Mi palabra

Luisa Ortega Díaz y un grupo de "asilados" a las comiquitas

"La olla sin verdura, ni tiene gracia ni hartura"

Refrán

Cada momento oímos ¡El tiempo nos da grandes lecciones en la vida! Pero, quien no las tome, como un aviso para prevenir y no agarrar atajos, como si van para una fiesta, creyendo ver la luz del día antes del amanecer, en la mayoría de los casos terminan estrellados, no quedándole otra que, repetir mentalmente ¡Mala suerte! Aunque en el rostro no demuestren frustración, al final el conflicto mental pesa tanto que en cualquier momento "explotan", para seguir arrastrando la pesadilla, como un castigo en medio de tantas falsedades o posturas, aun, cuando esos recursos, se deshagan, como azúcar en un vaso de agua.

Los ejemplos son muchos, como muchos son los que no aprenden la enseñanza, aunque la vida se las repita a cada instante. Un amigo, quien nunca ha creído el cuento de los asilados, cuando salen desesperados para una embajada. A pesar que, hasta hace poco se mantuvo aferrado esperando la caída del "dictador" Maduro. Ahora, cuando le preguntan por una hermana el cual estaba convencida, que, el "sueño americano" lo iba a empezar a disfrutar, apenas pisara tierra norteña; responde entre risas y argumentos muy precisos sin ningún tapujo ¡Ella creía, que, iba llegar de discoteca en discoteca, como lo hacía aquí!

La hermanita del amigo, inventó una de película de Hollywood, donde hacía ver que era una perseguida política del rrrrrregimen de Nicolas Maduro, para pedir asilo político, cuando ni siquiera asistí a las marchas de la oposición. Lo cierto, es que consiguió lo que buscaba y el primer sorprendido: el hermano y ahora resulta que está desesperada por regresar así el ogro se la coma viva, ya que se despertó del "placentero" sueño, como si estuviera viviendo en una casa embrujada, cuando aquí disfrutaba de las playas, las frías y el baile hasta el amanecer, como una perfecta discotequera en la gran Caracas. Pero, ahora necesita 10 años de albergue, y no precisamente en lo que le pintaron en medios de ilusiones por demás deseado e indescriptible, como creado para no excitarse por otra cosa que no tenga el sello: MADE IN USA.

Esto demuestra que, los medios han establecido una especie de paraíso terrenal, con solamente nombrar a los Estados Unidos. Una porción bastante importante de los pobladores del mundo anhela vivir en ese terruño, sin saber la suerte que los espera. La moneda los atrae, como estimulados por la fuerza del King Kong de las cintas cinematográficas, y muchos son capaces de arriesgar la vida con tal de sentirse muy cerca de los dólares, así, terminen haciendo el papel de unos desvergonzados serviles, pero con la nacionalidad estadounidense.

Si, este grupo de personas son capaces de meterse ellos mismos la soga en el cuello, haciendo la cómica sin recibir nada a cambio. Por la otra nos encontramos las verdaderas comiquitas, a quienes solamente les falta la licencia para ingresar al staff de Walt Disney. Unos disimulan, al final quedan descubiertos; pero otros, aparte de farsantes lo demuestran, como unos verdaderos inocentes y entre estos sobresalientes personajes aparece la casi olvidada y olvidadiza, Luisa Ortega Díaz, quien espero el fin de año para darnos la siguiente "primicia": (¡Venezolanos! Me dirijo a ustedes con el propósito de informarles que mis funciones como fiscal cesaron constitucionalmente este viernes 31 de diciembre de 2021). Parece que se le olvidó a la autoengañada fiscal, que, el día de los inocentes fue el 28 de diciembre, ya que su función terminó el 5 de agosto del 2017. Lo demás, es parte del trabajo del imperialismo para seguir engañando y su grupo de títeres asilados haciendo el triste papel de comiquitas pasados de moda.



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Narciso Torrealba


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