La derecha apátrida y traidora han hecho de todo desde hace diecisiete años para arrancarnos la vida por pensar diferente, votaron contra la constitución bolivariana, única en ser redactada por constituyentes elegidos con su sistema electoral y ser sometida con ese mismo sistema a aprobación popular; pero ellos ahora dicen que nunca han actuado contra el pueblo.
Hijos del pueblo que una vez fueron, adoctrinados y en perfecta formación ideológica rechazan sus orígenes y desconocen aquella parte de su sangre que quedo en el barrio, se sintieron una casta muy selecta y predestinada para paralizar la producción petrolera nacional e imponernos el gobierno de las transnacionales que los adoctrinaron, muchos de ellos todavía no pueden conciliar el sueño por la destrucción del país que fomentaron; pero ellos ahora dicen que nunca han actuado contra el pueblo.
A lo largo y ancho del país brotan y florecen las respuestas del proyecto bolivariano para satisfacer en cantidad y calidad las necesidades del pueblo en salud, educación y bienestar, saboteo va y viene a diestra y siniestra, es su aporte; pero ellos ahora dicen que nunca han actuado contra el pueblo.
Generan, desarrollan y apoyan todo tipo de acción mafiosa como el acaparamiento, la especulación, el desvío de alimentos y medicinas hasta el grado de la autodestrucción; pero ellos ahora dicen que nunca han actuado contra el pueblo.
Cada vez que cambia el viento, provocan embestidas que desgarran nuestras comunidades, dejando muerte y destrucción, las últimas generaron 43 asesinatos, 873 vecinos lesionados y múltiples daños a bienes que soportan la estructura social; pero ellos ahora dicen que nunca han actuado contra el pueblo.
Importaron e instalaron los grupos con tácticas paramilitares porque ellos son más inteligentes y preparados que el populacho, el hijo que adoptaron pronto les empezó a cobrar en carne propia su existencia; pero ellos ahora dicen que nunca han actuado contra el pueblo.
Siguen alimentando y engordando su odio social, tal cual marrana para Diciembre, los gringos no escatiman recursos ni sorprenden, por eso tampoco llama la atención que en nuestra acera exista tanto compatriota fomentando la divergencia y estirando la mano para recoger su migaja; pero ellos ahora dicen que nunca han actuado contra el pueblo.
Llega el 6 con la 20, vital para la historia patria que escribimos y en ésta oportunidad ya no me acompañaran físicamente Don Carlos ni Doña Conchita, mis viejos bolivarianos y patriotas; evocaré sus sonrisas de satisfacción al recibir su pensión y ese solo motivo, basta para reafirmar la continuidad del proyecto bolivariano y permitir que otros queridos viejos puedan disfrutar esos mismos beneficios…
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