Resuélvete a seguir la conducta
más excelente, y por costumbre
te deleitarás en ella.
Pitágoras
Un mañana mantuve una extensa conversación, con el fallecido cantante Edgar Gurmette –nacido en el Callao, estado Bolívar– voz de oro de Venezuela, cuando los intérpretes de nuestra música se daban a conocer, después de una ardua y recia lucha entre lo más selecto de las voces venezolanas. Le decía sin dejar de resaltar mi admiración por su maravillosa voz, motivo más que suficiente para darse a conocer en toda la geografía nacional, y más allá de nuestras fronteras, que, solamente perduran a través del tiempo, los que componen con el ingenio impregnada de hermosas metáforas, capaces de inspirarse viendo las piedras, hasta convertirlas en flores para adornan cualquier paraje de nuestra tierra.
Las veces que, me dedico a revisar el extenso y rico repertorio musical del hijo de Santa María de Ipire: Reynaldo Armas Enguaima, me convenzo más, que, estamos frente a un verdadero defensor y exaltador de la naturaleza, como queda reflejado en una de sus canciones: Laguna Vieja, el cual le abrió el camino para darse a conocer, como el "Cardenal Sabanero", donde nos monta en un paseo retrospectivo de sus andanzas en la tierra, que, le sirvió de cuna para luego proyectarse con el canto sonoro y venezolanita, sin dejar a un lado una de las mayores fuentes de inspiración para consagrados compositores, como es la mujer envuelta en el manto del amor más tierno y puro.
En la suma de composiciones de Reynaldo Armas, nos encontramos "Guayana es una mujer" un paseo musical por el extenso estado Bolívar, donde eleva a su máxima expresión las bellezas de esa tierra amplia y generosa, hasta compararlas con sus mujeres, acariciadas por el templado sol, desde el mismo momento que, aparece por esos lados alumbrando el terruño con el apellido de nuestro padre Libertador Simón Bolívar. Los Tepuyes los resalta en la parte más maternal de nuestras féminas, el cual sirven para alimentar al ser humano, desde el mismo momento de su nacimiento.
En estos momentos aparecen nuevamente los Tepuyes, pero ahora convertirlos en una abierta polémica, y sí, el cantautor Reynaldo Armas, los enalteció a través de la música. Un grupo de supuestos turistas amparados en el poder del dinero se llegaron, hasta la cima del KusariTepuy para dejar sembrado de lo que, son capaces a la hora de pisotear a la madre naturaleza, y violar las leyes sin importarles la reacción del gobierno, para después salir con su chillona verborrea ¡Nos están atropellando! Nada de esto es nuevo. Hace 9 o 10 años montaron una fiesta de matrimonio en otro Tepuy, y la movilización por tierra la realizaron utilizando a los indígenas de la zona y por aire una flotilla de helicópteros para mover sillas, mesas y los más estrafalarios recursos en muestras del poder económico.
Ahora, lo más seguro de estos trasgresores de la naturaleza, es que se aferren en dar explicaciones vagas, y nos quieran hacer creer el cuento del turismo para dar a conocer a Venezuela. Algo tan falso, como los concursos de bellezas montados por el llamado Zar de la belleza, Osmel de Sousa, quien ha salido a dar la cara, como si no lo conocieran con sus desplantes en el canal televisivo Venevisión. Nuestra querida patria, se da a conocer por la defensa integral de su soberanía, más el canto, la poesía y sus hermosas composiciones musicales, del cual Reynaldo Armas, ha hecho una verdadera barrera para rechazar los adefesios lanzados en ráfagas, desde el norte invadiendo y envenenando el alma y el sentir de nuestros Jóvenes. FELIZ DÍA DEL AMOR Y LA AMISTAD POR EL BIEN Y LA PAZ DE VENEZUELA.
