Aportes para un registro del debate sobre el Referendo Consultivo en relación a la reclamación del territorio Esequibo.
1.- Cuando salió la información de que el gobierno del presidente Maduro y la Asamblea Nacional habían decidido la realización del Referendo Consultivo (en adelante RC) sobre el asunto de la reclamación del territorio Esequibo, el debate se centró entre participar o no en éste.
En un primer momento fue muy fuerte la satanización de la participación y cito un texto de Moisés Durán por tener la virtud de sistematizar y resumir la catarata de epítetos que se le dedicaron.
Moisés Durán: "En relación con el Referendo Consultivo mi libre albedrío me dice que todo es una estafa que solo beneficia a Maduro y al Partido-Estado, y que debe ser rechazado en su conjunto por inútil, costoso, complejo, por ser un evento partidista del PSUV ilegal e inconstitucional.
Mi libre albedrío también me dice que es casi infantil, tremendamente falaz y muy manipulador el chantaje político-emocional de quien pretende que no participar en el show de Maduro es no querer a Venezuela, o no querer que se defienda al Esequibo, o porque no se es un demócrata."
En sentido contrario, esto es pro participación en el RC, en un primer momento solo estaba la propaganda oficialista, pero el debate se profundizó con un texto del ex rector del CNE Vicente Díaz, quien permitiéndose las más agudas suspicacias respecto de las intenciones reales del gobierno con la realización del RC, dijo que en momentos en los que el gobierno guyanés estaba otorgando concesiones petroleras en aguas de la zona en reclamación, podría ser oportuna y conveniente la manifestación de la unidad nacional en torno al reclamo territorial del Esequibo, que no en torno del gobierno de Maduro. Qué ése podía ser, y lo cito, "...un poderoso mensaje político a las empresas petroleras, al gobierno guyanés, a las instancias multilaterales y a toda la comunidad internacional."
El texto de Vicente Díaz culmina anunciando su participación en el RC del 3 de diciembre.
Sin embargo, es el texto de Ricardo Sucre que cito a continuación, el que, a mi entender, refleja la actitud política adecuada.
Ricardo Sucre: "El Referendo sobre el Esequibo es una realidad. Guste o no guste. La Constitución permite consultar acerca de ese tema. Voy a participar en la elección. No puedo darme el lujo de estar en negación o en la indignación moral como buena parte de las élites venezolanas. Para escindirse de la realidad hay que estar bien. Es un lujo. No estoy ahí ni quiero estar. Quiero estar con los pies en la tierra. En el "principio de la realidad".
Por eso voy a la realidad del 3 de diciembre que no solicité, pero no la puedo evadir con postureos de lugares comunes tipo "la soberanía se ejerce, no se consulta" o de la inútil "dignidad"."
2.- Ya en el ámbito de la participación en el RC, se dio el debate sobre el instrumento para su realización, esto es sobre el conjunto de las cinco preguntas, y nos encontramos que en la primera y en la segunda, al preguntarnos por elementos sobre los que se funda nuestra soberanía territorial en la Constitución Nacional, los pone en duda, abre la posibilidad de responder NO y eso, jurídicamente hablando, no se puede hacer pues la soberanía es irrenunciable. Pero se hizo, nos diría Ricardo Sucre, apelando al principio de realidad. La objeción jurídica es muy válida y al mismo tiempo inútil. El hecho es que son esas, y no otras, las preguntas del examen con las que se confrontará el pueblo votante.
En la tercera se nos pregunta si rechazamos la injerencia de la Corte Internacional de Justicia (en adelante CIJ) en el asunto de la reclamación esequiba.
Para darnos una idea de la amplitud del debate, el Prof. Luis Fuenmayor Toro, exrector de la UCV, publicó su opinión diciendo que participaría en el RC, y que votaría SI en las preguntas primera, segunda, cuarta y quinta, y que votaría por NO rechazar la injerencia de la CIJ en la reclamación del Esequibo en la tercera pregunta.
En la cuarta se nos pregunta si rechazamos el otorgamiento de concesiones hidrocarburíferas en aguas de la zona en reclamación. A nadie sorprendió el consenso que se produjo. Muchos satirizaron a las cuatro primeras preguntas diciendo que era como si nos preguntaran si queremos a nuestra mamá, si queremos a nuestra abuelita, si queremos a nuestros hijos, etc.
