Éste COVID 19 está obligando a una separación forzada y la costumbre que teníamos de interrelación será cambiada; no sabremos que hacer con las costumbres: de ahora en adelante nada será igual y se hará difícil recuperar la "normalidad"
Está separación tendrá que ser asimilada, como una "doctrina" mueva.
Nos obligan a estar separados y el hombre que es un animal de costumbre, lo está asumiendo en familia, aceptando imposiciones en lo que estábamos acostumbrado.
Publicitan vídeos, dónde infectados son rechazados porque es una peste y el humanismo nos muestran insensible hacia el semejante y para un humanista, la sospecha no puede ser motivo para separar.
Sólo el amor por la humanidad puede darnos incentivos para enfrentar este virus, antes que se convierta en pandemia y desaparezca el sentimiento que tiene como fin la hermandad.
Hay una desclasada "clase" que está acostumbrada a la carencia de valores para la subsistencia; dónde los semejantes son extraños y lo único que comparten entre si es lo superficial.
El afecto pasa a un plano de distanciamiento y si un igual tiene que desaparecer para que ellos vivan, no lo pondrán en la balanza y después de esta emergencia no va a ser distinto, por eso la necesaria consistencia, para como humanistas enfrentar el virus.
Hoy el capitalismo distancia la forma en que están planteadas las soluciones, son clasistas y se separa del fondo, que por conciencia debería ser socialista.
Los desclasados, desde la preservación y el miedo dicen amar, pero en su intención tienen cajas registradoras planificando ganancia y el valor humano no tiene cabida en sus intereses y eso se nuestra, en la forma que plantean la convivencia: para ellos los muertos, son daños colaterales y rezan para que dios los proteja, mientras provocan que suceda el exterminio de inocentes.
Hoy la emergencia obliga a que solo escriba, que continúe la LUCHA en el silencio, con palabras que solo escucha el miedo entre bambalinas y estoy necesitado de lo humano para no tener tanto cuando ésto pase y el temor a contagiarnos desaparezca distancias.
Hoy quiero tener esperanza de convivir entre abrazos y que el aire sea nuestro.
Cuando todo esto pase, no mantendré distancia; para ver si rescato la forma de encontrarnos; intentare continuar lo que estoy obligado, para confirmar que el camino sigue intacto.
Dèstapare el aliento para encontrar recuerdos cambiados y que salgan sudores de la PATRIA olvidada.
Cuando todo ésto pase invitaré otra vez a la construcción, para mostrar que el virus no está y seguimos siendo camaradas.
Juntos nos dedicaremos a rescatar lo humano y la convivencia volverá a ser posible.
Cuando todo esto pase; tendremos aire nuevo, con montañas, con ríos y habrá un espacio sano para criar los hijos.
Y vendrémos de nuevo con todos los caídos a recoger el saldo que nos hara entender, que PATRIA O MUERTE, VENCEREMOS Y HASTA LA VICTORIA SIEMPRE.
SIN PATRIA NO QUIERO VIDA.
HAZTE CONCIENCIA.