"El que no teme a la muerte,
no teme a las amenazas".
Pierre Corneille
En una conversación con un amigo, terminé recomendándole la lectura del artículo: ¿Qué persigue Henry Falcón con la dolarización? de Jesús Faría en esta página: APORREA. ORG: El tema es tratado con mucha claridad por este economista, y constituyente, hijo de un obrero, autodidacta, quien llegó a la secretaria del Partido Comunista, en una etapa muy difícil de la lucha de nuestro país. Lo cierto del caso, es que, apenas le asome la sugerencia, la rechazó con una respuesta muy firme, en el cual, parece tener algo de razón: "He dejado de abrir esa página por lo siguiente: algunos articulistas, han pasado a las amenazas contra dirigentes del proceso, y dan la ligera impresión, que de pasar algo, ellos son los primeros en salir a buscarlos…"
La opinión de este amigo, me hizo profundizar en mi preocupación, porque no es la primera vez, que a través de los medios van creando las condiciones para arremeter contra personas, y muchas veces comienzan en la misma comunidad, donde residen dirigentes comprometidos con el pueblo; los atacan con tanta saña, para hacerlos parecer unos delincuentes. En el caso, antes mencionado por el compañero, las pruebas están a la vista de todos los leyentes. Son varios los títulos de artículos, con un mensaje impregnado de odio, el cual nos da una idea de la mente de estos señores; algunos lo hacen de manera muy sutil; otros se van por la calle del medio. Para prueba transcribo, los títulos de 3 artículos: 1) Todo se sabrá un día y entonces descubriremos como y quién mató a Chávez por primera y segunda ocasión 2) ¿Cómo serán las últimas horas de Diosdado? 3) Ya vendrán por ustedes.
Esto nos demuestra, como el odio, cuando empieza a recorrer el cuerpo, se manifiesta en cualquiera actividad, para terminar, poniendo ciego al "contaminado". Desde el mismo momento de perder el poder la oposición con el Comandante Chávez, empezaron alimentar el deseo de venganza, con un resentimiento espantoso, al extremo de llegar a incendiar algunos sitios del país, acabando con muchos bienes del estado, el cual, en estos momentos de una crisis económica sin precedente, hacen falta, como el agua para mitigar la sed.
A todo esto se han sumado un número importante de personas, hasta hace poco comprometidas con el proceso bolivariano; luego de apartarse–tienen todo el derecho de pensar, como mejor les parezca– empezaron a vociferar el discurso de la oposición venezolana, pero con la particularidad de coincidir con lo más rancio, y reaccionario de los factores opuestos al Presidente Nicolás Maduro; para no solamente demostrar un odio visceral, sin ningún planteamiento político de fondo, sino que han caído en el mismo fangal, donde se encuentran los lacayos: Borges, Ledezma, María Corina Machado entre otros, hasta convertirse en los auténticos voceros del imperialismo norteamericano en nuestro país.
Lo cumbre, y hasta risible de estos señores columnistas, es que, para ellos, no existe otro enemigo, sino Nicolás Maduro. Todas las acciones, lanzadas desde el norte por el gobierno estadounidense no cuenta, y por supuesto no tocan a los opositores venezolanos, porque solamente –lamentablemente– entienden lo que escriben por el número de lectores cautivos, y por eso utilizan títulos sensacionalistas, llenos de odio, mentiras, sin llegar a profundizar en las verdaderas causas de la grave crisis. Han llegado al extremo de obviar la lucha frontal contra la corrupción, porque tienen una sola idea: la salida del Presidente, como lo pronosticó uno de ellos, y por supuesto fracaso, cuando escribió: ¡Maduro saldrá en menos de 10 días del poder! el (14/1/2018). Desde ese día han pasado más de dos meses, y los que se han ido son otros–Pedro Pablo Kuczynski– y el fracasado adivinador ha perdido credibilidad.
