"Los horizontes constitucionales, son horizontes de expansión y ampliación, que en medio de la feroz confrontación política y social van a permitir acelerar los cambios revolucionarios". Eso fue lo que escribí en el último artículo del año 2015 (ver Diario la Nación del 28-12-2015). Por eso digo que este año 2016 será el de las profundas decisiones que deben tomarse, para salvar la revolución de las garras del fascismo político que se ha adueñado del poder legislativo y, desde donde pretenden arremeter contra la institucionalidad democrática del Estado venezolano.
Ni por una centésima de segundo olvidemos los métodos utilizados por la derecha para llegar a esa instancia de poder. Tampoco olvidemos todos los actos de sabotaje y de terrorismo que cometieron desde el mismo momento cuando Chávez llegó al poder. Sobre ese prontuario montaron la arremetida contra un pueblo, incluyendo a chavistas y escuálidos, quienes fueron victima de esa locura irracional de la guerra económica que, al final, logró quebrar la consciencia de muchos venezolanos y venezolanas, quienes terminaron culpando al gobierno de todas esas aberraciones, cometidas precisamente por sectores poderosos nacionales e internacionales, que no van a descansar hasta borrar el chavismo como corriente ideológica, que tiene un legado constituido en el pensamiento de Hugo Chávez y en las fuentes del socialismo.
En nuestro caso, para la construcción del modelo político que quiere consolidar el proyecto revolucionario, debemos estar claros que el capitalismo y el socialismo son dos modelos antagónicos por naturaleza y esencia de contenido y de valores éticos y morales. El capitalismo es la muerte, el engaño, la manipulación, la explotación, la opulencia para unos pocos y la gran miseria y la pobreza para millones de seres humanos; en tanto el socialismo es la vida, la solidaridad, la verdad y la posibilidad cierta de la consciencia plena de vivir viviendo. Como vemos, se trata de de dos proyectos y modelos antagónicos y los mismos se definen y consolidan en las arenas de la lucha política.
Ahora bien, cuando se utilizan métodos diferentes en la lucha política, tal como lo hizo la oposición, entonces es necesario que el chavismo se defienda con todos los métodos constitucionales existentes, porque si la derecha fascista aplicó todos los actos terroristas, de guerra económica y todas las triquiñuelas para llegar a esa instancia de poder; el gobierno debe activar todos los mecanismos para detener esa locura opositora de dislocar la economía. Las decisiones deben tomarse por encima de las voces, que siempre han sido un freno para las acciones de gobierno. Ha llegado la hora para que nuestro gobierno revolucionario tome las medidas que tenga que tomar y que no le tiemble la mano al Presidente para meter en cintura a cualquier envalentonado opositor, que quiera dárselas de demócrata salvador.
Mañana martes de 5 diciembre es clave y estaremos pendientes de los acontecimientos y ver cuáles serán los primeros petardos que lanzará la oposición contra la institucionalidad democrática del Estado venezolano. Esperemos a ver, porque ellos vienen con todo su odio a descargarlo y en el chavismo se tiene consciencia de eso. La lucha tiene que ser ahí, en la Asamblea, y si la oposición se desboca, entonces el Estado debe actuar, es decir, tomar las grandes decisiones.