Muchísimo costó y mucho sigue costando mantener la paz en un ambiente de guerra; alcanzar el grado de no violencia necesario para que venezolanos y no venezolanos podamos vivir en esta Tierra de Gracia con cierta tranquilidad.
Más, tal como resulta obvio, esa paz no impide que el enemigo siga utilizando todos los medios a su alcance para recuperar el control político, económico, financiero y militar sobre nuestro país y la región latino-caribeña, indispensable para su sobrevivencia como hegemón occidental y de ser posible, mundial.
En paz el gran capital ha invadido y expoliado a Venezuela desde hace siglos. En paz y con sordina, se ha valido de la voracidad y avilantez de personajes y empresas del sector privado local y de funcionarios de distinto rango para saquear a PDVSA, CADIVI, CENCOEX, AGROPATRIA, etc. etc. etc.
Y ahora, por si fuera poco, ese mismo gran capital y sus socios locales, disfrazados de inversionistas interesados en el "desarrollo" del país conspiran descaradamente para conseguir prebendas y divisas en condiciones preferenciales por un parte de un gobierno y un pueblo custodios del proyecto nacionalista, independentista y antiimperialista impulsado por el comandante Chávez.
Con la misma oferta burda y engañosa que nos vienen haciendo desde hace rato – un desarrollo en los términos vigentes en el mundo occidental, estructuralmente inalcanzable por países capitalistas periféricos como el nuestro y políticamente indeseable por ser exclusivo y excluyente– pretenden aprovecharse de la crisis económica y política provocada por ellos y gobiernos cómplices para seguirse enriqueciendo a costa de la inmensa mayoría de los venezolanos.
Lo que ellos no saben es que esa mayoría ya no es masa sino Poder Popular. Pueblo con P mayúscula, constituido hoy en Asamblea Nacional Constituyente, que sabe por experiencia propia que ese modelo de desarrollo y el apoyo prestado a los conglomerados trasnacionales y sus aliados no le ha traído nada bueno al país.
Poder Popular dispuesto a asumir su rol de "columna vertebral de la nueva economía socialista" destacado el presidente Maduro en la instalación del Congreso de Consejos Productivos de Trabajadores.
Poder Popular presto a aprovechar la paz en medio de esta ofensiva para ejercer su protagonismo histórico, consolidarse y defender en cualquier circunstancia la independencia y soberanía de Venezuela y de los venezolanos.
Pueblo consciente de la urgencia de desarrollar sectores productivos nacionales soberanos, paralelos a la producción estratégica necesariamente inserta en el mercado internacional. Consciente de la necesidad de mirar hacia adentro y hacia el Sur para transformarse en un nuevo tipo de productor - consumidor libre de imposiciones y restricciones foráneas, adaptado a nuestras tradiciones, a nuestras potencialidades y a nuestras necesidades reales.
Venceremos