"Estudia el pasado si quieres pronosticar el futuro"
Confucio
Llegamos al bicentenario de esta magna batalla libertaria, y por mi parte siento una profunda emoción al seguir los esfuerzos del gobierno por revivirla en la consciencia del pueblo, y además me he convertido en un alumno en la distancia de algunos historiadores comprometidos con la causa del pueblos, sumamente críticos, auténticos pedagogos, y destaco entre ellos a Luis Britto García, y Vladimir Acosta; por una razón muy sencilla, como dice una amiga a quien la he incitado para que los lea ¡Echan el cuento de manera muy sencilla, y sin darme cuento me he apasionado por nuestra historia después de vieja!
La lucha por la plena independencia está planteada, desde esa fecha memorable, y al llegar el comandante Chávez, empezó a despertar las ansias de libertad, pisoteadas por los gobiernos estadounidenses a través de una faceta vislumbrada de manera visionaria por nuestro Libertador Simón Bolívar: el imperialismo, y que con el correr del tiempo ¡Despertó!, para someter a los pueblos, y al no poder, recurre al bloqueo. El caso de Cuba socialista, es el más significativo ¡Más de 60 años!, y ahora lo están aplicando contra Venezuela, del cual un grupo de "enfermos" antipatria aplauden cualquier medida para ahogar nuestro pueblo.
El terreno de la guerra es otro, y en la mayoría de los casos, las batallas se están librando en el plano ideológico, pero de manera más sofisticada a través de la tecnología puesta en funcionamiento por el imperio, para descomponer a todo aquel, que caiga en la tarea prioritaria de cuanto gobierno se instala en la Casa Blanca: borrar de la mente de los venezolanos, precisamente este pasado ejemplarizante, el cual motiva, llena de valor, para estudiarlo y poder enfrentar con conciencia patriótica, y no caer en la ignorancia de un amigo, quien, cada momento repite ¡Hasta cuando hablan del imperialismo, y de esa batalla, después de 200 años, si, ahora el problema está, en esta revolución bolivariana!
Antipatriotas conseguimos precisamente, desde el inicio de la guerra de independencia, incluso en la propia familia del Libertador. Su hermana María Antonia, sin nombrarla por las características descritas por Gualberto Ibarreto, en la canción del mismo nombre, y cuyo autor parece ser José Ramon Villaroel; pero lo cierto, es que le faltó poco para empuñar las armas en contra de su mismo hermano, quien supo llevarla con la paciencia de un estadista, el cual trascendía a la inmortalidad.
El presente no es nada fácil, y se hace más enredado por la cantidad de medidas coercitivas impuestas por el imperialismo con la ayuda de uno de los tantos Guaidó, que conseguimos en el largo trajinar de 200 años. El grave y gran problema del proceso bolivariano, es precisamente la corrupción, y nace en la lucha de independencia. El general José Antonio Páez, con todos los atributos de un valiente guerrero, terminó en brazos de la corrupción, motivo por el cual le confiscaron sus bienes mal habidos en vida. En la IV República (AD y COPEI) para los que sufren de amnesia premeditada, porque es necesario recordarles la descomposición en todos los organismos del estado; y acabar con este cáncer, fue el argumento del momento en su lucha del comandante Hugo Chávez Frías, prácticamente una odisea en el capitalismo, y no me vengan que tenía pinta de galán, los que se quieren agarrar de las ramas; aunque José Martí, cuando llegó a Caracas, y frente a la estatua del Libertador dejó escuchar: ¡Hasta hermosos de cuerpo se convierten los que luchan por la libertad de su patria!
24 de junio del 2021, fecha grande en la historia, porque aparte del bicentenario, nos encontramos librando una batalla épica, heroica; tan es así, que la amiga, ahora estudiosa de nuestra historia patria la última vez que, nos vimos en una verdulería me salió con una a manera de chiste, el cual me provocó risas: "El ejército patriota, aguantó de todo, pero menos hambre" al preguntarle ¿Por qué dices eso? La respuesta contagió a varios compradores, al terminar levantando la voz para que la escucharan ¡Por allí leí que, para esa batalla movieron más de 3000 reses para comer, y en estos momentos para comprar un pedacito de carne, tenemos que reunir, como en una alcancía! Esa apreciación de manera chistosa, permite ahondar en lo peligroso del bloqueo del cual el imperialismo ha hecho su principal arma; a pesar de la solidaridad y ayuda prestado por países hermanos, pero lo prioritario e indispensable es la conciencia y no hacerle el juego al enemigo de clase, sin dejar de denunciar esta carcoma a través de la historia: la corrupción.