No suelo hablar mucho por estos medios. Los egos son una vaina sería, y por cuatro cosas que uno dice, luego tiende a creerse cosas que no son.
Acabo de leer un artículo peculiarmente grave y obsceno de un señor llamado Jesús Chua Espinoza en el que, bueno, lean ustedes mismos como se expresa del compañero Nicmer Evans: http://www.aporrea.org/
No voy a entrar a calificar este escrito, ni a su escritor, puesto que, siendo un señor mucho mayor que yo, me siento a obligado a guardar mi respeto, aún cuando no sienta ningún tipo de respeto por lo que el señor exime.
Lo que si voy a hacer es permitirme darle un consejo: Respete a quien piense diferente, respete a quien opine diferente, y es más, trate de ser cuidadoso con su crítica, mire que en este país habrá muchos que no reconocen el color del verdadero fascismo, pero otros no lo pelamos cuando lo vemos, más aún cuando se hace pasar por "revolucionario".
Usted dice que Nicmer es su objetivo militar... Roguemos, señor Espinoza, que al compañero Nicmer no se le caiga un pelo, puesto que la payasada le puede salir cara no solo a usted, sino a un gentío. Sepa usted señor Espinoza que Nicmer no está solo. Y aunque le cause gracia, muchos venezolanos, hartos de tanta vaina, vemos tanto en el compañero Nicmer, como en todas esas voces que hoy se mantienen siendo críticas dentro del chavismo, nuestra única esperanza dentro de la sucia y corrompida política venezolana.
Con democracia y libertad todo, con fascismo NADA. Dejen quieto al que está quieto
Me despido recomendando al gobierno de Nicolás Maduro desmarcarse de esta clase de mensajes de corte abiertamente fascista, miren que si algo nos unió desde el principio al comandante Chávez, fué precisamente eso, el ANTIFASCISMO.
