Ahora bien, ¿En qué
consiste este nuevo esquema salarial?
Muy sencillo. El nuevo
esquema salarial que proponemos los Defensores del bolívar al país
consiste simplemente en la aplicación vía decreto presidencial de
dos medidas fundamentales, a saber:
- La implantación de una nueva escala salarial en dólares y
- La revaluación del bolívar para llevar el tipo de cambio a Bs. 500/dólar en un lapso de 10 meses
En nuestro concepto,
tanto la nueva escala salarial como la revaluación del bolívar son
medidas de carácter político, que bien concebidas e implementadas
pueden constituir las palancas fundamentales para el despegue económico
del país y para la redención socioeconómica de las grandes mayorías.
Con estos objetivos en
mente, la nueva escala salarial que proponemos debe poseer los siguientes
características:
- Debe propender a disminuir la desigualdad socioeconómica y al mismo tiempo debe llevar a cabo de manera efectiva una distribución más equitativa de la riqueza del país (ingresos nacionales).
- No debe generar inflación (sino todo lo contrario)
- Debe rebajar los sueldos exagerados y aumentar significativamente el poder adquisitivo de los sueldos más deprimidos.
- El sueldo mínimo en dólares debe igualar o superar el costo de la canasta básica, para lograr el objetivo Hambre Cero
“Reducirle el sueldo de manera directamente proporcional a los que más ganan
(a partir de un cierto tope) y aumentarle el sueldo de manera
inversamente proporcional
a los que menos ganan”
En otras palabras, todo
sueldo por encima de un cierto tope salarial, definido de antemano,
será reducido de manera directamente proporcional a su cuantía (a
mayor sueldo, mayor reducción). Por el contrario, todo sueldo ubicado
por debajo del anterior tope salarial será aumentado de manera inversamente
proporcional a su cuantía (a menor salario, mayor aumento). Llamaremos
escalas salariales hoodianas a las que cumplen con este principio.
¿Cómo construir
una escala salarial hoodiana?
La Figura 1 muestra la escala salarial en dólares actual (en rojo) y una posible escala hoodiana (en verde). El requisito fundamental de la recta que representa la escala hoodiana es que su pendiente sea menor que la de la recta que representa a la escala salarial actual y además que intersecte a esta última recta para un determinado valor de x, el número de salarios mínimos actuales (SMA). En el caso del ejemplo de la Figura, la dos rectas se cortan en el punto x = 15 SMA. Obsérvese que a todos los niveles salariales ubicados por debajo del punto de corte se les aumenta el sueldo en dólares, pero de manera inversamente proporcional al nivel salarial actual. Es decir, a menor salario actual, mayor aumento en dólares. Por otro lado, a todos los salarios ubicados por encima del punto de corte se les disminuye el sueldo en dólares, pero de manera directamente proporcional al nivel salarial actual, es decir, mientras más elevado sea el sueldo actual, mayor será la reducción que sufrirá. El resultado final de la aplicación de la escala hoodiana es una mejor distribución de la riqueza, a través de la aplicación del principio de Robin Hood: Quitarle a los que más ganan para darle a los que menos ganan.
Figura 1
Obsérvese que el sueldo
mínimo correspondiente a un (1) SMA es de 238 dólares en la
escala actual y 1.000 dólares en la escala hoodiana. La primera cifra
es el equivalente en dólares al sueldo mínimo actual (Bs. 512.325),
a la tasa de cambio vigente (Bs. 2150/dólar). Es posible utilizar en
la escala hoodiana cualquier otro valor del sueldo mínimo, siempre
y cuando sea mayor que 238 dólares. Sin embargo, hemos tomado el valor
de 1.000 dólares porque esta cifra nos garantiza obtener hambre cero
para Venezuela en relativamente corto tiempo.
La recta de la escala
actual tiene una pendiente de 238 dólares/SMA y su ecuación es:
y = 238x (1)
y la de la recta hoodiana
con sueldo mínimo 1.000 dólares es:
y = m(x – 1) + 1000 (2)
donde:
x = Número de SMA
y = Sueldo en dólares
m = pendiente
o Incremento de la recta hoodiana (m < 238).
Vemos que la recta hoodiana
se corta con la recta de la escala actual en un cierto punto x.
Si fijamos de antemano el valor de ese punto, podemos hallar el valor
que debe tener la pendiente o incremento m de la recta hoodiana
igualando los segundos miembros de las ecuaciones (1) y (2) y despejando
el valor de m. El resultado es:
m = (238x – 1000)/(x
– 1) (3)
La Tabla 1 muestra los
valores de las pendientes o incrementos correspondientes a varios valores
de x, para las rectas hoodianas, con sueldo mínimo = $1.000.
Tabla 1. Pendiente
de las rectas Hoodianas
¿Qué valor escoger
como tope salarial para los funcionarios públicos?
