"La intolerancia puede ser definida aproximadamente
como la indignación de los hombres que no tienen opiniones"
G.K. Chesterton
Dos artículos aparecidos recientemente en esta página APORREA. ORG, me han llamado poderosamente la atención apenas he visto los títulos. Uno de Oscar Heck ¿Dónde se esconderán?; el otro de Toby Valderrama (Odiar al gobierno madurista es un sentimiento legitimo). Por ningún concepto se puede dejar pasar por alto, estos deseos desbordados de dos personas, quienes hacen uso de los medios reiteradamente para incitar al odio, y este reconcomio todo el mundo sabe hacía donde conduce. La prueba más vulgar y criminal la dejaron los guarimberos, cuando convirtieron una persona en una antorcha humana.
Lo de Oscar Heck, no es nada nuevo; todo lo que escribe lleva el mensaje recargado para incitar a matar. Son muchas las pruebas que, sirven para llamarlo –como dicen– a rendir cuentas. Es capaz de gritar, que, no hay libertad de expresión; quisiera verlo emitiendo alguna opinión en los Estados Unidos, como la que, acaba de hacer con el artículo que, estoy haciendo referencia. Escribe, alentando un golpe para después hacer lo que pasó en Ruanda, donde prácticamente se presentó una carnicería humana.
Por su parte el Toby Valderrama, quien se dio a conocer, con su columna (El grano de maíz) le sigue los pasos al Heck, ya que, el escrito publicado el mismo día, busca el mismo objetivo, para terminar dándole la razón al escritor Chesterton, cuando dejo el pensamiento que me sirve de epígrafe para aclararle a estos provocadores de oficio, el delito que, están cometiendo al incitar al oído tan descaradamente que, cualquiera persona entiende perfectamente sus malévolos propósitos. Por mi parte, no espero verlos hablando bien del gobierno, pero tienen que, saber y entender el gravísimo delito, tan peligroso, como jugar con gasolina al lado de una hoguera, y los podemos calificar, como delitos de lesa humanidad.
No escribo para abrir una polémica, pero si quiero expresar mi punto de vista sobre un problema tan delicado, y estos señores alegremente lo utilizan, como buscando amedrentar a los que, valientemente se encuentran al lado del presidente Nicolás Maduro, a quien todavía no se les han arrugado las que, te conté y por el contrario ha enfrentado todos estos movimientos desbordados de odio, el cual parecen encender praderas. Todos estos arrebatos de tirria derramadas en escritos, al final van dejando huellas marcadas en los propios ejecutores al no poder conseguir hechos reales en sus macabros deseos.