Si bien la corrupción alguna iglesia suele definirla como "…el uso de un cargo –sobre todo en el gobierno- para beneficio personal", yo le sugiero a esa iglesia, que consulte a Juan Roberto Zavala, que tiene una página en internet y se puedan documentar lo mejor posible sobre ese antivalor antes de intentar decir y/o sugerir que ocurre exclusivamente en los gobiernos.
Si nos vamos a la historia, en el caso de la iglesia católica no se puede esconder que los cargos de Cardenales y de los Papas, eran comprados y eso, amigos lectores, formó parte de la corrupción. El mismo Juan Roberto Zavala considera que, "Si bien los humanos compartimos muchos aspectos de nuestra vida en común y en nuestro interactuar en la sociedad nos encontramos con este fenómeno, que aunque consideramos no es consubstancial a nuestro ser, pues lo realizamos con conocimiento y voluntad, es decir, que habiéndose tenido la capacidad de elegir nos decidimos por no cumplir con una exigencia ética fundamental para el logro del bien común: la honestidad, dando paso a un fuerte individualismo, donde lo más importante son las conveniencias económicas y políticas. Es decir, el predominio de nuestra satisfacción personal, sin importar como, sobre los derechos de la colectividad".
Es que la corrupción la hemos estado viendo estos días, con eso que llaman bachaqueo y con el negocio de las colas, donde sujetos las hacían dos y tres veces y pagados para generar disturbios. Eso es corrupción como quiera que lo vean.
Para la gente que hace eso, la "ética fundamental para el logro del bien común" no cuenta. Como es corrupción lo que hacen los medios de comunicación social que se prestan para desacreditar a un país con el propósito de que sea invadido y robado sus recursos.
¡Eso es corrupción y de eso deberían hablar las distintas iglesias de mundo! ¿O es que acaso que el lavado de dólares que hacía el Banco del Vaticano no es corrupción? ¿Las mentiras de la iglesia católica no son corrupción! ¿No es corrupción que la iglesia hebrea no desmonte las mentiras de Netanyahu?
Si seguimos hablando de corrupción, no podemos dejar atrás el llamado lobby que hacen los políticos en el Congreso de EE.UU y en otras instancias mundiales, porque eso de pagar a los parlamentarios para que le den prioridad a unas y otras leyes, en desmedro de la población no tiene otro nombre que corrupción empresarial e industrial.
Y no es posible dejar fuera de este comentario las famosas comisiones, que han hecho muy famosos a una gran cantidad de personeros del mundo político y empresarial de estos días.
Para nadie es un secreto aquella conseja de los adecos, algunos de los cuales decían "pónganme donde haiga" así como la otra copeyana del príncipe pimentón, por aquello de estar presente en todos los guisos.
Es corrupto el sujeto que esconde los alimentos para venderlos luego mas caros y es corrupto el que cobra para hacer colas una, dos y tres veces y es corrupto el que ampara tales actitudes.
Entonces las iglesias deberían ser mas claras, honestas y hablar con la verdad por delante y no caer en ese lamentable y triste papel de la conferencia episcopal –así en minúscula- de negar realidades y mentir porque eso es corrupción.
Se puede hablar mucho de corrupción y de muchos niveles y sectores, por eso es importante que, quien quiera hablar de corrupción, pues que lance la primera piedra, que el río está lleno de ellas.
Lee el siguiente blog: wwwpertinentes.blogspot.com (Premio Aníbal Nazoa/2010) Mención Opinión)