Dos cabecillas destacan como operadores de las relaciones del madurato: Jorge, en lo internacional; diosdado, en lo interno. El primero tramita las relaciones políticas internacionales más importantes, con los gringos y europeos, es el encargado de dar la cara a las exigencias de estos imperios. Se ocupa, jorge, de las reuniones entre la oposición y el madurato. Destaca por las trabas que les pone a estas reuniones, desde la libertad de saab, hasta que la Corte Penal Internacional suspenda el juicio contra el madurato. El otro, diosdado, tramita las relaciones represivas nacionales, es el inventor de la operación "tun tun" y tiene un tribunal en la televisión en el que sentencia y condena a los opositores. Los dos compiten en cinismo y empeño para justificar las exigencias de miraflores, en esa intención son creativos, inventan leyes absurdas, acusan. Su actuación, emblema del madurato, lo hunde.
La obra de estos dos cabecillas indica la intención del madurato de cerrar las vías de acuerdos, quieren un capitalismo para ellos solos, no aceptan la participación de las otras corrientes capitalistas, niegan la alternabilidad. A cada reunión con la oposición capitalista, el madurato opone condiciones incumplibles con la clara intención de sabotear acuerdos, hasta ahora todas han fracasado. En lo nacional, en su programa diosdado se encarga de bombardear cualquier posibilidad de confianza en la actuación del gobierno, amenaza con adelantar las elecciones o con no entregar si perdieren, intriga con inhabilitaciones.
El capitalismo desde hace tiempo, después de derrotado el ensayo socialista, busca dar estabilidad política al sistema. Y es allí que el madurato falla. No entiende otra forma de gobierno diferente al atropello, a "la ley soy yo", a "el sistema soy yo", le aterra la alternabilidad, abandonar al gobierno. Se aferra a miraflores como un náufrago a la última tablita. Y en ese empeño arrasa con toda institucionalidad.
En ese terreno camina el país, el madurato no les da confianza a las corrientes capitalistas, que son su único apoyo; está agotado, no tiene nada que ofrecer a nadie. Y cuando un juego se tranca, cuando la ley no resuelve los conflictos, se busca avanzar con la ley suprema: la violencia. Es así, estamos en terrenos de golpe de Estado, esto es independiente de la voluntad humana.
La actuación de jorge y diosdado va preparando las condiciones para la salida fascista. Ellos destruyen la relación de la palabra con la realidad. El discurso separado de la realidad va creando un mundo paralelo, verdadero reino del absurdo: se pueden construir bloqueos que no dejan que suba el salario, pero permiten bodegones y ferraris; transformar vulgares mercachifles en héroes diplomáticos; convertir a cualquiera en un corrupto, y a un corrupto en una joya. Pueden mudar la fecha de las elecciones, inhabilitar, acusar, fusilar en el paredón de la mentira a cualquier ciudadano.
De esta manera la sociedad es atrapada en una especie de esquizofrenia bobificante, que la hace permeable a cualquier mentira, a cualquier construcción del lenguaje. Por ejemplo, el raro bloqueo, o los rayos electromagnéticos, iguanas y misiles. Creer que el gobierno pelea con los gringos y después no extrañarse de la presencia de las compañías gringas llevándose el petróleo de gratis. O el madurato acusarse a sí mismo de corrupto, y perseguirse, morderse la cola.
Por esa vía y con esa esquizofrenia bobificante los pueblos han sido abusados en su credulidad y han sido los constructores de las más horrendas experiencias de la humanidad, los verdugos de sus mejores hombres y sus mejores oportunidades.
Hay que salir del madurato ya.
¡VOLVER A CHÁVEZ!