Lo cierto es que no hay. Desaparecieron los huevos desde que se anunció el precio justo y la aplicación de sanciones para quienes especulen con ese alimento en particular. Es parte de la guerra, No hay dudas. Y, como lo hemos explicado desde hace rato, detrás de esa guerra económica están las transnacionales del petróleo, con Exxon-Mobil a la cabeza (no de huevo, por cierto) y el Departamento de Estado gringo con su Pentágono y su CIA desarrollando estrategias en contra del pueblo venezolano y su proceso de independencia absoluta con nombre de Revolución Bolivariana y Chavista.
Pero también está la ruina local conformada por apátridas que "especulan pero dan empleos", al igual que prefieren lanzar a los basureros grandes cantidades de huevos u otros alimentos, antes que venderlos a precios justos. Total, para el capitalismo, su objetivo máximo, que es seguir explotando a las trabajadoras y trabajadores, no lo van a interrumpir. Prefieren botar los productos antes que regalarlos y saciar el hambre de personas que los necesitan, porque los explotadores no van a alterar sus niveles de ingresos, que se verían afectados y, mucho más en medio de estos planes políticamente desestabilizadores, generadores de inflación artificial y creadores de terror sicológico entre las mayorías que no consiguen los productos que necesitan y, por lo cual, terminan culpabilizando al gobierno de Nicolás Maduro que, finalmente, es su objetivo inmediato para "recuperar" el poder.
El capitalismo es perverso, no lo olvidemos. Este sistema de muerte sólo persigue la acumulación de capital en pocas manos del mundo entero. Por eso todo intento por querer generar un nuevo sistema, construir un mundo diferente y posible, abrirse paso hacia un postcapitalismo, hacia una sociedad de iguales, hacia el socialismo, tal como lo ensaya Venezuela a través de su Revolución Bolivariana y Chavista, es algo que van a impedir al costo que sea.
A nuestra Patria en construcción socialista, la están atacando desde que asomara el liderazgo de Hugo Chávez en la rebelión popular y militar de 1992. En la medida en que ese proyecto de Patria ha sentado bases y crece, más duros y contundentes son los golpes que se le asestan. Los capitalistas y sus estrategas imperiales gringos, quieren que nos rindamos, que abandonemos la pelea, que les dejemos el camino libre para seguir hambreando al pueblo. Hoy se metieron los huevos quién sabe dónde. Lo cierto es que afirman estar perdiendo… No se dan cuenta que lo que en realidad están perdiendo es el poder. No se dan cuenta que Venezuela es solamente un foco más en la lucha internacional del proletariado. Y que unidas y unidos, definitivamente, con Bolívar y Chávez, ¡venceremos!