El chantaje es común en el mundo político, lo usan con exuberancia, es raro el líder revolucionario que no haya sido acusado por la socialdemocracia de pertenecer al bando de la burguesía. Hasta a Fidel lo acusaron de culpable del golpe de batista, pero también a Trotsky y a Lenin de ser agentes alemanes, a Rosa Luxemburgo la asesinaron acusada de pertenecer al "enemigo" por oponerse a la guerra. Es que la socialdemocracia, cuando finge revolución es "gatillo alegre" contra los revolucionarios.
Era de esperar que el gobierno, después de deslizarse a la socialdemocracia, usara el recurso manido de esta acusación, ya se habían acostumbrado a la calumnia como argumento de los que no tienen argumento. Ahora, cuando el agotamiento de su política y la soberbia los lleva a terrenos pantanosos, profundizan sus ataques. Peligrosos tiempos vivimos, el nacionalismo simplón se desliza hacia el fascismo, esta verdad los incomoda, pero siguen el camino hacia las tinieblas, van nariceados por la derecha interna fascista. Ya hemos dicho que las elecciones burguesas son malas consejeras, pero más lo son los ejercicios militares en la frontera, tienen su propia dinámica, se escapan a la voluntad de los líderes.
Tiempos peligrosos vivimos, repetimos. Unas elecciones que están lejos de cumplir su papel de opio de las masas y unos ejercicios en la frontera, a los que no se les ve meta y menos conclusión, es algo así como jugar fútbol sin arco, o ajedrez sin rey: los movimiento son aleatorios, erráticos, a lo sumo llenan las pantallas de televisión y a los corazones de angustia.
En estas circunstancias, Diosdado nos ataca. A él lo respetamos, no le vamos a responder con nada personal, ni nos defenderemos de los ataques personales, nos limitaremos a repetir nuestras opiniones sobre la situación de la Revolución. Y esperamos que la discusión de estos elevados voceros se centre en los argumentos y no usen sus poderosos medios de televisión y prensa para la diatriba personal, así quien pierde es la Revolución y así, de verdad, quien se beneficia es la derecha externa.
1.- El Plan de la Patria fue falsificado para adaptarlo a la alianza con la burguesía y a la creación de una burguesía nueva.
2.- La alianza con la burguesía se selló en Miraflores conjuntamente con Cisneros y Mendoza.
3.- Los argumentos de que esa alianza era necesaria para elevar las fuerzas productivas inició, en la práctica, el camino hacia la entrega de la Revolución.
4.- La "dolarragia" hacia la burguesía, que alcanza miles de millones de dólares, fue el camino para engordarla y mantener contenta a la pequeña burguesía, mientras con dádivas se distraía a las clases despojadas.
5.- Simultáneamente, se implementaron medidas que elevaron en la masa la psiquis del capitalismo, sus valores; allí está el "dakazo".
6.- La crítica fue satanizada privando a la Revolución de sus mecanismos de relación con la realidad, así se fue formando una burbuja que aisló al alto gobierno, que sólo oía la lisonja, la aprobación.
7.- Pasó lo que tenía que pasar; al abandonar el campo Socialista, su esencia espiritual, al ser atrapado por el campo reformista, el gobierno entró en el mismo terreno de la derecha externa: perdió su fuerza, la espiritualidad, la intuición que había heredado de Chávez. Su discurso perdió credibilidad, su curso fue errante, allí están las firmas recogidas contra obama y nunca entregadas, por ejemplo, y el apoyo popular comenzó a mermar.
8.- Los problemas económicos que el mismo gobierno creó, la falta de conciencia del deber social en la población que el mismo gobierno horadó, nos llevan a la situación de hoy, desbordados por las colas, por el bachaqueo que aún no entendemos, el dólar elevado, los precios altísimos.
9.- Como corresponde a la socialdemocracia agotada, el gobierno tomó la vía de resolver los problemas con represión. Primero fue el barrio San Vicente, en Maracay. A las críticas por esa barbaridad, el gobierno respondió desacreditando a los críticos y poniéndoles pañitos calientes a la situación. Luego, La Cota 905 conoció el operativo, se justificó con que eran paramilitares y aparecen los colombianos, que poco a poco se hacen causantes de todos los males. Así llegamos a la frontera, situación que parece de plastilina, las justificaciones cambian en horas de acuerdo a las conveniencias. Todo comenzó con un raro ataque a un grupo de oficiales venezolanos, y ya va por emplazar a Colombia para que cambie radicalmente las características centenarias de esa frontera y la movilización de gruesos contingentes de tropas y arengas en defensa del territorio.
10.- Nosotros sostenemos que esas soluciones, colocar a los colombianos como causantes de nuestros problemas, es camino hacia el fascismo, abre la puerta a los monstruos que nos habitan.
Son diez puntos para comenzar la discusión, la única guerra que el gobierno no quiso dar, la guerra de los argumentos, la batalla de la crítica, el "operativo" de oírnos.
Sería bueno que Diosdado leyera este texto en su programa, sería un "Mazazo", pero si no lo hace aún pueden leerlo en Aporrea, en El Arado y el Mar. Qué bueno que aún podemos escribirlo. Pero sabemos que ese no es el carácter que hoy priva, de todas formas seguiremos opinando en los medios a nuestro alcance. Aprovechamos para agradecer a Aporrea, que con valentía, nos abre sus páginas. Sería sano que nuestros argumentos bajaran a la base del partido, en lugar del descrédito; o, mejor, junto al descrédito, no privemos a la base de argumentos para la discusión.
¡Viva Chávez!