No es una herejía como tampoco comparamos cualidades humanas entre ambos revolucionarios y el señor licenciado, Ramos Allup. Tratamos de exponer diferencias en las concepciones históricas entre estos revolucionarios, en mención, y quien, a nuestro juicio, ha traicionado el "pensamiento de don Rómulo Betancourt", es decir, el "pensar y ser adeco", lo significativo del "Juan Bimba", de las interacciones en cárceles de "adecos y comunistas" pero, fundamentalmente, por obligación familiar y por razonamiento ético, la memoria de familiares que se adscribieron a aquellas históricas tesis fundacional-venezolanas de los social-demócratas de izquierda por aquellos años de principios de la década de los 30 del siglo próximo pasado.
Para mejor precisión exponemos el análisis del historiador, doctor Germán Carrera Damas, sobre el Rómulo Betancourt de aquellos años cuando se carteaba con don Juan José Palacios, Salvador de la Plaza y don Pedro Juliac, con interesantes e ideológicas citas romuluanas cuales obligan a la profunda reflexión conceptual; es decir, para su mejor comprensión, nos referimos a la profundidad del pensamiento en estudio de Betancourt en aquellos momentos de exilio frente a las tendenciosas frases golpistas de Ramos Allup.
Aún más desglosado para las precisiones obligantes cuando reflexionamos sobre esas frases del actual Presidente de la Asamblea Nacional de la República Bolivariana de Venezuela, el referido, y las frases y decisiones que se expusieran durante el "Golpe de Abril" en escena. En su discurso conocemos, perfectamente, la "continuidad del golpe" cuando las frases y los actos son, exactamente, los mismos a los desarrollados en Miraflores junto a don Pedro Estanga, liderando aquel "golpe" como avalador del mismo; es decir, los accionares recientes de Ramos Allup son la aseveración y reafirmación del "proceso golpista", de la "negación histórica", del asumir la "dependencia al Imperio", del más aberrante "kow-tow" al poder financiero estadounidense y, por último, al tratar de desarrollar la "guerra civil en Venezuela", busca impulsar el llamado a la aplicación de la "Carta" al Gobierno constitucional y electo democráticamente de Nicolás Maduro Moros, de buscar la anuencia y el beneplácito de la OEA y las decisiones de intervención militar por y en las NNUU y, en última instancia, a la invasión de una coalición de ejércitos multi-nacionales, probablemente, invasión que se realizaría desde el occidente de Venezuela para, posteriormente, continuar la misma invasión desde el oriente venezolano. Esa es la realidad del escenario que está impulsando el licenciado Henry Ramos Allup en perfecta negación de lo real-significativo que representa "Juan Bimba", el "adeco alpargatado", el "perraje", el racismo multicultural, del Poder Popular como se viene imponiendo por la ultra-derecha, los contra-revolucionarios, los apátridas y mayameros en las redes sociales.
Hemos conocido a los tres políticos en mención titular. A Tirso Pinto en Estocolmo, por puritica casualidad momentánea. Nos pareció ser una persona muy respetada por el entorno que lo rodeaba; era, evidentemente, un líder y una persona de principios que pudimos ratificar con la lectura y análisis en su auto-biografía: "Un tal Tirso Pinto". Por cierto, nos inquieta la pregunta: ¿cuál historiador de la Asamblea prestará su pluma e intelecto para escribir la biografía del licenciado Ramós Allup, actual Presidente temporal de la Asamblea Nacional de la República Bolivariana de Venezuela?
A Henry Ramos Allup lo conocemos gracias a nuestra trayectoria laboral en el Congreso Nacional de la República de Venezuela; curiosamente, siempre nos produciría esa sensación de no ser "bienvenido" entre sus propios y dilectos correligionarios adecos. ¿Ejercería en alguna ocasión como jefe de la bancada adeca? En el plano internacional nunca sería incorporado en las importantes delegaciones legislativas que buscaban alcanzar una amplitud de espacios en y para la diplomacia venezolana. Se consideraba que no se encontraba a la altura de don Luis Esteban Rey, de don Pedro París Montesinos, Presidente de Acción Democrática, a quien le organizamos su primer y único viaje a China cual describiera en amplio y muy objetivo artículo publicado por El Universal, ni siquiera de David Morales Bello, mucho menos de quien fuera nuestro Embajador en Panamá, doctor Cesar Rondón Lovera, quien nunca olvidaría la tarjera navideña durante nuestra misión en Beijing. En definitiva hay "adecos y auto-denominado-adecos".
A Baltazar Ojeda Negretti lo conocimos por los caminos de Jorge V, Johan III y Luis IX, persona seria, estudiosa y sólida en sus conceptos de vida. Solidario y humanista y profundamente nacionalista a la vez que internacionalista. Su norte era poder alcanzar una realidad en Venezuela que permitiera la horizontalidad de la distribución de las ganancias. Reflexivo y persistente en sus objetivos, defensor del 04 de febrero y militante revolucionario a tiempo completo. Extensas conversas hemos mantenido con quien fuera su más cercana amistad, conversas que nunca han podido alcanzar conclusiones sobre la personalidad de Baltazar Ojeda Negretti por así era él, "Elías", como, comúnmente, lo conocíamos.
En este orden, cuando tratamos de analizar estas diferentes personalidades en mención, cuando incorporamos a otros personajes históricos y presentes de la Política Nacional de Venezuela, cuando reflexionamos sobre qué tratamos de alcanzar en nuestra Patria, qué significa, realmente, la evolución en perfectibilidad de la cotidianidad del bienestar social del venezolano, cómo mantener la dignidad que alcanzamos tanto durante el proceso de la Independencia desarrollada por don Simón Bolívar como en los chucutos momentos de los procesos históricos desarrollados por líderes caudillistas, por auto-denominados como nacionalistas, de políticos acomodaticios a las circunstancias temporales del siglo XX en su temporalidad necesaria, de políticos angustiados por los vericuetos por donde se había desarrollado la realidad histórica de la Historia Contemporánea de nuestra Patria, Venezuela, particularmente por el proceso neo-liberal de privatizaciones, independientemente todo ello de los quehaceres político-ideológicos de cada actor en escena hasta el real y significativo momento del triunfo electoral de Hugo Rafael Chávez Frías, la figura de Henry Ramos Allup no aparece mientras que las históricas personalidades de Tirso Pinto y Baltazar Ojeda Negretti están impresas en el quehacer histórico del siglo XX de nuestra Patria, Venezuela.
Ahora bien, realmente, qué significa Henry Ramos Allup en las actuales circunstancias históricas en pleno proceso de reingeniería de la Revolución Bolivariana y Chavista. Más arriba hemos mencionado algunas ideas que tienen como base fundamental y de responsabilidad histórica. En ese orden, llama la atención la entrega humillante de la "democracia cristiana", de nuevo históricamente, a un concepto "chucuto" de puntofijismo pero así es la actual dirigencia del "social-cristianismo", sí lo prefieren, del concepto "popular", tan ideológicamente hispano.
Nos, nos permitimos dudar, en una muy seria objetividad y en profundadidad intelectual y por conocimiento personal, que Eduardo Fernández hubiera "negociado" de manera tan humillante como lo ha aceptado quien trata de ser líder social-cristiano, Julio Borges, entre otros líderes católicos que se abrogan ese derecho asumido; negociar con ese neo-concepto-adeco (sic) que significa y trata de representar el licenciado Ramos Allup y su "patota de amargados y fracasados", esos quienes niegan la Historia de Acción Democrática, pero, camaritas, "las ansias del Poder" es la más profunda debilidad intelectual de los débiles e inseguros políticos.
Es decir que en el actual análisis internacional en referencia a los copartícipes-ideológicos demócrata-cristianos y social-demócratas, en el actual escenario legislativo venezolano, nos referimos al status quo político alemán, deberán estar meditando sobre las impulsivas alteraciones de un equilibrado geopolítico que permitía cierto balance entre poderes entre ambas orillas del Atlántico.
Es decir, tratar de imponer un "escenario imaginario de Poder" desde la Asamblea Nacional de la República Bolivariana de Venezuela contraviene, profundamente, los propios principios-bases-conceptuales y fundamentales de lo real-significativo de la "Democracia Representativa" cuando más de la profundidad conceptual de la "Democracia Participativa".
Pero ¿qué significa y qué se busca desde ese "escenario imaginario de Poder", desde la auto-denominada como "social-democracia-criolla-actual" en connivencia con el social-cristianismo-popular? Reiteramos y repetimos.
La social-democracia que representa Ramos Allup, únicamente, trata de alcanzar la alteración total de la "Paz Nacional"; es decir, "la guerra civil", ya que tratar de alcanzar Miraflores por "golpe de estado militar" es, demostrativamente, imposible no únicamente por el carácter bolivariano y chavista de la FANB sino porque el sector civil, seguramente, se mantendrá "en casita".
Pero la decisión, evidentemente, alcanzada, en conjunto, por todos los partidos y organizaciones políticas que se auto-componen en la denominada, Mesa de la Unidad Democrática, MUD , esa decisión que los corresponsabiliza del escenario desarrollado en histórica ofensa a los Símbolos Patrios con ademanes groseros de un personaje a-histórico y a-patria, ha obligado a las más altas autoridades de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, FANB, a expresar sus contundentes declaraciones con contenidos de "consejas a lo Bolívar y Chávez" cuales, evidentemente, no han sido escuchadas por las "huestes golpistas adeco-empresariales" cuando desde ningún partido político, ni organización política, ni líder alguno de la MUD se han distanciado de tamaña humillación a la Historia de Venezuela, al Poder Popular de Venezuela y del resto de la América Latina Bolivariana y Chavista.
Pero ¿qué se busca con tamaña acción irracional? Evidentemente, el proceso en escenario similar a aquel que se desarrollara durante la "Guerra Civil española"; es decir, la "comandita" conformada por "lo adeco-empresarial y Pentágono" necesitan, por necesidad de su propia supervivencia en el tiempo histórico, impulsar e imponer la alteración de "la Paz Nacional" con la finalidad de continuar desarrollando lo que hemos denominado como la "confrontación final" entre una realidad en curso actual del sistema capitalismo en profunda crisis conceptual y el proceso profundo del desarrollo de políticas sociales desde la aplicación inteligente de la distribución en lo estructural apoyándose en cambios profundos en lo super-estructural que significan, en última instancia, una "división internacional del trabajo humanista".
Pero ¿cómo están tratando de desarrollar ese escenario bélico? Se está imponiendo una "matriz de opinión" de corte racista en las redes sociales cual se sustenta, precisamente, en el retrato de don Simón Bolívar rechazado por Ramos Allup sobre el argumento del volver a imponer el "verdadero retrato", el óleo de un Bolívar de tez muy blanca y estampa europea. Es, en última instancia, el regreso al "pie en la cocina" de los mantuanos y de los comportamientos alienantes de las clases medias acomplejadas quienes tratan de alcanzar el reconocimiento de clase de sus tutores mantuanos aquellos en permanente "kowtow". Curiosamente, cuando nos movemos por la pinacoteca bolivariana conocemos la amplitud de versiones de la figura de don Simón Bolívar que muestra la realidad del hombre histórico que caminara por los Llanos, por los Andes con su piel curtida, inmerso en sus enfermedades, en algunas ocasiones pintado al óleo avejentado y demacrado por las edades y los caminos caminado; pero ello no obsta para que el rancio mantuanaje, en actitud de su "lucha de clases", trate de mostrar, de nuevo, al Bolívar de la estatua y del óleo euro-céntrico.