Cuento o razón

Para los falsos adoradores de Dios

La sequía y el viento tejen con sus agujas a dos manos, un mantel mustio que va cubriendo la mesa del paisaje. Ha sido la historia de la Tacarigua de Margarita, Un tiempo lluvioso y un tiempo seco que se hace eterno para los agricultores. Ese mismo tiempo incentivó la diáspora de otrora de los hijos del pueblo hacia a otros lugares de tierra firme.

El periodista Juancho Marcano y su perro Pipo, luego de realizar labores cotidianas en el conuco, se refrescaban con la brisa sabrosa que se respiraba bajo la sombra de su amiga la mata de mango, que se alegraba que sus amigos se guarecieran del calor bajo sus predios. En eso estaban, cuando Pipo, sin saber porqué, comentó: “Yo me he dado cuenta que hay gente que dice creer en Dios y demuestran todo lo contrario”.

El periodista que estaba observando a una guacharaca que se deleitaba con una guayaba, escuchó a su perro, y le manifestó: “Pipo, y ese comentario porqué lo haces, si más bien lo que nos preocupa ahora y como siempre, es la sequía”.

“Sucede Juancho que oí en la radio alguien comentar que hay personas que dicen creer y querer a Dios, pero son incapaces de querer a otros seres de su creación, y eso es bien cierto, pues hay gente que sin piedad alguna maltratan a los perros y a los gatos y de paso asesinan a otros animales de la fauna silvestre, y eso es una demostración de no querer a Dios”.

La mata de mango que escuchaba a Pipo con atención, aprovechó de opinar también y señaló: “Y eso Pipo, es en cuanto a los animales, pues el odio contra las plantas pareciera ser mayor y hasta más doloroso, pues los árboles no pueden gritar ni correr como lo puede hacer un animal, y con todo y eso, viene el hombre y sin piedad ninguna le cae a machete o a hacha y en cuestiones de minutos destruyen una vida de muchos años y hasta de cientos de años. Además a veces lo asesinan quitándole la corteza para que vaya muriendo callado y lentamente”.

El periodista Juancho Marcano, oyendo aquellos comentarios lacerantes, sin duda alguna, les dio la razón a sus amigos y no quiso comentar porque entendió que el tema tiene mucha tela que cortar, por tal motivo decidió con Pipo regresar a casa.


Esta nota ha sido leída aproximadamente 2081 veces.



Emigdio Malaver

Margariteño. Economista y Comunicación Social. Ha colaborado con diferentes publicaciones venezolanas.

 emalaverg@gmail.com      @Malavermillo

Visite el perfil de Emigdio Malaver para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes: