Desde el momento en que desaparecieron las condiciones materiales y se desarticularon las redes ideológicas y sociales que sostenían la plataforma estatista-socialista de Chávez, trabajo bien hecho por el grupo de Maduro y sus asesores hispano-cubanos; la derrota de Chávez era cuestión de tiempo (6 años).
Luego vino el giro hacia el madurismo. Esto se refleja en las publicaciones que llenan los espacios virtuales de aporrea, uno de los únicos medios abierto a la crítica del madurismo y a la exposición del proyecto socialista. Pero, esta dinámica no depende del medio; viene determinada por otras razones:
La primera es importante, pues el madurismo está penetrando las conciencias de los indecisos y las conclusiones de los realistas, que ya reconocieron la inviabilidad del socialismo en las condiciones de la Venezuela actual. Estos pensadores hacen comunión post moderna con la concepción filosófica de Focault y Fukyama sobre el fin del socialismo.
La segunda razón, es que los pocos socialistas que quedan, ya no publican sus opiniones; talvez por miedo, por pesimismo o por desilusión; ellos dirán.
La tercera, la fundamental: Maduro derrotó a Chávez. Es decir, el capitalismo venció al socialismo.