Desde la aparición del hombre en la vieja Europa diversos han sido las formas de gobiernos que han administrado y dilapidado los recursos germinados en aquellas tierras. Hoy convertidas en verdaderas planicies yermas dado a los continuos abusos a las que fueron sometidas. Nadie puede dar con exactitud la cantidad de siglos transcurridos desde la aparición de las hordas dirigidas por jefes de clanes, pasando luego por la monarquía absolutista, después hacia la monarquía parlamentaria, hasta que posteriormente se conoció la democracia representativa, muy allegada al modelo de la democracia neoliberal. De eso han trascurrido más de seis mil años, lamentablemente la vieja Europa no ha resuelto los problemas del hambre, la vivienda, la educación, la salud, el desempleo, la corrupción, el narcotráfico y la paz entre los pueblos.
Los países de América cuyos gobiernos decidieron abandonar su dependencia de las potencias imperiales reciben constantemente la crítica de algunos gobiernos de la UE acusándolos de antidemocráticos, de violador de los derechos humanos, de terroristas, de autoritarios, de narco estados, de tratantes de personas y de cualquier delito que se les pueda ocurrir a los "pontífices" de la democracia y la libertad. Imposible resolver en menos de 300 años como república, los que ellos en seis mil no han podido remediar.
Juzgo que a los "pontífices", poseedores de la llave del arca que reguarda los arcanos de las leyes que sirven para gobernar el planeta, se le atascó la cerradura, o en peor de los casos, se les pudrió el cerebro y la parte que almacenan los recuerdos se les consumió. Estos sumos sacerdotes están agrupados en varios sectores, a tal grado que periódicamente hacen su aparición para zaherir cualquier decisión que tome un gobierno progresista. Estos "pontífices" están tan inextricablemente mezclado que actualmente constituyen una especie de Hidra sin una cabeza rectora pero que actúa a través de sus agentes operadores. Entre sus delegados están:
La jerarquía eclesiástica: absurdo negar el daño que le ha causado las diversas religiones a la humanidad y la peor de todas, en el mundo occidental, el catolicismo. Es indudable que desde la aparición de la religión de Cristo muchos de sus vicarios estuvieron ligados a los más cruentos colonizadores y tiranos. Es por esto que, para mantenerse el poder, los gobiernos dictatoriales, la Iglesia y el Capital incitaron a los ciudadanos y a los feligreses a pelear por estas instituciones. Basta recordar las cruzadas, que de guerra religiosa tenían lo que yo tengo de minotauro. Por lo general, cuando alguna de aquellas se ve seriamente amenazada por una revolución popular esta tres se coaligan para construir un bloque defensivo. En este caso, los poderes humanos y divinos guardan tan estrecha solidaridad que si uno de estos declina, los demás corren el riego del mismo destino. Es sorprendente escuchar, cuando el modelo político está en riesgo, a un dictador sin alma y a un capitalista sin Dios defender a la iglesia espiritual y deísta. Parece que la los "pontífices" de la democracia y la libertad unificados dentro de la iglesia, no advierten que no existe el reino de dios ni el de los hombres, que solo existe el reino de la justicia que permitirá al mundo vivir en paz. Por eso, ese viejo adagio que expresa "dar al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios" debe ser cambiado por: "dar al campesino lo que es del campesino y a al obrero lo que es del obrero". En el primer caso, se le entregará la tierra y en el segundo, un salario justo. ¿Cómo la jerarquía eclesiástica puede hablar de democracia si en el Vaticano gobierna una monarquía inquisitorial desde hace más de dos mil años? Los ensotanados, quienes pretenden actuar como "sumos pontífices" de la democracia y la libertad, no gozan ni de democracia clerical y mucho menos de libertad canónica.
