"En 2017 la torta no solo era más pequeña, sino además contra toda razón o regla revolucionaria, léase disparate según la Real Academia Española, esa torta se repartió de manera más desigual. A la burguesía le tocaron 10 pedazos en vez de 7, a los asalariados 5 en lugar de 7 y al Estado 1 y no 2. En 2017, por cada bolívar destinado al asalariado, el burgués se apropió de 30 en lugar de los 8 que se embolsillaba en 2014"
Pascualina Curcio: 27/07/2020
Mamantaoo. ¿Tu tiraste saltaperico?
Claro Chela, yo y Juanita la de Macú, comprabamos en la bodega de la Sra Isabel y gozamos de lo bueno tirando saltaperico. Cuando el saltaperico se nos quedaba pegado en los dedos, la quemadura era dolorosa Chela.
¿Quién se acuerda hoy Mamanta, de estos saltapericos? ¿Te acuerdas de cómo eran?
Mamanta, déjame explicarle a tus lectores qué era un saltaperico porque me sirve para darte mi última reflexión. Saltaperico se llamaba en Margarita un pedazito de pasta explosiva como de color azul que venían pegado a un gran papel. El saltaperico era del tamaño de una mariquita (o sea medio real) y se vendían en las viejas bodegas de Margarita, especialmente en Diciembre.
Costaba un centavo cada saltaperico y cuando uno reunía medio real y lo compraba todo de saltaperico teníamos una oferta especial. Este saltaperico, los muchachos y tu también Mamanta, que era así como machorra, lo pasábamos por una piedra porque para ese entonces en los pueblos de Margarita las calles no estaban asfaltadas. Al pasarlo por la piedra o el piso de una casa, se prendía (explotaba) y comenzaba a saltar haciendo un particular ruido.
Eso era un ratico y luego se apagaba la chispa y dejaba de pegar brinco y hacer ese ruidito tan particular. En las noches, las carreteras y los pisos se veían como arbolitos de navidad con los saltapericos brincado.
Chela y qué hay con los saltaperico de ayer
Bueno Mamanta que leyendo el último artículo de Pascualina Curcio; me apareció el saltaperico en mi cabecita. Pensé y concluí, que la amiga Pascualina en este artículo, lució como ese saltaperico de ayer. Ya la amiga y camarada Pascualina, dejó de pegar brinquito y hacer el ruido del saltaperico. Ya se le acabó la pólvora y parece que abandonó la maléfica esquina de carmelita. Ya el SENIAT es amigo de los trabajadores y tenemos salario de hambre porque el imperialismo es el enemigo. Ya no son los "empresarios" del país, que no pagan impuesto y se cogen lo que pagan los trabajadores. El enemigo (único) es el imperialismo.
La camarada Pascualina, después de lo que ha dicho en sus otros artículos, ahora cambia. Pascualina da un giro y nos dice en su último artículo lo siguiente:
"El verdadero enemigo es el imperialismo constituido por los grandes capitales corporativos, financieros y comunicacionales transnacionalizados; por los dueños de la Reserva Federal de EEUU; por los del Foro Económico Mundial de Davos. Son los capitales que se sienten amenazados ante la posibilidad de la consolidación de un modelo justo y de iguales, los que temen a la palabra socialismo. Los de la Doctrina de Contención y la Guerra Fría contra la esperanza socialista de la URSS, cuyo vocero en 1947 fue Harry Truman". (subrayado mio) https://www.aporrea.org/tiburon/a294100.html
En Venezuela hay hoy, según esta versión, un modelo justo y de iguales, pero los capitales lo están desguañangando y evitan su consolidación porque le "temen a la palabra socialismo". No es al modelo justo y de iguales que le temen, es a la palabra. ¿Entonces?
Mamanta, ya la amiga Pascualina piensa que esta Chela es enemiga porque yo creo Mamanta, que esto no es un sistema o modelo justo y de iguales. No los creo Mamanta. La misma Pascualina dijo que el SENIAT le quita a los trabajadores para dárselo a los capitalista. Si lo digo así, cómo que el único enemigo es el imperialismo.
Mira como lo dice Mamanta:
"Pero son también enemigos quienes, a estas alturas, no reconocen dicho ataque y pretenden explicar la hiperinflación con el velo teórico monetarista". A veces Mamanta, el dólar oficial rojo rojito, cuesta más que el dólar bandido. Yo Mamanta no sé cómo es esto, pero lo que no me explico a veces, es a esta amiga Pascualina: Salta pa ́ acá y salta pa ́ allá.
Mira Mamanta, hace no más de un mes, la camarada dijo que los empresarios se vienen embolsillando la riqueza que producen los trabajadores y acaba de decir ahora, que son los capitales corporativos que se sienten amenazado, que no permiten que este modelo justo e igualitario se consolide" . Huele Mamanta, como a burguesía revolucionaria. La amiga Pascualina está como un trompo o como un saltaperico; dando vueltas y brincando por momentos. https://www.aporrea.org/tiburon/a294100.html
Con este socialismo así, que deja que el capitalismo reparta la torta a su manera, ahora yo también soy enemigo porque no creo en todo este cuento, tal y como lo cuenta una veces Pascualina.
¡Ay mijito! ¡María Purísima!
¿Será Mamanta, que Pascualina hace una labor de limpieza y ahora trata con colorete de tapar la cara neoliberal del "socialismo"? ¿Será que quiere darle un pescozón a la Alternativa Popular Revolucionaria, porque le puede quitar votos y ya no hay que hablar (por ahora) de la Esquina de Carmelita y del SENIAT que le quita a los trabajadores sus salarios?