Tenemos que asumir que vamos perdiendo fuerza electoral Porque no se puede concluir en otra cosa. Se pasó de pecado el liderazgo forzado que circunstancialmente timonea la revolución. Pero también se pasó de incauto. Porque hasta el mas inocente de los militantes socialistas sabía, desde hace días quiénes serian los que irían al ruedo en diciembre. Sino miren la lista de “ganadores” y verán una repitencia crónica. Toda una truculenta operación indigna de verdaderos socialistas. Y fue una escogencia tan fallida que un candidato “salidor” impuesto por allá por Falcón, en una reunión muy concurrida soltó esta perlita, “Los EEUU dicen que somos comunistas..Mas comunistas serán ellos..!” vaya que calidad de candidatos, protestó un asistente. Son las aberraciones del caciquismo regional. Con razón el Polo Patriótico ya es una entelequia. Un legado de Chavez convertido en letanía. Apenas un grueso grupo de empleados y pensionados muy alejados de su totalidad de alguna manera obligada por las circunstancias, acudió escéptica al llamado electoral. Y eso que a última hora decidieron que votara Raimundo y todo el mundo. Ya todos, con absoluta seguridad sabían el resultado. Allí estuvo insidiosa y flagrante, la mano de las manipulaciones regionales, la alcahuetería de la cúpula partidista y la mano zurda de corruptos de un poderoso factor neo izquierdoide que a conveniencia, medra por los lados flacos de la revolución. En ese trípode se dibuja melancolizo el destino próximo de la revolución. Esta experiencia de este domingo no es cualquier cosa. Y si como cualquier cosa habrán de tomarlo quienes tienen la responsabilidad de asumirlo por su trascendencia, entonces momifican sus errores y sobre sale una calamidad. Calamidad que inmerecidamente le endosan a la revolución. Un valioso estrato de socialistas no acudió a las mesas este 28. La decepción y el frustre en el socialista de a pie no permitió el acercamiento las mesas pesuvistas.
Y uno no sabe ya, si ese será la genial advertencia que el liderato de la revolución por fin tendrá que asumir. Ya pasó este mal paso y viene un salto a diciembre, muy próximo al precipicio. Renquea la revolución para superarlo. Los profundos errores de los hijos que Chavez asumió como tales, están apunto de deslegitimar el mas hermoso proyecto en donde cifró las mejores esperanzas este pueblo, traicionado siempre, de Venezuela.