"La conciencia de aquellos que nada bueno traman secretamente,
suele acusarlos de su crimen antes de que se les descubra"
Sófocles
Un amigo, muy entrado en años, sin ninguna preparación académica y salió de la envolvente oscuridad del analfabetismo, cuando el comandante Chávez, dio la orden patriótica de aprovechar la ayuda benévola y desinteresada del pueblo cubano para enseñar a leer y escribir a todo el que se encontraran en el camino, hasta convertirse en un fiel defensor del proceso bolivariano, antes el incesante ataque de propios y extraños, después de haber pasado parte de su vida militando en AD, como los devotos de algunas sectas religiosas, que salen a trabajar muchas veces bajo un sol inclemente y guardan una parte de lo que logran ganarse para dárselo al pícaro pastor.
Las veces, que hablo con este compañero de corazón me nutro para seguir en la lucha, ya que, de manera muy firme se ha convertido en un antiimperialista a tal punto, que uno de sus vecinos de confianza al hacer alguna referencia de él, siempre se le oye decir a manera de juego "Ese no pasa a los gringos ni en las películas, no sé a dónde ha aprendido tanto, ahora carga un cuento, que parece cierto ¡El imperialismo utiliza la misma cadena para atacar a Maduro, con la que atacaron a Chávez y en el camino se van pegando, como las mosca a la mortecina!"
Esa cadena del cual habla el amigo, en estos momentos el gobierno de los Estados Unidos la está utilizando de manera muy habilidosa, como si se tratara de un verdadero escuadrón arremetiendo en un incesante ataque militar por aire, mar y tierra, pero sin echar un tiro al cielo para amedrentar. Se dan casos de escribientes, como uno que parece caído de la luna, quien salió con un adefesio muy difícil de digerir, al decir, que, el beisbol es el opio de los venezolanos, por el hecho de no estar de acuerdo con el majestuoso estadio metropolitano. ¿Qué le pasa al nuevo Ramón Guillermo Aveledo? ¿Qué dirá el legendario Víctor Davalillo, Antonio Armas, el salón de la fama Luis Aparicio y el hombre récord del béisbol de las grandes ligas Miguel Cabrera entre otros? Con razón el comandante Chávez, exhibió en una oportunidad un bate, con mucho orgullo en un acto, que parecía una marea humana, regalo de Cabrera y decía, que era para darle a los escuálidos habladores de pistoladas.
Si, pudiéramos hacer una encuesta con ese valioso grupo de jugadores, que han puesto el nombre de nuestro país en alto, incluyendo a los aficionados y fanáticos para saber que opinan del comportamiento de este escribiente, estoy seguro que el rechazo es total, aún, cuando un número importante no esté de acuerdo con el gobierno y el gasto en medio de una crisis creada por el imperialismo, pero, ahí, es cuando tiene un gran valor lo expresado por la diputada Iris Varela –la fosforito– ¡Nosotros no hemos creado la crisis, pero tenemos que resolverla.
Por eso no podemos apartar ni instante el aparato mediático de los Estados Unidos, tan poderoso y embelesador, que muchos de esos furibundos atacantes, si, le revisamos su procedencia nos encontramos, que estuvieron dando clases de concientización, pero, cuando el "todopoderoso" imperialismo apretó, hasta ahí llegaron las bravuconadas y por eso se presentan con cualquier argumento por increíble que sea, pero si el cerebro no les da para más la sueltan, como si están presentando la panacea a los grandes males del mundo.. Con estas explicaciones se han presentado varios escribientes en los últimos meses, parecen que han entrado en competencia con el John Bolton y Mike Pompeo, después que aparecieron con sus libros, que no son más, que unos compendios de terrorismo en su máxima expresión contra el gobierno y el pueblo de Venezuela con toda la presunción de los descarados canallas.
La cadena de la oposición venezolana y los nuevos opositores por momentos, es la mayor ayuda del Gobierno de los Estados Unidos, para amortiguar la crisis, después del fracaso estrepitoso del muñeco de cuerda: Guaidó. Al presidente Maduro, lo han tildado de lo que se les ha ocurrido y sueñan con golpe de estado, como si no los hubieran intentado nunca y hayan sido abortados. Hasta Andrés Izarra, quien había desaparecido, ahora se presenta con la cara de inocente, alertando sobre una supuesta ola represiva en contra de la disidencia chavista. Lo único que falta, es meterle el dedo en la boca para ver si muerde. Con razón mi amigo, siempre repite ¡Quien no se dé cuenta de lo que pasa, es por inocente, interesado o simplemente llegó, hasta donde podía!