El empresario capitalista Pérez Abad, alto funcionario y consejero económico de este gobierno, declara. Veamos la noticia:
(Caracas, 06 de febrero. Noticias24).- Durante su intervención en el encuentro Rebelión Productiva 2017 del Congreso de la Patria, en el estado Zulia, el presidente del Banco Bicentenario del Pueblo, Miguel Pérez Abad, dijo que esta actividad amplía, por primera vez en 100 años de República, la participación del empresario.
El máximo vocero del Primer Banco Socialista agregó que este día "los empresarios han sido incluidos dentro del Partido Socialista Unido de Venezuela, como un mecanismo para influir en el desarrollo de los instrumentos de políticas públicas necesaria, para hacerles propuestas al presidente del partido y desde allí poder empujar soluciones para la construcción de la patria".
Dijo que "estos espacios son para oírnos, para hacer planteamientos, pero también para trascender las formas en que hemos venido relacionándonos, en este caso desde el sector productivo y el Estado venezolano, y en términos generales con la sociedad".
Vuelve Pérez Abad con el mismo discurso que tiempo atrás produjo la reacción de algunos sectores chavistas. Ante la resistencia, el empresario volvió a las catacumbas, no la cristiana, sino esa de ahora donde se agazapan los empresarios capitalistas a esperar mejores tiempos. Parece que esos vientos a favor ya les llegaron, los asaltantes del poder perdieron cualquier mesura, ya no tienen vergüenza, aupados por las declaraciones de la alta jefatura, se lanzan abiertamente por el camino capitalista. Además, tienen la osadía de decir que están infiltrando al Partido para influir en el desarrollo de las políticas del gobierno. Y el Partido Socialista Unido de Venezuela, pasmado, anestesiado, castrado, no reacciona.
El Comandante Chávez un día, con valentía, declaró que había dejado de ser pendejo, de creer en la oligarquía, en los empresarios, en el capitalismo. Se apartó de la tercera vía y se enrumbó al Socialismo, se hizo verdaderamente Revolucionario, verdaderamente Chavista.
Cuando Chávez murió los oportunistas internos asaltaron el poder y torcieron aquel rumbo. Que cada uno cargue su cruz.
Nosotros le preguntamos a Diosdado, y con él a los sectores más honestos de la dirección del Partido Socialista: ¿dejarás que la gesta heroica del 4 de febrero termine en esto: con Pérez Abad, descarado, y como símbolo de los tiempos, contrabandeando empresarios en el partido de Chávez, reuniendo capitalistas en el Congreso de la Patria, entregando el legado del Comandante?, ¿o irrumpirás con la misma honestidad y lealtad a los principios del 4 de febrero y con un gesto valiente recuperarás el decoro chavista en medio de tanta entrega, tanta traición?
Ya no caben dudas del giro de este gobierno hacia el capitalismo, es vano el esfuerzo de los asaltantes por oscurecer la realidad, inútil hablar de "rebeldía productiva," de "nuevo modelo", ofrecer sus manos para hacer capitalismo. Ya queda claro que esto no es chavismo, no es Socialismo. La traición evidente dispensa cualquier lealtad. ¿Cómo pasará Ud. a la historia? ¿Como el último chavista, el que calló cuando la Patria necesitó su grito, el que prefirió el silencio cómodo a la incertidumbre de los hombres con decoro, o pasará a la historia como el que cumplió su deber siempre que la Patria reclamó su esfuerzo, cumplió el 4 de febrero y cumplió ahora cuando el sueño del Comandante se pierde en las manos de unos pocos oportunistas sin más épica que el disimulo y la farsa?
