La XVII Cumbre del Movimiento de Países No Alineados, Mnoal, que congregó autoridades gubernamentales de más de 100 países de Asia, África, el Caribe y América Latina, dejó claro algunos asuntos que comentaré a continuación.
La realización de este evento en suelo venezolano demostró el posicionamiento que tiene a nivel mundial nuestro país, que preside el Consejo de Derechos Humanos de la ONU y ahora también asume la presidencia del Mnoal por tres años.
Los miembros del Movimiento, nacido en los años sesenta para defender la soberanía de sus Estados de la injerencia de ejes imperiales, expresan su apoyo al presidente legítimamente constituido Nicolás Maduro, una vez que reconocen que el Gobierno venezolano ha sido atacado por parte de la derecha internacional mediante una campaña de descalificación con fines desestabilizadores.
Un prueba de lo anterior es el decreto injerencista de Obama que nos califica de una amenaza inusual y extraordinaria, el cual rechaza el Mnoal. Además, repudia el golpe parlamentario recién perpetuado en Brasil. Y clama por una Organización de Naciones Unidas más democrática.
La referida Cumbre ratifica el éxito de la diplomacia de paz e iniciativa al diálogo, tanto aquí como fuera de Venezuela, por parte del Gobierno Nacional. Este discurso es totalmente afín al de sus países miembros demostrando que nuestros ideales son compartidos a nivel global. Al contrario, los diputados opositores desde el Parlamento mostraron nuevamente su verbo excluyente cuando su presidente Ramos Allup arremetió contra los participantes de la Cumbre.
Indiscutiblemente, la participación de la nación venezolana en el Mnoal representa un triunfo similar al que tuvo el expresidente Chávez en 2005 en la Cumbre de las Américas cuando contó con la solidaridad de presidentes como Néstor Kirchner y de Lula Da Silva haciendo valer su visión inclusiva desde la democracia participativa de los gobiernos progresistas.
Una prueba más del acierto de nuestra nación en el Mnoal es que Ban ki Moon, secretario de la ONU, felicitó a Venezuela por reunir a los Estados que integran el Movimiento, comprometidos en erradicar la pobreza y promover el desarme.
Finalmente, es indiscutible el avance desde el Poder Ejecutivo, en las materias diplomática, estratégica, política y social, en esta XVII Cumbre, a pesar de que los medios de comunicación de derecha quisieron ignorarla y así ratificar que son instrumento de las arremetidas golpistas contra nuestro país.