Un político hipócrita cuestionó al famoso escritor estadounidense Mark Twain con esta pregunta: "Antes de mi muerte pienso hacer una peregrinación a Tierra Santa; subir a lo alto del Monte Sinaí para leer en voz alta los Diez Mandamientos, ¿podría usted, Sr. Twain, hacer algo mejor?" Y Mark Twain le contestó: "Quedarme en casa y cumplirlos". *Nadie se desembaraza de un hábito o de un vicio tirándolo de una vez por la ventana; hay que sacarlo por la escalera, peldaño a peldaño. Un hombre con una idea nueva es un loco hasta que la idea triunfa. Para Adán, el paraíso era donde estaba Eva*.
Fin citas, y comentarios de Mark Twain.
Las próximas elecciones dejarán mucho que desear. Donde se ve a tantos políticos hipócritas vendiéndose como lo mejor; con golpes de pecho; en la vía pública; con gritos que solo ellos, son la mamá de Tarzán; y la ausencia total de propuestas concretas para una mejor Venezuela.
Hipócritas, y politiqueros, tanto viejos como nuevos, que irrespetan las leyes, ofreciendo espejitos y baratijas, como a aquellos ignorantes de siglos atrás. Hoy prometen múltiples maravillas, eslóganes, villas, castillos; después todas sus promesas serán tragadas por la tierra.
¿De dónde sale tanto político hipócrita, gusano, y alacrán marcado por el fracaso trampero, y la corrupción? ¿Cómo es posible que muchas lacras se auto postulen con semejantes prontuarios, muchos sin educación, fracasados, y contaminados?
La historia electoral presidencial hacia el 2024, se repite, nuevamente como tragedia, y como farsa, estamos en un ciclo pre electoral desbalanceado entre dos polos: Los que despilfarran, y donde los alacranes se aprovechan de los fondos del Estado, y los santos niños de atoche, que a duras penas se oyen en esta pre campaña. A los que no les importa un pito irrespetar las reglas del juego, y aquellos que, por falta de recursos, mamando y locos, nada mas por el deseo de figurar se ven obligados a respetarlas. En un país real, lo correcto, seria la igualdad de condiciones para todos los partidos, y sus candidatos.
En una batalla con un equilibrado pertrecho electoral, los votos deberían ser solo por soluciones, no por ofertas basura. Esto eliminaría a los principales sinvergüenzas, y detestables alacranes, y a los gusanos rastreros. Así se enderezaría el rumbo del gobierno para el próximo sexenio. No lo hacen porque a los hipócritas, y fariseos no les conviene.
En la Venezuela del 2023 en crisis, rumbo al 2024 para participar en la contienda presidencial, debe haberse pagado la deuda política, y el partido en el Poder Ejecutivo haber cumplido con su obligación de controlar la hiperinflación, la escasez de combustible, la mala calidad de vida, y no usarse como estrategia electoral.
Para ir sembrando confianza hacia la recuperación económica, y el regreso de la inversión, deben existir límites e igualdad de condiciones en la campaña electoral, con recursos regulados, nivelados, y transparentes.
Pero Venezuela está muy lejos de ser el país ideal, por lo que seguimos sufriendo con políticos alacranes corruptos, balanceándose a favor del partido de gobierno, como proxenetas, y con el baile de los maletines con lechugas verdes debajo de la mesa como postre.
La asquerosidad política en Venezuela no tiene límites, ni nada que ver, con lo que vi sin ser marxista, cuando visité la Escuela Superior de Cuadros Ñico López en la Habana Cuba, hace cerca de 50 años siendo prácticamente un adolescente imberbe, por lo cual los ñangaras, y alacranes se dan golpes de pecho hoy, como unas carmelitas descalzas. Esta es la razón principal de la apatía electoral en el pueblo venezolano. La factura la pasará el pueblo en los próximos comicios, al no salir a votar, para no perder su voto, y elegir a tanto político hipócrita, cínico y fariseo. De no corregirse esta situación socioeconómica anómala.