En guerra avisada no muere soldado
y si muere es por descuidado
Refrán popular
Tengo buenos amigos adecos; el lunes en la mañana, cuando el sol se había arreciado, haciendo sudar a cualquier persona en la calle, me encontré a uno de ellos, pañuelo en mano, secándose la cara. Siempre he pensado, que es más fácil dialogar con un adeco, que intercambiar con un socialcristiano; lo cierto del caso, es, que en medio de la conversación le pregunté: ¿Estás listo para la marcha del 1 de septiembre? El compañero me vió con el rostro contrariado, para responderme sin ningún titubeo: ¡Ni que me lleven en avión! Volví a interrogarlo, casi entre dientes: ¿Y eso, por qué? rápido respondió: ¡Soy adeco opositor, pero no pendejo!
Esa opinión de un opositor, llama la atención, pero al cogollo de la MUD ¡Nada que ver! siguen cometiendo los mismos errores del pasado; no aprenden la lección, ni siquiera ayudándolos a deletrear. El tiempo transcurre, y siguen despreciando la "cosecha" del 6 de diciembre, por un motivo muy sencillo: ese no era su verdadero objetivo; lo echaron en saco roto, sin darle el verdadero valor; pero, cada vez se acuerdan de esa valiosa masa de votantes, para sacar a la calle, como carne de cañón, y así cometer todas las locuras del pasado.
Todo el mundo recuerda: el 11 de abril del 2002, cuando un grupo de irresponsables desvió una marcha -los mismos de hoy- con los resultados muy lamentables: muertos y heridos; desde ese momento no han dejado de tocar los tambores de la guerra; ahora andan anunciando con mucha anticipación una nueva jornada para el 1 de septiembre, con una desafinada guerra "psicológica", tratando de meterle miedo a no sé quién. La desesperación los lleva por el mismo camino, sin entender que el pueblo a pesar de la grave situación económica , no quiere nada con violencia, como pretenden algunos irracionales.
Todas las convocatorias en los últimos meses, han terminado en unas concentraciones muy raquíticas; no hayan como despertar al pueblo para lanzarlo a nuevas aventuras; los anuncios en boca de sus dirigentes para el 1 de septiembre, vienen espantando a más de uno; no se oye un llamado a la paz, y el diálogo; siguen con el mismo libreto del pasado, adelantando tempestades para el día de la "gran" toma de Caracas.
En todos los anuncios de los dirigentes opositores –oral o escritos- dejan escapar sus malas intenciones: ¡Claro! son los mismos del 11 de abril; hablan muy envalentonados, y convencidos de conseguir el objetivo trazado; el señor Omar Barboza Gutiérrez, en un artículo titulado "El primero de septiembre" dejó esta "píldora": "La jornada debe durar hasta que logremos el cambio que Venezuela necesita" como dice el refrán: "A buen entendedor pocas palabras"
El "gobernador" errante Capriles Radonski, desde el mismo momento de ser electo en el estado Miranda, emprendió su interminable peregrinar por todo el país; el objetivo: lanzarse nuevamente a la presidencia de la República; ni las derrotas lo enseñan, sigue pregonando una supuesta dictadura, después de haber tomado la embajada de Cuba por asalto ¡Más cinismo, imposible! Ahora es uno de los furibundos promotores de la marcha.
Antes estas perspectivas, y expectativas, lo único que deseo, es no ver nuevamente la capital, manchada con sangre de inocentes, y a los dirigentes convocantes escondidos, o preparados para adelantar la carrera, al saber la hora exacta de prender el zaperoco; no es la primera que actúan de esa manera, sin importarles la suerte de un pueblo, amante de la paz y la libertad.