El diputado Luís Tascón
ha introducido ante la Asamblea Nacional un proyecto de Ley para colocarle
como tope a los sueldos de los funcionarios públicos el valor de 12
salarios mínimos actuales que equivalen a Bs. 6.147.900, o a $ 2.859,
a la tasa de cambio actual. El Presidente Rafael Correa de Ecuador
acaba de emitir un decreto que coloca en 4.000 dólares el sueldo máximo
de los funcionarios públicos de su país. Esta última cifra equivale
en Venezuela a unos 17 salarios mínimos. Proponemos adoptar para Venezuela
esta cifra como punto de corte de las dos rectas. Para este caso, la
Tabla 1 nos da una pendiente de 191 para la recta hoodiana, cuya ecuación
quedaría entonces como:
y = 191x + 809 (4)
Nueva Escala Salarial
La Figura 2 muestra,
para fines comparativos, la escala actual de sueldos en dólares
dada por la Ecuación (1) y la escala propuesta, dada por la Ecuación
(4). Si además de implantar la nueva escala salarial en dólares se
lleva a cabo la revaluación progresiva del bolívar, de tal manera
de llevar el tipo de cambio a Bs. 500/dólar, el resultado es una nueva
escala salarial en bolívares, la cual se muestra en la Figura 3 conjuntamente
con la escala actual en bolívares.
Figura 2
Figura 3
En la Tabla 2 presentamos
en forma numérica tanto la escala salarial actual (en bolívares y
dólares), como la nueva escala salarial (en bolívares y dólares),
como función de los niveles salariales actuales, los cuales expresamos
como múltiplos del salario mínimo actual (Bs. 512.325) en la columna
A.
En las columnas B y C
de la Tabla 2 aparecen la escala salarial actual en bolívares y en
dólares, respectivamente, al tipo de cambio actual de Bs. 2150/dólar.
Tabla
2. Escala Salarial Actual y Propuesta
(recta hoodiana con incremento de $191)
Las principales características
de la nueva escala salarial son:
- Se le rebaja el sueldo en bolívares a todos los ciudadanos, pero en proporción inversa al número de salarios mínimos actuales (SMA) que ganan actualmente. Por ejemplo, para un trabajador que devengue un (1) SMA (Bs. 512.325), su sueldo se le reduce ligeramente a Bs. 500.000 en la nueva escala salarial (Figura 3 y Tabla 2, columna E). Es decir, su sueldo en bolívares es reducido en 12.325 bolívares (2,41%), (Tabla 2, columnas F). Pero por favor amigo lector, no se alarme todavía, pues ya explicaremos qué compensación tendrá ese trabajador, a cambio de la reducción de su salario en bolívares.
Otro ejemplo: A un
trabajador que actualmente gane 5 salarios mínimos (Bs. 2.561.625,
Figura 3 y Tabla 2, columna B) se le reducirá su sueldo en bolívares
a Bs. 881.368 en la nueva escala salarial (Figura 3 y Tabla 2, columna
E), es decir su sueldo en bolívares se reduciría en Bs. 1.680.257
o 65,59%. Igualmente este trabajador recibirá una compensación a cambio
de la reducción de su salario en bolívares. De hecho, todos los trabajadores
que devenguen sueldos por debajo del punto de corte de las dos rectas
(17 salarios mínimos, Figura 2) recibirán una compensación significativa
a cambio de la reducción de su salario en bolívares.
Veamos un tercer
ejemplo: Si una persona devenga actualmente 17 salarios mínimos estará
percibiendo Bs. 8.709.525 en la escala actual, pero sólo Bs. 2.025.471
en la nueva escala salarial, es decir, su sueldo se reduciría en Bs.
6.684.054 o un 76,74%. ¿No es esto lo que persigue el Presidente Chávez?
Vemos entonces que en la nueva escala salarial en bolívares, los que
más ganan actualmente sufren reducciones más altas que los que menos
ganan, es decir, se cumple la condición de proporcionalidad directa.
Proponemos llevar a cabo esta reducción salarial en un lapso de 10
meses.
Por otra parte, al
ajustar hacia abajo el sueldo en bolívares de todos los ciudadanos
estaremos creando las condiciones para que se produzca el fenómeno
de la deflación económica o caída general de precios. De esa
manera estaremos rompiendo con la política tradicional de tratar de
aumentarle el poder adquisitivo a los venezolanas mediante el aumento
del sueldo mínimo en bolívares, política a todas luces inflacionaria.
