La noche de este 15-S fue inmensa como la mesa de Guanipa. Esperaba con ansiedad la madrugada para irme a los corrales y ver mis animales. Herman Escarrá con el contenido de una declaración ofrecida a la agencia de noticia Efe, me ahuyentó el sueño y no hubo manera de agarrarlo.
Yo supongo, que es lo que naturalmente hago, que cuando se es actor en un proyecto y nos piden hablar de ese proyecto, uno no pierde la oportunidad y se afinca en los más importante o sublime.
Si uno habla de él con los amigos se emociona y las palabras se le enredan en esos puntos básicos. Si lo hace frente a una agencia de noticia, la emoción se administra y se cuida de los menores detalles, asegurándose de poner las palabras en los puntos que permita vender las ideas o bondades del proyecto en cuestión.
Vamos que Hermann Escarrá, nos comunica a través de la agencia de notica EFE, que la nueva constitución tiene dos hechos importantes. Uno de esos puntos que Escarrá resalta en la entrevista, nos asoma que la nueva constitución "será más severa para castigar a quienes incurran en el delito de traición a la patria"[i]. Respire profundo, o sea, tomé un saco de aire puro de la mesa de Guanipa, lo mantuve por largo rato en mis pulmones y me pregunté muy ingenuamente: ¿Cuál traición a la patria? ¿De cuál traición hablamos? Traición es traición o no hay traición buena y traición mala.
Ya con ese chorro de aire puro y con olor a bosta de vaca en mis pulmones y dándole oxígeno a mi cabeza, reconocí que el delito de traición a la patria merece castigo severo, lo que me costaba entender es, que tan trascendentes es este delito, respecto a otros, cuyas consecuencias pudieran ser más desastrosas que traicionar a la patria y esa pregunta que me taladraba la cabeza, cuál delito. ¿El de pedir intervención militar externa en el país? ¿Y el delito de traición a la patria y la revolución que la ANC aprobó con la Ley de Promoción y Protección a la Inversión Extranjera? ¿Y las Zonas Económicas Especiales?
Dejé el tema hasta este punto y me fui por una vainita más trivial y me pregunté:
¿Tiene mayor significado para la vida nacional, los días feriados existentes y lo decretados que el delito de traición a la patria? ¿Tiene más trascendencia para la vida de la nación, ser un país de compradores y vendedores que un país de productores? ¿Podemos seguir con esta flojera que arrastramos históricamente?
Yo hubiese saltado en una pata, si en vez de leer lo que leí, hubiese leído una pendejada peor, que me dijera, que en el nuevo texto constitucional se colocaría un capitulo para castigar muy severamente la holgazanería y la falta de interés por el trabajo productivo y ese afán de comprar y vender, que es lo que nos tiene acabado. Saltaría en una pata, si Hermann Escarrá en una próxima declaración nos dice, que ese capítulo donde se castigaría severamente la holgazanería y la falta de interés por el trabajo productivo, se ubicaría un par de artículos para eliminar todos los días feriados y dar sólo medio día el 31 de diciembre.
Eso a mi entender comenzaría a darle un palo cochinero a esta holgazanería que nos acaba. Se respetará el derecho a vacaciones que supongo (como siempre hago) está fijado en la ley del trabajo.
Supongo, que es lo que hago siempre, que la corrupción le ha hecho mayor daño al país que los delitos por traición a la patria. Es más, creo que los traidores a la patria son primero corruptos del gobierno y para salvarse luego, se convierten en traidores a la patria. Desde Páez para acá, la corrupción nos consume y necesitamos ser estrictamente severos con esta enfermedad nacional que se ha vuelto endémica.
Sé, que Hermann Escarrá es un constitucionalista de lujo, pero en esta declaración se le fue de las manos algo. Creo además, que Hermann Escarrá no ha leído últimamente a Luis Brito García, que ya está ladillando bastante con esa gran verdad que hiere de muerte a esta "revolución" sobre
"las empresas estadounidenses que no paguen impuestos en Venezuela en virtud de los infames tratados contra la Doble Tributación y puedan gozar de privilegios tales como créditos, contratos que impiden que se le suban los impuestos, exenciones tributarias y asignaciones preferentes de recursos naturales en virtud de neoliberal Ley de Promoción y Protección de Inversiones. ¿Esta traición se incluirá en la nueva constitución? ¿Se les aplicará a los miembros de la ANC la nueva constitución con retroactivo por esta traición hecha ley?