Luis Brito García, a quien nadie puede acusar de salta talanquera y "agente de la CIA", hablando de la guerra económica, en artículo reciente, ha dicho, palabras más o menos, que en esta guerra "sólo combate un bando".
Con anterioridad, este humilde servidor expresó, en artículo puesto en esta página, que "en la guerra económica pareciera que sólo hay un combatiente, quien agrede, con todos sus recursos y los que le prestan desde fuera, mientras el otro se limita a quejarse. De paso, el agresor, con descaro y hasta con desgano, infiltra sus fuerzas entre las del pueblo y el gobierno. Y algo más grave, ha logrado que de estas, muchos se pasen, como corruptos y bachaqueros". Además dije, "esto pareciera un combate boxístico donde uno de los pugilistas lanza puños de todo calibre y en seguidilla, mientras el otro se limita a quejarse y reclamar al árbitro por aquello".
Vladimir Acosta, esta mañana, en un canal oficial, donde había dejado de aparecer hace mucho tiempo, tanto que de manera sonriente pero irónica lo dejó saber, dijo lo mismo que he comentado arriba, sólo que en otro estilo.
Pero Vladimir, también puso énfasis en un tema que nosotros hemos tratado de manera reiterada; el relacionado con el tipo de partido y esa "como confusión", según sus palabras, entre partido y gobierno donde, "el presidente de la República lo es también del partido y los ministros parte de su dirigencia". Por cierto, por decir esto, un personaje cuyo apellido es el mismo de un alto dirigente del Psuv, por segunda vez, me envió un asqueroso correo; tanto que lejos de ofenderme sentí que había puesto el dedo en la llaga. Aparte que casi me ordenó tomase ejemplo de otros personajes, por él mencionados, justamente de esos a quienes reclamo pisen tierra y asuman el rol correspondiente a intelectuales de la izquierda como los que aparecen en el título. Pero insistiré, porque ese es un asunto sustancial, crucial, que hay que abordar, pues el gobierno no puede seguir secuestrando al partido y este comportarse tan burocráticamente como oficina de gobierno. A los simplistas, esos que critican "los criticones se limitan a hacerlo y no proponen", les invito a revisar en aporrea la buena cantidad de artículos, que desde hace años, he publicado sobre ese tema.
En una de esas reuniones que ahora se hacen, que en primer término deben ser para revisar, primero lo que se ha hecho, o sea diagnosticar, aquello de venir del pasado, para proceder a definir lo que debe hacerse, reconocer, identificar los aciertos, que mucho de eso hay, y también los errores que no dejan de ser unos cuantos, como los dos que enunciamos al principio, no en el pensamiento nuestro, que nada significamos, sino en el del de los altos intelectuales mencionados. Alí Rodríguez Araque, otro personaje de alta significación dentro del chavismo, dejó sentada su opinión que es no es nada distinta. Sobre todo, según se dice, repitió algo que unos dos meses atrás, expresó en un programa de José Vicente, en el sentido que hay que hablarle a la gente, al pueblo todo con la verdad en la mano; no ocultar nada y a partir de esta verdad tomar medidas pertinentes. Eso, el pueblo, lo va a entender, lo que no haría si le ofrecen una idea distinta a lo que acontece.
Luis Brito García, en un reciente trabajo que tituló, según aporrea, "Regalos sin navidad", en su ameno estilo y hasta elegancia, ajeno a la rudeza de muchos compatriotas que hacen honor a aquello que "se deben decir las vainas como son", que no es más que decirlas de manera agria y hasta agresiva, hace una crítica, que muchos compartimos, contra los regalos presidenciales. Se refiere, esto lo ponemos nosotros, como aquel de la señora a quien se le cambió su carro, hallado accidentado, en la vía autopista de La Guaira, por uno cero kilómetro; y los tantos regalos que el venezolano conoce. La conciencia revolucionaria y pertenencia se adquieren con el trabajo, la lucha por la conquista y las relaciones materiales que se traducen en solidaridad, en compartir o conciencia de clase. Quien recibe de gratis suele volverse un saco sin fondo.
Para Vladimir Acosta, esa conducta, que repito, con elegancia Luis Brito crítica ha criticado, aparece ante los ojos de la gente, incluso el beneficiado, "como si estuviesen comprando su voto".
Pero casualmente, los tres personajes citados aquí, aparte de hacer algunas recomendaciones, como las han venido haciendo otros de menor calificación como el suscrito, también hablan de un gobierno como paralizado y llaman a abrirse al pueblo todo y no permitir que la revisión se quede en los cenáculos y en pequeños grupos que han venido dirigiendo. Así, como también les parece un grave problema, que el propio presidente reconoce, porque los hechos son demasiados contundentes, el hecho que a esta altura de la historia nacional, más de cien años después de iniciadas la explotación y exportación petrolera, aparezcamos atado, como por el cuello, a la renta de esa actividad. Nosotros, hemos dicho, que eso es más grave, porque después de 18 años gobierno bolivariano, con metas como esas y reordenar la distribución poblacional de Venezuela, cosas que están asociadas, pareciéramos estar si no peor, lo que explica esta crisis de ahora, igual que al principio. Todo porque todo este tiempo nos ilusionamos con el barril de petróleo a 100 dólares.
Menos mal que esto no lo dice y ha venido diciendo solamente este pobre escribidor, sin nombre ni títulos académicos, muchas veces alcanzados por haber conciliado con los poderosos y mandantes, sino figuras notables.