La Unión Europea: dentro de esta institución se agrupan unos "pontífices" sin hopalandas, pero se comportan de manera similar a los vicarios de Cristo. Defienden desde sus trincheras, es decir desde sus cómodas butacas en sus despachos con aire acondicionado y calefacción, los intereses de los capitales mal habidos. Estas riquezas están enclaustradas en los avaros centros financieros, en las empresas energéticas, en los contaminantes emporios industriales, en las compañías de servicios entre los diversos entes que almacenan las riquezas arrebatadas a los países de los llamados "tercer mundo". La UE está conformada por veintiocho estados, con una particularidad, entre sus miembros están el Reino Unido, Francia, España, Italia, Holanda, Alemania y Portugal, es decir las antiguas potencias imperiales desarrolladas y enriquecidas con mano de obra esclava; imponiendo monopolios en sus colonias allende de los mares; aniquilando culturas ancestrales e imponiendo la cultural colonial; asesinando millones de hombres, mujeres y niños que lucharon por la independencia; matando de hambre a millones de seres humanos que deseaban liberarse del yugo opresor, entre las "nimiedades" de aquellos asesinos que presumen de ricos, cultos, blancos y cristianos. Todavía hoy utilizan los medios bélicos para avasallar a los países que se niegan entregar sus fuentes energéticas u otras riquezas, para eso dispone de la OTAN, el brazo armado de UE. Los "pontífices" de la UE cuentas con otros medios no tan cruentos como los actos bélicos, pero no menos peligrosos. Me refiero a los tratados de libre comercio para imponer sus monopolios y generar más miserias entres los pueblos. Paradójicamente, muchos países de la UE regidos por el neoliberalismo están afectados por un alto desempleo; los sueldos de los obreros se han deteriorado ostensiblemente; los logros sociales se han reducido; los problemas de educación salud y vivienda no se resuelven y cada día se agravan más; las leyes contra la libertad de expresión pretenden callar la disidencia; el porcentaje de las deudas de los gobiernos crece de manera desmesurada; la violación de los derechos humanos es público y notorio; las estafas financieras de los bancos las paga la clase media; la política exterior guerrerista conllevó a que los miles de refugiados de los países, que la UE está destruyendo, busquen refugio dentro de sus fronteras, entre tantas dificultades. Pero estos vicarios de la democracia y la libertad son quienes cuestionan y condenan los gobiernos progresistas en diversas partes del planeta.
El capital: escribir el capital es lo mismo que nombrar a EEUU, dado que por todo es sabido que al gran país de norte lo gobierna Wall Street. En verdad no me refiero a la calle donde está ubicado este centro financiero, me remito a los hombres que hacen vida en el corazón, mejor dicho en el hogar de la bolsa de valores de NY, donde se hacen los negocios y las estafas más grandiosas del planeta. Son los accionistas y ejecutivos de esas empresas quienes dictan la política interior y exterior que debe seguir el presidente de EEUU. Son ellos los que financian las campañas electorales de los candidatos republicanos y demócratas para después cobrar en especies sus "desinteresadas" contribuciones; son ellos los que deciden las guerras contra los países productores de petróleos; son ellos lo que quieren imponer el modelo neoliberal en el planeta a costa de la pobreza de otras naciones; son ellos los que aplican los monopolios; son los mismos que están contaminando el agua, la tierra y el aire; son ellos los que desean la cultura única para que a través de la globalización realizar negocios rentables; son ellos lo que quieres imponer los TLC para vender sus productos y quebrar las economías de los países económicamente más débiles; son ellos los que practican las torturas y violan los derechos humanos; son ellos los que controlan la tecnología y los medios de comunicación de masa, entre tantas de las perlas que los adornan. Son ellos los "sumos pontífices" de la democracia y la libertad.
Los medios de comunicación: me sorprende cuando veo y escucho algunos actores de la TV criticando el gobierno del presidente chavista MM, pero no me asombra la crítica sino la hipocresía de estos esperpentos. Estas joyitas jamás en la vida han criticado, por temor a poder el empleo, el daño que la TV le ha engendrado a la sociedad. Nadie podrá negar la influencia de este medio radioeléctrico para inducir a los jóvenes hacia vicio; a la prostitución femenina a través de su publicidad, telenovelas y concursos; a la transculturización; a la publicidad engañosa; a la homofobia; a la exclusión social; al racismo; al consumismo, a la desinformación; a la parcialidad política; al embrutecimiento de los televidentes entre los graves daños que estos medios le ocasionan a los jóvenes. Hoy los dueños de las televisoras, de los radios y de la prensa, los actores, los cantantes, los periodistas, entre tanto bicho, pretenden actuar como "pontífices" de la democracia y la libertad sin advertir que el rabo de ellos(as) todavía está echando humo por lo que no deberán acercarse a la candela.
Es importante que los venezolanos nos alejemos de la ignominia de seguir escuchando a tanto orador sin oratoria, de tanto moralizador sin moral y de tanto sabio sin sabiduría. Venezuela no necesita de "pontífices" de la democracia y la libertad, no podemos abandonar nuestro país en manos de unos charlatanes para servir de juguetes a unos bufones ignorantes mimetizados como vasallos del imperio.