"No cabe duda de que estamos en una fase política en pleno desarrollo, para resolver la actual crisis económica venezolana. En la que la imagen personal ocupa el primer, y más importante eslabón en la jerarquía de las prioridades individuales".
Fin de la cita.
La expresión: "la mujer del César" se emplea cuando se exige a una persona pública una rectitud moral excesiva, y escrupulosa.
Esta histórica expresión proviene de una frase de Julio César recogida por Plutarco (VP 50.125). Cuando Julio César dijo: "Yo no quiero que mi mujer sea supuesta ni de la menor sospecha". Otros traducen: "Sobre la mujer del César no debe caer ninguna sospecha".
Cuenta Plutarco que un patricio romano, Publio Clodio Pulcro, estaba enamorado de Pompeya, la esposa de César, y que, aprovechando una fiesta, entró en la casa de César, vestido de tañedora de lira, pero fue descubierto y castigado por ello. Sin embargo, Plutarco dice que César, aunque estaba seguro de que no había ocurrido nada deshonroso, y de que su mujer le había sido fiel, repudió a Pompeya.
El hecho parece ser cierto y dio lugar a la frase completa la mujer del César no le basta con ser honrada, y ser lo que parecería. También es cierto que César era realmente, no sólo lo parecía, un adúltero.
Llevo poco tiempo reflexionando sobre este dicho: "La mujer del César no solo debe serlo, sino también parecerlo". Sobre las elecciones primarias para elegir el candidato presidencial de la oposición para las elecciones del 2024.
Han sido muchas horas pensando, y en el que he estado conforme con el refrán pero, hace no mucho he cambiado de parecer. No sobre el fondo de esta actitud de la vida política venezolana, sino sobre lo que se está mostrando hacia el exterior, y me explicaré.
Siempre he pensado que debemos ser personas rectas, honestas, y valiosas en nuestras virtudes al analizar la política nacional. Además, siempre he pensado que deben manifestarse estos valores para darlos a conocer, para apreciar los referentes, y con ellos los cambios de otras personas a raíz de ver que es posible ser una persona: "de una sola pieza".
Qué ha pasado para que todo esto se modifique, y yo sea capaz de opinar en sentido contrario, y no lo digo, por querer ser un miserable, o hacer, y vivir conforme a lo que cada día se nos venga en gana, o saltándonos las leyes, la ética, y la moral publica.
No, eso jamás. De lo que hablo es de tanta mascara, de tanto disfraz hipócrita, de tanto parecerlo, en los alacranes pestosos de la politiquería, oficial, y opositora, pero con mucho asco.
No solo se ve en las redes sociales, con perfiles que no dicen la verdad de lo que pasa, en ese ataque despiadado a una solitaria mujer que se les despega en las encuestas. "POR QUÉ LA MUJER DEL PUEBLO OPOSITOR QUE CLAMA CALIDAD DE VIDA, Y NO LA DEL ALTO COSTO DE LA VIDA, Y ANTI ALACRANES; LA MUJER LLAMADA MARIA SIEMPRE EN EL PUNTO DE MIRA"
Por ser una ciencia siempre hay que hablar de la política. De verdad, el asunto de María Corina, que intentan castigarla ante la opinión pública por alzarse en la esfera de la opinión con un 80%, me ha llevado a tener que escribir sobre ella. Por someterse a un test descalificatorio, y lleno de intrigas por los alacranes de la politiquería, a la que le está resultando salir reconocida como la líder que es. Por no irme a la política del albañal, en la que todos hemos visto a distintos políticos alacranes luciendo escoltas, y camionetotas, con un Iphone de alta gama en la mano, cuando no son a veces demasiados derroches, y aquí nadie se ha rasgado las vestiduras. O cuando destituyen a un alcalde por abuso de poder y corrupción, no, porque entonces eso no estaba muy feo.
Todo lo veo en la complicidad manifiesta, cada día más cercana a unas relaciones de bichos y ballenas, esos politiqueros candidatos opositores, que son más rémoras que conocidos como verdaderos políticos. Cómo cada vez veo a más influencer que se distancian de estos bicharracos, porque sólo quieren más poder fama, y gloria, cual romanos y griegos…
Y es que el político venezolano se ha (Tramas de corrupción en PDVSA) pervertido tanto desde la cuarta república hasta ahora. O quizá efectivamente nos encontramos en una crisis política nacional en estado terminal, porque como personas han dejado de reflexionar, de pensar de ofrecer su mejor versión, para no atesorar los premios de esta vida, las riquezas de esta bella Venezuela, que jamás podremos llevar cuales egipcios al otro lado.
He leído a O Callaghan sobre la esperanza, que habla de las distintas filosofías, doctrinas, y autores clásicos que hablaron, y trataron en profundidad sobre este espinoso tema.