- Para cumplir con la meta Hambre Cero, como explicamos en un anterior artículo, se lleva la tasa de cambio a Bs. 500/dólar en el lapso de 10 meses. Es decir, se deprecia la moneda del imperio a razón de Bs. 165 por mes. Al cabo del período de 10 meses los salarios actuales en bolívares (Tabla 2, columna B) se habrán reducido a los valores mostrados en la Tabla 2, columna E, pero para ese entonces la nueva tasa de cambio será de Bs. 500/dólar. Por lo tanto, los nuevos salarios en bolívares se convertirán en sus equivalentes en dólares que se muestran en la Tabla 2, columna D. En contraste, en la columna C de la misma tabla se muestran los equivalentes en dólares de los salarios en bolívares actuales, a la tasa de cambio actual. Vemos ahora que al nuevo sueldo mínimo de Bs. 500.000 le corresponde un equivalente de 1.000 dólares (Figura 2). Esto contrasta con el sueldo mínimo actual (Bs. 512.325), al cual le corresponden sólo $238 en la escala vigente. Hemos entonces reducido el salario mínimo a Bs. 500.000 (una reducción del 2,4% del salario nominal en bolívares), pero al mismo tiempo hemos subido el sueldo mínimo en dólares a $1.000, un aumento de 762 dólares (Tabla 2, columna G), o del 320%.
Vemos entonces
que si bien es cierto que en la nueva escala salarial estamos disminuyendo
levemente el sueldo mínimo en bolívares, por otra parte, sin embargo
estamos aumentando significativamente el sueldo mínimo en dólares.
¡Ésa es la magia de la revaluación: Mediante la misma el trabajador
recibe menos bolívares nominales, pero éstos tienen un mayor poder
adquisitivo que el salario antiguo en bolívares!
Sólo a través de
la revaluación de la moneda es posible aumentar el poder adquisitivo
de los trabajadores sin producir inflación. He allí el porqué afirmamos
que sin revaluación no hay revolución.
Consideremos otro
ejemplo. A un sueldo de 5 SMA, en la escala actual le corresponde un
sueldo de Bs. 2.561.625 (Figura 3 y Tabla 2, columna B), o de $ 1.191
(Figura 2 y Tabla 2, columna C), pero en las nuevas escalas salariales
le corresponde un sueldo de Bs. 881.368 o $1.763 (Tabla 2, columnas
E y D, respectivamente). Obsérvese entonces que se ha producido una
reducción del sueldo nominal en bolívares del 65,59%, pero el correspondiente
sueldo en dólares aumentó en un 47,94%. Sin embargo, no se debe
perder de vista que estos nuevos 881.368 bolívares tienen
un poder de compra 47,94% mayor que los antiguos 2.561.625 bolívares.
¡Nuevamente se
manifiesta la magia de la revaluación: Por la vía de la revaluación
el trabajador recibe menos bolívares nominales, pero éstos tienen
un mayor poder adquisitivo que el salario antiguo en bolívares!
Consideremos otro
ejemplo adicional: Un trabajador que actualmente devengue 10 salarios
mínimos estaría percibiendo un sueldo de Bs. 5.123.250 (Figura 3 y
Tabla 2, columna B), que equivale a $ 2.383 (Figura 2 y Tabla 2, columna
C), al tipo de cambio actual (Bs. 2150/dólar). Pero en la nueva
escala propuesta, ese trabajador percibiría un sueldo de $2.716 (Figura
2 y Tabla 2, columna D), lo cual implica un aumento de su salario de
333 dólares (Tabla 2, columna G), o del 13,97%. Nuevamente vemos
que se cumple el principio de la proporcionalidad inversa: Quien más
gana actualmente recibe un menor aumento en dólares.
- Al nivel de 17 salarios mínimos con esta escala hoodiana el aumento en dólares se reduce a 0 (Figura 4 y Tabla 2, col. G). En otras palabras, el equivalente en dólares en la escala actual y en la nueva es el mismo: 4.051 dólares. Pero los niveles salariales ubicados por encima de los 21 salarios mínimos no reciben aumento en dólares sino que más bien son decrementados progresivamente (Figura 4 y Tabla 2, col. G).
Obsérvese la interesante
propiedad de la recta hoodiana: A todos los salarios ubicados por encima
del punto de corte se le reducen de manera directamente proporcional
los montos en dólares actuales, pero esas mismas cantidades le son
aumentadas a los sueldos ubicados simétricamente debajo del punto de
corte de las dos rectas. Explicaremos esta propiedad con varios
ejemplos numéricos:
A un nivel salarial
actual de 30 SMA, ubicado a 13 niveles por encima del punto de corte
de las dos rectas (x = 17 SMA), se le reduce su sueldo en 619 dólares
(Figura 4 y Tabla 2, columna G). Pero esta última cantidad es exactamente
lo que se le aumenta en la escala hoodiana al nivel salarial ubicado
exactamente a 13 niveles por debajo del punto de corte, es decir al
nivel de 4 SMA. ¡Este es el principio de Robin Hood en acción: Lo
que se le quita en dólares al que está por encima del punto de corte
se le da íntegramente al que está ubicado simétricamente por debajo
de dicho punto!
