Hagamos gimnasia mental. Si produjéramos todo lo que se consume en el país y las importaciones descendieran al mínimo, tendríamos el mismo desabastecimiento, pues con el contrabando hacia el exterior ubicado entre el 30% y el 40%, más el contrabando a lo interno a través de los buhoneros, los productos igualmente brillarían por su ausencia.
Aunque es de prioridad incrementar nuestra producción y dejar de ser importadores, lo que se quiere resaltar en este ejercicio es que en Venezuela existe el problema de carácter coyuntural de la desviación de los productos básicos y que debe ser combatido. No hay escasez de productos. Hay desabastecimiento, pues los mismos están colocados por mafias grandes y pequeñas en otro lado con otro precio.
No hace falta cruzar la frontera para ver esto, ni siquiera hace falta leerlo en un periódico. Vaya a Petare o Catia y encontrará abundancia de productos, pero con un precio especulativo que asalta al que lo va a adquirir. Por tanto, es sorprenderte ver algunos camaradas opinando gamelote y emulando a la oposición diciendo que todo es culpa del modelo económico implementado, cuando en realidad el contrabando demuestra la ineficiencia del modelo económico del vecino país, haciendo que su población tenga que adquirir productos contrabandeados con desespero.
En este sentido, ante el contrabando y la especulación interna, se va a implementar un sistema biométrico para combatir a lo que roban a la población venezolana, sean mafias fronterizas donde lamentablemente están involucrados algunos funcionarios militares o no, ó sean micromafias representadas en algunos comerciantes informales que extraen gran cantidad de productos para revenderlos a precios elevados.
No está demás mencionar que con el sistema biométrico, una persona comprará perfectamente lo que necesita en productos básicos sin ningún problema. La dificultad la tiene el que quiera comprar medio centenar de un producto básico en específico, pues el sistema biométrico se lo impedirá.
Ridículos se ven algunos compatriotas diciendo que el sistema biométrico es una tarjeta de racionamiento. Eso es lo que quiere la oposición en su afán de desorientar al pueblo venezolano que crean. Esto es un sistema que va dirigido a eliminar las mafias grandes o pequeñas, no a controlar al ciudadano común que podrá adquirir sin ningún problema los productos básicos y en cantidad suficiente.
A los camaradas que mezclan el problema estructural de la poca producción interna, con el coyuntural basado en el robo de las mercancías que comenzó con intensidad este año, deben comprender que para aportar ideas en pos de soluciones contundentes, se debe dar a cada problema su debido espacio, pues esos tópicos vienen cargados de complejidades fundamentales que de ser abordados equivocadamente traerían más perjuicios que beneficios.
Haciendo una breve reflexión sobre lo estructural referente al incremento de la producción nacional, se observa que la solución no es industrializar solamente, sino con quienes y, orientado a qué o cuales intereses. Se puede industrializar con grandes transnacionales, pero estaríamos colonizados a sus países de origen, eso sin mencionar que todas las riquezas que generen no habría la participación del pueblo en su disfrute. Ya tuvimos el oprobioso ejemplo de las transnacionales petroleras en el pasado que se llenaron de dinero y el pueblo vivía en la miseria y analfabetismo.
En el caso del sistema biométrico, se tiene que ver como una respuesta ante un problema C-O-Y-U-N-T-U-R-A-L, por lo que se debe apoyar sin ningún complejo, exigiendo además que se complemente con otras medidas, en lugar de hacer una terrible tempestad en un vaso de cristal que ni agua tiene, pues el problema no es el sistema biométrico en sí, ni él lo genera. El problema es el robo, a través del contrabando o la reventa interna, de los productos, que de no ser por esa situación sobrarían en los supermercados y abastos. Así pues no nos debe preocupar que el sistema biométrico sea una respuesta.
OTROS COMENTARIOS
-.- To be or not to be. Si una persona dice ser chavista pero dice que estamos en un modelo fracasado; si dice ser chavista y expresa que estas medidas son 'comunistoides'; si dice ser chavista y cree que es necesario financiar a los empresarios que siempre se han desvinculado con las necesidades del pueblo; si dice ser chavista y no entiende que los grandes intereses están en una permanente guerra económica; pues esa persona sin percatarse es un militante de la fracasada y caótica MUD.
-.- La Oferta y la Demanda. Aumentó a 30 bolos el Nac(z)ional, los días domingos. En ese periódico abunda el apoyo a la tesis del libre mercado cuando reza que se cobra más en proporción al aumento de la demanda. En el caso de este periódico elitista, cada vez es menos leído a causa de la disminución de compradores, es decir la oferta es mayor a la demanda y esta última va en descenso al pasar el tiempo. Por tanto, si se ciñe a lo que en él se publica sobre el precio que debe tener un producto en declive comercial, ese periódico debería ser el más barato de todos.
-.- MUD imita mal a los Consejos Comunales. Una de las características más resaltantes de los Consejos Comunales es la existencia de los voceros. Como se sabe, estos son encargados de difundir a terceros lo que se decide en la asamblea integrada por todos los vecinos. Por otra parte, los Consejos Comunales han sido sistemáticamente satanizados por la oposición y siguen señalando que este tipo de organización popular no sirve. En contradicción, la MUD($) acaba de adoptar la figura del vocero al que ellos le llamarán 'secretario ejecutivo'. Igual crean otras figuras como la de 'coordinación operativa' y la 'comisión electoral', que imitan a los diferentes comités existentes en los Consejos Comunales. La MUD($) descaradamente implementa un estilo que niega sus propios postulados.
-.- Dinosaurios en Venezuela. En estos días apareció la noticia del hallazgo del esqueleto de un dinosaurio, diciendo que es el primero encontrado en Venezuela ¿Dónde dejan a Francheski, a Diego Arria, Teodoro, Pompeyo a Ramos Allup, a Poleo y a Ledezma entre muchos otros? Ojo... no me refiero a ellos por su edad, sino por sus fosilizados pensamientos y paradigmas, impidiéndoles ver, que Venezuela nunca volverá a ser gobernada por personas que no creen en el pueblo. Hay dinosaurios de un grupo etario menor. Sólo hay que recordar las elecciones presidenciales pasadas, donde un pregallináceo prehistórico, mandó a desacargar... ustedes ya saben. Eso sin duda, no es de hombres de avanzada.