La intervención de diosdado en el aniversario del Discurso de Angostura ha puesto en evidencia la manera sutil, pero eficaz, usada por los dominantes, para neutralizar a los grandes líderes. Se trata de adoptar la apariencia de los líderes y desechar la esencia, de cubrirse con la apariencia del líder y transformarlo en todo lo contrario. No es nuevo el método, lo han usado contra los grandes dirigentes de la humanidad; al mismo Cristo lo utilizaron para justificar la inquisición, a Lenin para justificar a Stalin y la persecución a Trotsky. Ahora, el madurismo usa el mismo método contra Bolívar y Chávez.
Esta transmutación de imágenes, de la real a la aparente, es un artificio muy usado, congela al líder en una etapa de su evolución, niega el progreso de su pensamiento. Así por ejemplo, se habla del Bolívar de Angostura, que pide la libertad de los esclavos, pero se oculta a los esclavos del capitalismo. ¿Cuál sería la actitud de Bolívar hoy, cuál debería ser el comportamiento de un verdadero bolivariano? Se ignora la evolución de los métodos de explotación de los humanos, ¡la esclavitud del proletariado!
Cuando diosdado habla del Comandante Chávez, lo confina a su pensamiento inicial, se habla del "Árbol de las Tres Raíces", "del Libro Azul", pero se deja de lado su pensamiento anticapitalista y Socialista, "El Plan de la Patria" (el original, ni se nombra); la "Lucha contra la Lógica del Capital" se oculta; lo más lejos que se llega es a un antiimperialismo chucuto, sólo a los gringos, pero no a los rusos y chinos, es algo así como si hubiese Bolívar cambiado la colonia española, por la colonia inglesa o francesa. Así, se le niega a Chávez su evolución, se congela su pensamiento, y se congela, se dogmatiza la teoría de la Revolución Chavista, se transforma en un catecismo vacuo.
De esta manera, se aparenta ser chavista pero sin ser socialista, sin molestar a los capitalistas, los nuevos y los que están por nacer; se pueden hacer pactos con la burguesía, sólo se le agrega el moquete de "revolucionaria"; se pueden hacer pactos con los rusos, enajenarles la iniciativa militar, sin recordar la lucha, real, por la soberanía; construir zonas especiales dónde el capitalismo explota a voluntad. En resumen, no ser chavista.
Es suficiente leer el discurso de diosdado con motivo del aniversario del Discurso de Angostura para entender que, tras las apariencias, el madurismo es un antichavismo muy eficaz. Llegar a esta conclusión, despejar las dudas sobre la verdadera condición del madurismo, es esencial para retomar el camino de Chávez, de la construcción de la Venezuela verdaderamente soberana y Socialista. Mientras el engaño persista no habrá claridad de los objetivos de hoy; no se trata de una simple rectificación entre chavistas, es, al contrario, el reconocimiento de una derrota del chavismo que perdió la lucha interna en batalla contra la restauración capitalista del madurismo.
Hoy tiene más vigencia que nunca el pensamiento del Comandante Chávez, el del Plan de la Patria, su posición claramente antiimperialista, anticapitalista, su bolivianismo auténtico, actuante, actual. Hoy tiene fuerza plena su consigna "Patria Socialista o Muerte"; decía Chávez que la única manera de tener Patria es si es Socialista. Y sabía que el mundo necesita al Socialismo o el capitalismo llevará la vida a la extinción, a la muerte.
¡VOLVER A CHÁVEZ, A LA ESENCIA DE SU PENSAMIENTO, ¡ACTUANTE!