todos los muertos, heridos, detenidos, daños al patrimonio público y a la naturaleza que ocasionaron las guarimbas protagonizadas por V.P.; P.V.; A.B.P y por sus maridos Alcaldes. Pero, qué le vamos a hacer, ellos ven el mundo al revés y todo el tiempo tratan de convertir las víctimas en victimarios. Mal comienzo.
En cuanto a las elecciones municipales, analicemos lo que pasó:
San Diego es el enclave de la burguesía parasitaria de Valencia, que es la más reaccionaria del País. Una elección en este Municipio, es igual o peor, que en Chacao, Baruta y El Hatillo, la clase social de sus pobladores, que se sienten dueños del país, les paraliza el cerebro y votan, como ovejas, por sus intereses de clase. Si hubiéramos postulado al Papa Francisco para Alcalde de San Diego, los resultados hubiesen sido los mismos, Amén, de los problemas comunes que sufrimos todos los venezolanos por la guerra económica y el sabotaje a los servicios públicos, que ellos propician, aplauden, financian y luego los usan como excusa para votar en contra del Chavismo. Eso no tiene más análisis o explicación. Sin embargo, le recomendamos a la nueva Alcaldesa que revise las actuaciones de su marido, como Alcalde, para que no caiga en los mismos errores, no sea que quiera reunirse con él en Ramo Verde.
El caso de San Cristóbal es diferente, su composición social y clasista, es diversa y los ricos de San Cristóbal no tienen la fuerza política suficiente para imponerse electoralmente solos. El problema es que San Cristóbal es el epicentro de múltiples negocios ilegales, por su cercanía con Colombia: El contrabando de alimentos y gasolina, el narcotráfico, el paramilitarismo extorsionador, la trata de blancas, las remesas estafadoras al fisco, la inmigración ilegal, la presencia de intereses políticos colombianos antichavistas y toda clase de perversiones venida de nuestras fronteras. Por supuesto, que la FANB, la PNB, la gestión patriótica del Camarada Gobernador José Vielma Mora, al frente del gobierno regional y la presencia mayoritaria del Polo Patriótico y del PSUV, en las alcaldías foráneas a San Cristóbal, son una piedra en el zapato para el narco-estado paramilitar que pretende instalarse en el Táchira y su Capital. A estos intereses les conviene un Alcalde como Ceballos, o un títere de él. Ceballos está entrenado en el paramilitarismo, en el fascismo y sin conciencia de ningún tipo, con él los negociantes ilegales pueden entenderse de maravilla, sin ningún problema y si no digan ¿por qué fueron apresados 3 capos del narcotráfico en San Cristóbal dirigiendo las guarimbas?¿ A qué se comprometía Ceballos con esa ayudita? Así fue en el caso Daktari, que los Alcaldes amigos protegían a los paramilitares terroristas. Pero, cuidado que nosotros no somos bolsas y pueden tropezar con la misma piedra.
San Cristóbal no escogió, con sus resultados electorales municipales, entre la Paz y la Violencia, sino, entre la lucha patriótica en contra de las perversiones que vienen del otro lado de la frontera y el clientelismo permisivo que hace del delito fronterizo, ya descrito, un socio necesario. Adivinen Uds. de qué lado estaban los narco-dólares y la extorsión paramilitar, muy convincentes. Así es fácil ¡CHAVEZ VIVE!