Que gustazo ver a una eminencia del país como José Vicente Rangel y escucharlo de vez en vez tan claramente, eso no lo hace infalible, pero es lo más cercano a una persona ecuánime, honesta y llena de patria.
En su discurso el día del periodista en Miraflores, no solo nos da una lección a todos nosotros, sino especialmente a aquellos que se dicen a sí mismos "críticos" del gobierno nacional siendo de nuestro bando, aunque escriban como si fuesen de oposición, tanto y tan profusamente lo hacen, que hasta la posición misma está haciendo uso de sus escritos para tratar de posicionar aun mas su proyecto. Críticos a los que no les gusta que se les critique, y de paso, usan el llamado a la crítica de Chávez para cobijar su saña.
Ese día en Miraflores José Vicente da una cátedra de cómo criticar sin perder su posición Chavista y revolucionaria. Reconociendo en primer lugar, que Maduro es quien está batallando con los dragones y que su mandato es legitimo y legal. En segundo lugar que se está en medio de una guerra económica, guerra, por cierto, que ciertos críticos han llegado al caradurismo de negar, guerra que está en desarrollo y que José Vicente no vacila en colocarle en su lugar, para que no se pierda la vista de contra qué y contra quienes se está batallando en esta guerra. Caso contrario a lo que hacen los críticos ad honorem que pululan por estas redes, sin reconocer ni siquiera que Maduro sea "el elegido", ponerlo en duda, y hasta poner en duda su Chavismo y su talante revolucionario. Atacándolo pues. No criticándolo, sino atacándolo, que es diferente.
Da tanto gusto escuchar a José Vicente, que no importa si después me acusa de lo que sea. Porque lo hace con tanto respeto y constructivismo, que todos lo escuchamos. Repito, no es infalible, a veces se puede pelar, pero cuando lo hace, lo entendemos y buscamos en su error algo positivo porque sabemos que aunque se equivoque de vez en cuando, hay que extraer lo positivo de lo que dice o escribe. Porque él es constructivista por naturaleza.
Algunos criticones que se dicen a sí mismos "Chavistas verdaderos", no solo quieren que se les lea, sino que se les obedezca, aunque no estemos familiarizados tanto con ninguno de ellos, solo desde la ventana comunicacional y desde un tiempo para acá. Estos criticones, que confunden la crítica constructiva con cualquier cosa, juran que es su derecho destruir, dividir, y cualquiera que les llame la atención, pues, es un asalariado, conformista, o que se yo, tal como la oposición nos ha atacado siempre, en una especie de supremacía ideológica.
En lo que si se le rompió el espejo a Jose Vicente, qué, repito, no es infalible. Fue en el pedido de "abrirse más a la gente" que le hizo al presidente. No sé por qué, pero de repente comencé a recordar lo que Maduro hace todos los días, y me pregunté, ¿Es que acaso Maduro y su gobierno de calle de todos los días no es estar abierto a la gente? Comencé a preguntarme como puede ser posible que José Vicente, que de seguro no recorre el país como lo hace Maduro, y todos los días, tal como también me imagino a los criticones desde la comodidad de su poltrona, sin recorrer, como dijo Oscar Heck en su artículo Pasado: "Eso es mentira, ¡este país no está hecho mierda!"
http://www.aporrea.org/ideologia/a209033.html
Quien recorriendo el País desde el extremo oriente hasta el extremo occidente, vía andina. Vio un país muy distinto al que publican en los artículos de los criticones y en donde sí se dio cuenta que solo en algunas capitales centrales y en las zonas fronterizas se palpa y se siente el desabastecimiento que causa el bachaquerismo, la especulación y la guerra económica.
Sera que José Vicente se dejó engatusar por la poltrona y ver la realidad según lo que él ve a su alrededor y no hacer estudio de lo que hay más allá de nuestras narices. Que lo hagan los criticones, eso es aceptable, sabemos que su objetivo es otro y no precisamente ser constructivistas. Que lo haga José Vicente, no hace otra cosa, sino sorprender.
Para sustentar mi sorpresa vuelvo sobre el asunto. Yo veo a Nicolás Maduro todos los días en gobierno de calle, en misión vivienda y en barrio tricolor. Lo veo rodeado de pueblo la mayoría de las veces, lo veo convocando siempre a algún grupo ya sea de trabajadores o empresarios, de artesanos, de pequeños industriales, de maestros, de juventud, de educadores, deportistas, convocando y creando consejos presidenciales. También veo que por donde el vaya se arma el alboroto de la gente que lo quiere ver y saludar. Me pregunto si José Vicente ve esas cosas o no. ¿O eso es truco de cámaras? ¿Me pregunto si eso no es estar abiertos? ¿A qué apertura se refiere? ¿Cuál es el país real?
Yo me pongo en los zapatos de Nicolás y me pregunto, ¿Es que acaso lo que yo veo cuando salgo todos los días es irreal? ¿Acaso yo me la paso en Miraflores solo atendiendo por citas?¿Que coño es el gobierno de calle sino eso mismo, abrirse a la gente?
A veces pienso que nosotros los Venezolanos revolucionarios no hemos superado todavía ese presidencialismo que caracterizó a la cuarta republica. Tanto no lo hemos superado que basta con leer algunos artículos, especialmente los artículos de los criticones consuetudinarios, en donde tal parece que Maduro debe ser el alcalde de Venezuela y el funcionario principal de cada institución, incluso algunos piensan que hasta debe ser el jefe del CICPC o la fiscal general. Es el que debe mandar preso a la gente, como si tuviese ese poder, por encima de fiscal o policía. Algunos hasta piensan que debe ser el que "personalmente" otorgue los dólares en cadivi. Pero bueno, eso es otra cosa.
Los criticones, al menos los mas reconocidos, son como los opositores, ven la realidad según su propio entorno, y con ellos se engañan a si mismos sobre lo que ocurre en el país. Los opositores creen que lo que ellos ven en las redes sociales refleja la realidad del país. Si eso fuese así, entonces entréguense por que al menos en mis redes, el 90% son opositores. Esa no es la realidad del país, y la prueba es que desde hace 16 años los Chavistas se han estado imponiendo en todas las elecciones. Por lo tanto, lo que refleja las redes nunca serán realidad.
Los criticones ven la realidad según su circulo cercano y su ambiente donde se mueve y ese defecto lo tienen muchas personas que tratan de explicar algo según su "punto de vista"
El último gran ejemplo fue el de las elecciones del domingo pasado. La gran mayoría de las caras que se ven de los electos para candidatos son caras nuevas, jóvenes. ¿Si eso no es abrirse más al pueblo, a la gente, entonces que lo es?
Creo que José Vicente se equivocó en esto. Se le rompió el espejo.
Y los criticones hacen fiesta con esto, pero no con el resto de lo que dijo, especialmente su opinión sobre Maduro y su gobierno. Su respeto y su reconocimiento contra la batalla que libra en contra de la guerra económica. ¡De eso no opinan nada!
joedracco@yahoo.es