"La política es asunto de civiles, los curas a sus templos
y los militares a sus cuarteles".
La elección de la Constituyente ocurrió como estaba prevista en el guion elaborado por la Comisión nombrada para tal efecto. Habíamos dicho: "La elección será un gran triunfo por cuanto el gobierno chavista va a elegir los constituyentistas, seleccionados entre los militantes más afectos y confiables, sin competencia con candidatos adversos. Esa elección no tiene riesgo. Los resultados serán los planificados por el presidente Maduro y ratificados por el Consejo Nacional Electoral (CNE). Pero, ese aparente gran triunfo, será pírrico, por cuanto el gobierno al ganar la batalla, perderá la guerra." (Tozudez y victoria pírrica. Aporrea 23.07.2017).
Acertamos hasta en la cifra de electores que sería anunciada - entre 7 y 8 millones - que corresponde a la más alta votación obtenida por el chavismo cuando tenía todo a favor: emotividad de las mayorías nacionales, chequera petrolera para dar y regalar, abastos y supermercados surtidos de alimentos, farmacias surtidas de medicinas, igual las agencias de repuestos, ferreterías, almacenes y todo lo que sirve al consumismo propio del capitalismo. La población disfrutaba la bonanza económica heredada de la llamada Cuarta República.
Pero este cuadro descrito, hace años desapareció, fue sustituido por la escasez, la carestía, el desabastecimiento que trajo hambre por falta de alimentos, enfermedad por falta de medicinas, ausencia de servicios hospitalarios, pobreza por falta de trabajo, la moneda hecha polvo por la devaluación indetenible, la inflación no tiene techo. Fue así como, la emotividad que las mayorías nacionales tenían por el chavismo fue amainando y se transformó en las grandes protestas que durante los últimos cuatro meses han estremecido calles, avenidas y plazas del país con más de un centenar de muertes y numerosos daños materiales. Es el rechazo de las mayorías nacionales a la violencia instaurada por el gobierno con sus políticas antipopulares: hambre, pobreza, desempleo.
Si cuando tenía todo a favor, la mayor votación obtenida por el chavismo fue de 7 a 8 millones ¿Cómo entender que conserva la misma votación si se ha desatado la protesta y rebelión a escala nacional, 100 muertos, numerosos heridos y detenidos, barricadas en carreteras, calles y avenidas, enfrentamiento con la Asamblea Nacional, con el Ministerio Público, con la comunidad internacional? Ante la intransigencia del gobierno en atender el reclamo y atender las necesidades de la población, la paciencia de las masas se rompió y ocurrieron las acciones destructivas de algunos centros de votación en los estados Táchira, Mérida y Trujillo. Los centros de votación quedaron desiertos de electores, ayer domingo. Ante estos hechos ¿Cómo aceptar que la cifra de participación que da el CNE es veraz? Años atrás las poblaciones del Valle del Mocotíes (Bailadores, La Playa, Tovar, El Peñón, Santa Cruz) votaban en forma masiva por los candidatos chavistas. En las últimas elecciones, esa votación se ha expresado contra el chavismo. De igual manera ocurre en la mayoría de municipios del Estado Mérida. En Tovar, los cinco centros de votación fueron destruidos, las máquinas y materiales electorales quemados. La carretera que une dichas poblaciones está sembrada de barricadas desde hace meses, igual en las calles. La paralización es total. Ayer domingo no se movía ni una mosca. El abstencionismo se hizo presente por convicción o por temor.
Si esta es la situación vivida en el Estado Mérida, y a escala nacional ¿De dónde saca el CNE la cifra de 8 millones de votantes? Se debe tener presente que no hubo testigos de mesa, contrarios al chavismo, que firmaran las actas. Fue una elección del chavismo, por el chavismo y para el chavismo. En consecuencia, es una Asamblea Constituyente chavista, en la cual las mayorías nacionales no figuran, no participan y la rechazan.
