Supe del proceso de elección de nuevos magistrados en el programa en TVES Desenlace. Como ya fue público y notorio, los venezolanos tuvimos la oportunidad de medio conocerla existencia de una magistrada 33 y otra magistrada 34, mandando sin haber sido previamente seleccionada y sin autoridad legal para mandar en el TSJ. Esto, según lo que se explicaba, pasaba en pleno desarrollo de la democracia participativa y protagónica, que va luciendo "desprotagonica".

Después de haber oído mucho sobre la magistrada 33 y 34, nada protagonicamente pasó y hoy, con la selección de los nuevos magistrados, no es difícil darse cuenta que todo va igual. Luego de una elección presidencial en 1998 y un 13-A, todo va en el marco de una continuidad histórica sin salto ni sobresalto. Dos días distintos, no hace diferencia en más de 20 años.

En ese desenlace, supe que había una comisión para trabajar este problema de los nuevos magistrados y ahí estaba, el diputado que operaba objetivamente como presidente de esa comisión. Lo de operar objetivamente, no es invento mío, se oyó o pudo deducirse objetivamente de lo que nos dijo. Calculé por lo que oí, lo casi imposible que era ser magistrado en Venezuela en la época de la V y sin querer, me acordé de la IV. Ahora como ayer, la escogencia debía ser objeto (objetivamente) de muchos análisis, evaluaciones y seguimiento de todo tipo.

Pensé en la suerte que tendría esta lista de postulados en cualquier Consejo Universitario hoy. No podía imaginarme, el montón de papeles y currículum sobre el escritorio de un presidente del parlamento comunal y los líos que acontecieron en los territorios comunales que participan en este proyecto.

Al oír la cantidad de obstáculos que cada postulantes debía pasar, me dije: Guau qué cosa más peluda!

Siendo de hecho, la evaluación una cosa tan difícil, pensé que esto iba a resultar una tarea casi imposible. A este hecho le sumé, todo lo que vimos anteriormente en procesos como este, cuando había una oposición muy mala y apátrida y dónde no cabía la remota posibilidad de una decisión por unanimidad. La unanimidad era una señal de algo que renacía. Pensé en que los malos y apátridas no tuvieron tiempo de cambiar y los buenos tampoco reunieron tiempo suficiente para ver, qué la cara de a los cipayos se transformaron en caras de angelitos.

Creía, al ir oyendo todo lo que la comisión estaba haciéndose, que si San Pedro y la Virgen del Valle se postulaban para ser magistrados en Venezuela, se las verían muy negras frente a los obstáculos que debían superar con estos de los análisis muy objetivos. Según la objetividad y todos los criterios expuestos, la patrona de oriente difícilmente pasaría dos fases del proceso. San Pedro y la Virgen por pertenecer ambos al partido de Dios, tenías pocas posibilidades.

Hoy me encuentro bajo está mata de mamey preguntándome: ¿Cómo fue posible este milagro de unanimidad? ¿Cómo los cipayos dejaron de ser tan malos? ¿Cómo los imperialistas entendieron esto de la unidad nacional? ¿Cómo una cosa tan meticulosamente analizada por buenos y malos y con muchos días de estudios y análisis, este nombramiento de los nuevos magistrados no cayó en el pozo de polarización?

Hoy y toda deprimida y baja está mata de mamey, pienso que esta unanimidad acaba con la mentira de la V República y tendrá sus implicaciones, que me permito precisar: 1) Para dicha o desgracia, ya no tendremos como explicación y justificación, que unos malos son los responsables de lo malos que son los otros. Se acabaron esos discursos polarizados de unos malos y otros más malos . Era tan fácil y cómoda esa explicación, que vamos a extrañarla 2) De un solo coñazo, se acabó con ese mito que tiene montones de años encima, según la cual, la justicia es ciega. Nada de eso. La justicia ayer como hoy tendrá su corazón y los ojos bien pelados. 3) Toda esta cosa tan llena de complejidades aparente, pienso que pudo resolverse con una simple regla de tres y eso puede ser muy bueno o muy malo para el futuro inmediato. Podemos ahora estar dentro de un nuevo modelo social matemático que funciona con una simple regla de tres. Podemos estar frente a un reparto de todo. En este caso particular de los nuevos magistrados, pudo ser: son tres para mí y dos para ti. En otros puede ser fity/fity.

Cuando pensaba en que ya esto de la IV y de la V, pasaría a convertirse en una breve etapa de nuestra historia reciente, pegué un brinco al leer la barbaridad que publicó Javier Biardeau para confundirnos. Biardeau mezcló un Calixto Ortega con otro Calixto Ortega del BCV. Dos cosas totalmente distintas, que no pueden embarrar este hermoso trabajo de la comisión de postulaciones. https://twitter.com/jbiardeau/status/1519388004225331200

Cuando aún me encontraba sobresaltada por esta barbaridad desmedida de Biardeau; el curita de Barcelona, que es uno de mis asistente, me hace llegar una nota de prensa de un Tal Cuál, dónde puede estar renaciendo el caso de la mano peluda que conocimos en la IV. Bajo una gran incertidumbre, me pregunté: Reencarnación de la IV con plena unidad? https://talcualdigital.com/jorge-rodriguez-cambio-a-ultima-hora-la-lista-de-nuevos-magistrados-del-tsj