Veamos otro ejemplo:
Para un nivel salarial de 24 SMA, ubicado a 7 niveles por encima del
punto de corte se le reduce su sueldo por la cantidad de 333 dólares
(Figura 4 y Tabla 2, columna G). Pero esta última cantidad es
precisamente lo que se le aumenta al nivel salarial ubicado a 7 niveles
por debajo del punto de corte, es decir al nivel de 10 SMA (Figura 4
y Tabla 2, columna G).
Fig. 4
Otro ejemplo: A un
nivel de 21 SMA, ubicado a 4 niveles por encima del punto de corte se
le reduce su sueldo por la cantidad de 190 dólares (Figura 4 y Tabla
2, columna G). Pero esta última cantidad es precisamente lo que
se le aumenta al nivel salarial ubicado a 4 niveles por debajo del punto
de corte, es decir al nivel de 13 SMA (Figura 4 y Tabla 2, columna G).
Vemos entonces que la
nueva escala de sueldos propuesta cumple con el requisito de la proporcionalidad
inversa y por lo tanto garantiza una distribución más equitativa de
la riqueza. El hecho curioso es que con este nuevo esquema salarial
y cambiario todos los asalariados hasta el nivel de 17 salarios mínimos
actuales recibirían un aumento en dólares, a pesar de que sus sueldos
nominales en bolívares son reducidos (Fig. 3). Esta baja de los
sueldos en bolívares no debiera producir ningún trauma, ya que el
poder adquisitivo real de la mayor parte de los venezolanos aumentaría.
De hecho, durante el gobierno de Rómulo Betancourt hubo una reducción
general de sueldos del 10%, pero al contrario de la que nosotros proponemos,
aquella fue una reducción regresiva pues disminuyó el poder adquisitivo
de los venezolanos.
En el artículo anterior,
dimos respuesta a una serie de interrogantes que surgieron a lo largo
de la pasada campaña electoral, con relación a nuestra propuesta de
revaluar el bolívar. Pero a raíz de dicho artículo surgió una pregunta
adicional que es la siguiente:
¿No causaría un
choque brutal en la economía nacional la revaluación propuesta, particularmente
en lo que se refiere a la deuda interna del país, la cual se haría
impagable?
Por supuesto que no y
explicamos por qué. La deuda interna actual está en el orden de los
31 billones de bolívares, que al tipo de cambio actual equivale a unos
14,42 mil millones de dólares. Como lo explica nuestro dilecto amigo
y defensor del bolívar, el economista Manuel Martínez, la obligación
del estado es cancelar esta deuda de manera que el monto de la misma
siga manteniendo su equivalente en dólares. Por lo tanto, al producirse
la revaluación propuesta llevando el tipo de cambio a Bs. 500/dólar,
la deuda interna actual equivaldría a unos 7,21 billones de bolívares,
la cual sería perfectamente manejable y pagable por ejemplo por la
vía del impuesto sobre la renta. Por cierto que para el año 2007
el SENIAT tiene estimado recaudar Bs. 20,2 billones por este último
concepto.
Por otra parte, si se
obligara a PDVSA a entregar por lo menos el 70% de sus ingresos globales
al Fisco Nacional, tendríamos que para este año 2007, los ingresos
de PDVSA estarán en el orden de los 120.000 millones de dólares, de
los cuales 84.000 millones de dólares serían para el Fisco. Con esta
última cantidad se cubriría el presupuesto de gastos total del país
para este año, el cual asciende a 54.000 millones de dólares, con
lo cual quedaría un remanente o superávit de 30.000 millones de dólares,
equivalentes a 15 billones de bolívares al tipo de cambio propuesto
de Bs. 500/dólar. Ese excedente podría utilizarse para cancelar
totalmente la deuda interna y todavía quedaría un remanente de 8 billones
de bolívares o 16.000 millones de dólares que pudiera utilizarse para
amortizar el capital de la deuda externa.
Conclusión: Hemos
propuesto una nueva escala de sueldos que fundada en la revaluación
progresiva del bolívar garantizaría dos logros fundamentales para
Venezuela: Hambre Cero y una distribución más justa de la riqueza
nacional, aplicando el principio de Robin Hood.
Creemos que nuestra propuesta
para lograr una más justa distribución de la riqueza está blindada,
de tal manera que no hay excusas para no acometer la realización de
la misma a la brevedad posible. No tenemos nada que perder, salvo
el hambre y la miseria.
Posdata.
Hemos formulado nuestras propuestas tanto en el campo salarial como
en el monetario usando el dólar como moneda de referencia. Pero
nada impide extender las propuestas utilizando otras monedas fuertes
como referencia, por ejemplo el euro.