Nunca en las postrimerías de mi vida había tenido un desencanto tan enorme. Hoy lo tengo con esta tragedia que golpeará a las nuevas generaciones, con los valores que realmente me sostenían durante toda una vida, porque ahora no vale con serlo, sino que además parecerlo te puede llevar a una terrible confusión, y estar dentro del grupo de individuos perversos de la política que solo parecen, pero que por dentro ensucian la virtud, y la moral republicana.
Por eso prefiero solo vivir, alertar, y no permitir que estos sucesos como el de la guerra sucia, y el acoso asqueroso contra María Corina, sea objeto de condena, de cese, de quema de brujas en resumen.
Y si voy un poco más allá, y es solo un análisis, no es campaña a su favor, por qué se habla de la mujer del César, y no del propio César. Por qué fue Eva. En fin, la mujer que quiere lo mejor para sus hijos siempre en el punto de la mira. No puedo dejar de exponer este pequeño matiz. Aunque para los que me adversan deben saber que mi mayor referente fue otra mujer, una humilde mujer que quiso lo mejor para sus hijos en grado máximo. Hoy les pediría un poco de humildad a estos crápulas de la politiquería hacia María Coriana, no sean tan hipócritas. Tengan un poco de vergüenza en sus relaciones humanas, para no condenar a mujeres que tan solo se arriesgan en el ámbito público y privado, donde nadie le gustaría verlas expuestas al escarnio mediático. "HAY QUE CONVOCAR A LAS PERSONAS BUENAS, A LAS QUE HACEN EL BIEN CUANDO NADIE LES MIRA"
Espero, eso sí, pacientemente, un cambio en la forma de hacer política, en el que aún en mí se alberga la esperanza. En el que la sociedad venezolana pueda mostrarse tal cual es, como ya está sucediendo en algunas redes sociales, que rechazan por entero la nula apuesta hacia el esfuerzo en la educación de calidad, o cómo vemos en personas honradas que se dedican a su trabajo y que se esfuerzan por ayudar desinteresadamente a los demás. Y es aquí, donde ahora quiero poner la mira, somos muchos más los que somos auténticos políticos, que los viejos hipócritas politiqueros. Sucede que esas viejas glorias, hoy solo hacen ruido, con un estruendo desagradable.
Por eso, hay que convocar a las personas buenas, a las virtuosas, a las que hacen el bien cuando nadie les mira. O al trabajador cuando termina su trabajo correctamente, y da un poco más, a pesar de que nadie, ni tan siquiera el jefe lo ve. Aquellos padres de familia que cada día a día trabajan para alimentar a los suyos. Así como las madres venezolanas, que cuidan a sus hijos, como decía Juan Pablo II, que son el cariño de la humanidad.
Es como el amigo que emigró de Venezuela que te escribe para saber cómo estás, porque las cosas en el país no están bien, el que te abraza porque perdiste a un ser querido, y estás en un momento malo. Porque cualquiera sirve para una marcha o una concentración, pero no todos saben estar cuando se les necesita. O de los que se alegran cuando tienes éxitos, y lo celebran contigo.
Y es que un pequeño gesto cada día cuando nos toca es mucho más que la vida extraordinaria de los héroes de guerra, de esas guerras ficticias del mundo de la superficialidad.
Somos muchos los que no tenemos el afán de parecerlo, porque lo somos. Y como me decían en la facultad, entre el ser, y el deber ser hay gran diferencia. Pero no hay nada como ser auténtico, sin dobleces, eso no tiene parangón, y la luz que se desprende no puede copiarse. El sol no puede taparse con un dedo.
¿Habrá una victoria pírrica de los alacranes? Pirro de Epiro (318-272 a. C.). Se enzarzó en batallas y guerras, matando a quienes habían sido sus aliados y conspirando con las tribus del sur de Grecia para reducirlas a su mandato: "Todo su deseo eran las huestes y la cruda guerra", escribió Plutarco en sus Vidas paralelas.
La ciudad de Argos, en el Peloponeso, amanece invadida. En su defensa, una pueblerina lanza una teja, que malhiere al general Pirro. Un soldado rival lo remata.
Muerte poco heroica la de Pirro. Ganaron los suyos, en victoria pírrica.
Craso error. Craso es el término heredado de la forma latina crassus (grueso, gordo o grande). La expresión Crassus Errare, fallo o error sin explicación lógica. Expresión habitual que cobra impacto al relacionarse con el apellido de una personalidad destacada como Maria Corina.
En el siglo I A.C., el militar Marco Licino Craso es uno de los hombres más poderosos de Roma, al constituir el triunvirato, junto a Cayo Julio César, y Pompeyo Magno. En el 55 a.C., para igualar las gestas y la fama de sus dos cogobernantes, Marco Licino Craso invade Partia (noroeste de la actual Irán) y marcha a la cabeza de 35 000 soldados. Craso y sus tropas son masacrados por los guerreros partos en la batalla de Charras (53 a.C.). Pésima estrategia, y un craso error. Ahí se las dejo.