El capitalismo tiene mil maneras de mantener a los pueblos dominados; unas son violentas, otras son sutiles, éstas últimas las usan con más frecuencia y con más experticia. Las elecciones burguesas son la estrella de la distracción de los pueblos, de las formas de mantenerlos peleando con las sombras.
Las elecciones burguesas, son en esencia, un circo donde se escenifican batallas ridículas que no ponen en peligro la permanencia del capitalismo. No sólo es la falsa batalla por elegir un presidente que simula cambios, cuando en realidad, es un garante del capitalismo. En esta batalla bufa se forman los grupos como si se tratase de aficionados a un equipo deportivo, se avivan los colores, las consignas, los odios y las simpatías. Todo dentro del carril de lo establecido, sin que el agua desborde los cauces.
También se emplean maneras más violentas para dar un poco de dramatismo a la novela; pueden poner presos a los candidatos como hacen en otros países de triste recuerdo; pueden agredirlos físicamente, una patada por el fundillo, usan también, la intriga, de no saber cuál será el candidato del gobierno, o de algún sector de la oposición. Son variadas las formas del circo.
Aquí, en Venezuela, se aparecieron con la inhabilitación de candidatos destacados de la oposición. Y tuvieron éxito, ahora el centro de la confrontación, no es el sistema, no es el gobierno, sino la inhabilitación: ¿qué hará maría? ¿qué hará la oposición? Se sabrá en el próximo capítulo. Surgen las peroratas de los diferentes actores, las proposiciones, la inhabilitación ocupa el centro del circo. El capitalismo no es tocado, con él nadie se mete, el chavismo no es recordado, eso quedó fuera de la novela.
Con ese engaño, el capitalismo extiende su dominación, los pueblos siguen su esclavitud, y el planeta continúa su marcha hacia la extinción de la vida. ¿Qué deben hacer los revolucionarios? Se debe ubicar la lucha en su objetivo estratégico y desde allí diseñar los momentos tácticos.
Es necesario entender que, por este camino, la vida de los nietos será muy difícil, sino imposible, en el planeta que les vamos dejando con el capitalismo. Que no se trata solamente del hoy, sino del mañana. La humanidad debe superar al capitalismo o se extingue.
La batalla por el Socialismo es una cuestión de vida o muerte, la sustitución del madurismo, y más que del madurismo del capitalismo en Venezuela, es una cuestión de vida o muerte. La Humanidad necesita de ejemplos, de concreciones que demuestren que el Socialismo es posible. Eso lo estábamos logrando con Chávez. El objetivo estratégico de los revolucionarios es la inhabilitación de maduro, para emprender el camino extraviado, la construcción del Socialismo. El haber traicionado al Comandante es suficiente razón. Renunciarlo debe ser el objetivo.
En este momento, se debe lanzar una candidatura chavista para la presidencia, en cualquier circunstancia y por cualquier vía, siempre con la legalidad que confiere la lucha por el bien de todos, la restitución de la Constitución de Chávez. Está candidatura debe trascender lo puramente electoral, ir hacia la creación de conciencia del momento histórico, de la necesidad de un cambio profundo, verdadero, devolver al pueblo la esperanza de que el cambio es posible, y es indispensable.
¡CHÁVEZ VOLVERA, EL SOCIALISMO VOLVERÁ!
