¡O se produce!: ¿O la revolución se va al cementerio?

"Pero todo lo que uno desea, parece que por un burocratismo

diabólico, se demora, aún la muerte."…

Reinaldo Arenas.

En Venezuela se ha agudizado una necesaria crítica al burocratismo importador del 6.30. Muchos activistas sociales, incluidos militantes del gobierno, están levantando su voz acusadora contra este mal crónico de las colas, la escasez, inflación, especulación etc. El riesgo consiste en las elecciones de la AN este año 2015, ya que la aplicación de la dosis para corregir este virus parasitario de incapacidad, es el mismo que se aplica, cuando se ha pretendido anteriormente combatir esta bacteria con una dosis insuficiente de antibióticos: según dice la vieja ley, los parásitos más resistentes terminan por multiplicarse, haciendo con estos perversos controles burocráticos menos efectivo la débil aplicación del antibiótico contra la incapacidad. Si seguimos con este diagnostico equivocado, el remedio que se esta suministrando consiste en dosis mal aplicadas, que conducen a la desesperanza, y la resignación que terminarán por atrofiar, y multiplicar la inmovilidad laboral, la flojera, el bachaqueo, la especulación y el contrabando etc. y esas peligrosas sensaciones de la inconveniencia de que las revoluciones socialistas son un fracaso.

Los analistas más finos saben que la revolución bolivariana ha sufrido más por esta peste burocrática, que por la peste bubónica de la escasez y las colas. El burocratismo importador padre del dólar negro y la inflación, es el síntoma, y la causa de la decadencia, y derrumbe del proyecto bolivariano, hundiéndolo a todos los niveles en un mar de papeles, leyes y controles inútiles. Aunque las continuas críticas dejan apenas entreverlos, detrás del ineficiente burocratismo parasitario sumado ahora los militares, y los colectivos, van ahora los escribanos que no ven colas, ni escasez, sino pura propaganda politiquera anti ‘Obama’. La desconfianza entre los venezolanos hace necesario que alguien responda por cada acción fallida.

Desde esta columna en repetidas veces he criticado la paralizante cultura burocrática de Venezuela, la que expresa una repetida queja en las aberrantes colas: "estas cosas sólo ocurren en esta Venezuela". Las arcas del estado parecen estar exhaustas, y el trabajador en las colas esta siempre atento a los movimientos políticos de que esto desaparezca; pasa miseria viendo a veces, sin razones, como el ‘lumpen bachaco’ especula sin contemplación. No se, si se esta esperando una revuelta social, o que unos ministros competentes suban al gobierno para enderezar este despelote económico.

Gracias a esta cultura de la solidaridad automática, y al aberrante enroque, y del inamovible puesto público del incompetente, Venezuela comience a acostumbrarse a esta perversión: la emigración de su juventud profesional y trabajadora. Empiezan a emigrar para ser colonizados hacia: España, Estados Unidos y Panamá etc. Se han convertido en el siglo XXI, en receptores delos desplazados sociales.

El castigo de la emigración desde el gobierno, lo ven como insignificante; para el pobre profesional o trabajador es durísimo. Por eso el burocratismo no se preocupa por la política.

Todas las"revoluciones, y sus ideales políticos han degenerado en burocracia" la: URSS, Cuba, Europa Oriental etc. Por eso es bueno ver la película cubana: "La Muerte de un burócrata", de Tomás Gutiérrez Alea, donde van de la mano el burocratismo parasitario, la corrupción y el conformismo.

El burocratismo ha sido la muerte de todas las revoluciones la ultima fue la sandinista en la década de los ochenta y noventa. El Che Guevara, criticó en muchas oportunidades, y en muchos foros internacionales esta amenaza en los países en transición hacia el socialismo. En Contra el burocratismo se expresaba en estos términos: "ya sea que esta falla del motor ideológico se produzca por una carencia absoluta de convicción o por cierta dosis de desesperación frente a problemas repetidos que no se pueden resolver, el individuo, o grupo de individuos, se refugian en el burocratismo, llenan papeles, salvan su responsabilidad y establecen la defensa escrita para seguir vegetando o para defenderse de la irresponsabilidad de otros".

Ningún negocio en dólares podría hacerse sin la intervención, auxilio y garantía del gobierno, interviniendo en los valores bursátiles, los cambios de moneda, y las tasas de interés etc.

Es cierto que Venezuela hay burócratas talentosos, y mediocres. El burocratismo aplasta cualquier talento revolucionario que tenga amplitud de criterio, sensibilidad humana y amplitud de criterio, que conduzca primero a la productividad, y luego a elevar la calidad de vida del pueblo trabajador. Todo en perjuicio de los verdaderos trabajadores. El burocratismo es una forma de vida cómoda, corrupta y egoísta, y una forma de acelerar la desilusión colectiva. Las horas de trabajos perdidas en las colas matan el desarrollo de la patria. Lo peor que le puede pasar a un trabajador, y a su sociedad, es cuando sale a buscar un puesto en una cola para estirar el salario.



Esta nota ha sido leída aproximadamente 2200 veces.



Edgar Perdomo Arzola

Analista de políticas públicas.

 Percasita11@yahoo.es      @percasita

Visite el perfil de Edgar Perdomo Arzola para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes: