Sé de antemano, que Néstor Francia no leerá este artículo porque tiene poco tiempo y ese poco tiempo se lo dedica a la lectura de artículo exquisitos o con mucho pedigrís y no tengo ninguna de estas dos condiciones. Mi interés entonces no es focalizar mi atención en un artículo que publicó Néstor Francia. Intento sí, plasmar una inquietud que me surgió al leer este artículo de Néstor con el título: "Las vanas ilusiones de Schemel, José Vicente, Villegas y Puchi"
Creo coincidir con la idea, que El PSUV y el gobierno por un lado y la MUD por el otro, no están muy interesados en dialogar porque políticamente se alimenta de ese no diálogo. Esto no niega por supuesto, que Chávez hizo un esfuerzo real en torno de este asunto del diálogo y fue su gran metida de pata. Chávez en dos oportunidades políticas de plena confrontación perdonó y convocó a un dialogo. Dejo las cosas como en borrón y cuentas nuevas. Pudo promover un diálogo, pero tenía que haber cobrado políticamente los dos mandarriazos que recibió la oposición con el golpe y el paro petrolero. Pudo (literalmente hablando) cortar cabeza y dialogar con lo que se podía dialogar.
No creo que sea totalmente cierta la precepción de Schemel, según la cual hay una tercera vía (nuevo sujeto social) que está dispuesto a un diálogo así por así con la derecha. Creo que el dialogo hoy por hoy carece de líderes que puedan encausarlo. No hay o no se visualiza ni en el gobierno ni en la oposición referencias con capacidad y posibilidad de llevar esto a feliz términos porque ese diálogo reclama fuerza que no es ni el PSUV ni es la MUD.
Ambas fuerzas, que lucen con poder no tienen (curiosamente) el poder para imponer nada y frente a eso, juegan a la polarización que es una casa con ventana y puertas herméticamente cerradas. Apuestan a eso.
No concibo un dialogo político y en una situación como esta, como tomarse un café con alguien y hablar cosas. Un diálogo político no necesariamente es una conversación o una negociación. Puede ser también una señal enviada desde una instancia política con capacidad de respuesta y con propuestas. El PSUV luce agotado con o sin congreso de la patria. La MUD tiene el mismo signo con o sin Asamblea Nacional.
Es posible que haya otros intentos de diálogos y que esos intentos terminen en nada. Lo que si luce necesario, es comenzar a ocupar un vació político que ha venido dejando el PSUV y que la MUD mantiene menos de medio, no porque tenga una política que recoja el sentir de sus seguidores, sino por estar inyectando un odio que lo mantiene. Así se sostiene.
Desde hace un tiempo, es el momento de crear una nueva referencia en el campo de la izquierda. No será fácil, pero es necesario disponer de una fuerza política en el campo de la izquierda que sirva de interlocutor de un amplio sector, que desea que este proceso no continué la ruta del retorno. Esta nueva referencia, si es importante para abrir un camino al dialogo a los que pensamos que el chavismo es una opción para impulsar el país que queremos.
Esta fuerza es necesaria para convencer a otros movimientos políticos que no se percatan del agotamiento del PSUV como partido.
¿Qué pueden acordar el gobierno y la oposición? No veo ahí situaciones que compartir. Es posible, que acuerden más dólares para darle continuidad a la estafa y financiar a los que quieren volvernos con AD-COPEI-PJ y otros derivados para sincerar la liberación de precios, que no las vienen metiendo poquito a poquito como lo exigía fedecámaras.
No es verdad lo que dijo Maduro en una entrevista con Ernesto Villegas y que Néstor Francia cita en este artículo. La derecha tiene un proyecto claro desde hace tiempo. Es su mismo proyecto de la IV y del gran viraje. Con ese proyecto no cabe un espacio para dialogar, no porque lo diga yo, sino porque los hechos con perdón y todo lo han demostrado. El diálogo es ahora de la izquierda con una nueva referencia para impedir el retorno. Ese es el diálogo que es necesario y para ello se requiere una nueva referencia que puede ser Marea Socialista, los Movimientos (círculos) Bolivarianos y otros colectivos locales y regionales.