En la quinta pregunta se nos interroga sobre si estamos de acuerdo en decretar a la zona en reclamación como estado Guayana Esequiba, e iniciar procesos de cedulación venezolana de la población que la habita.
Esta es la única pregunta sobre gestión de gobierno, sobre cómo continuar la reclamación del territorio Esequibo. Es la única pregunta que no es una adhesión más o menos obvia a la Constitución Nacional como las cuatro anteriores, pero que sí puede implicar un desconocimiento de ésta, en tanto en cuanto, en el supuesto negado de una respuesta afirmativa en esta pregunta, se estaría desconociendo el Acuerdo de Ginebra que habíamos ratificado en la segunda pregunta.
Decretar el estado Guayana Esequiba e iniciar procesos de cedulación venezolana a la población que allí habita, es tan violatorio del Acuerdo de Ginebra como el otorgamiento de concesiones hidrocarburíferas en aguas de la zona en reclamación por parte del gobierno guyanés.
Por otro lado, sin duda mucho más importante, en el supuesto negado de una respuesta afirmativa en la quinta pregunta, está tendría un inocultable significado belicista, y constituiría, por lo menos, una aproximación a la situación de guerra.
Destaco las advertencias del compañero Roberto López Sánchez en este sentido.
Es un dato de la realidad que el gobierno del presidente Maduro y el PSUV han llamado a votar SI en las cinco preguntas, y también lo es que personas que se oponen abierta y consistentemente al presidente Maduro, a su gobierno y a su partido, han expresado la misma voluntad, votar SI en las cinco preguntas, desde otros criterios muy diferentes a los del gobierno. Destaco entre ellos el enjundioso texto del compañero Gustavo Márquez, de quien discrepo con respeto y amistad en cuanto a la quinta pregunta.
3.- Voy a participar, Dios mediante, en el RC del 3 de diciembre y eso tiene su reflexión. Parte de la realidad que debo admitir es que, en Venezuela, el fraude electoral es inversamente proporcional a la participación ciudadana en los diferentes procesos electorales. Qué el gobierno-PSUV está en capacidad de parapetear un "magno evento" con cualquier asistencia y que podría ser muy malo para la reclamación del territorio Esequibo no expresar un sentimiento de unidad nacional en torno a la defensa de nuestros derechos históricos en esa reclamación territorial.
Con mi participación en el RC sigo dando la pelea por la recuperación del voto cómo instrumento ciudadano y me enfrento al maligno virus del abstencionismo, causa fundamental de que estemos donde estamos.
En las primeras cuatro preguntas contestaré SI para sumarme a la unidad nacional que teóricamente iría desde Diosdado Cabello hasta María Corina Machado, en la defensa de nuestros derechos históricos sobre el territorio Esequibo.
En la quinta pregunta contestaré NO por varias razones entre las que destaco la de ser coherente con la ratificación del Acuerdo de Ginebra de 1966 que hice votando SI en la segunda pregunta.
Otra razón para contestar NO en la quinta pregunta y, sin duda, la más importante es oponerme a la guerra que la ExxonMobil necesita para quedarse con la explotación de nuestra Fachada Atlántica. Ellos, los poderes facticos, en la guerra cobran por la guerra, y en la paz, cobran por la paz.
Para que nadie me acuse de mezquino, de tratar de extrapolar el asunto del Esequibo al resto de la vida nacional, de jalar la brasa para mí sardina, la tercera razón que expongo para sostener mi NO en la quinta pregunta trasciende a la misma, pero se queda en el tema del Esequibo. Contestaré NO en la quinta pregunta para rechazar la política de zigzagueo entre el "dejen eso así" del 2004, que tanto enardeció la fibra patriótica del diputado Hermann Escarra en su momento, y la exaltación guerrerista, la maniobra militar fronteriza, etc., con la que hoy se pretende encubrir el abandono objetivo que se hizo de la reclamación Esequiba.
4.- No referidos al RC, pero sí al territorio Esequibo, se publicaron dos textos que merecen mucho estudio y atención.
El primero es del profesor Esteban Emilio Mosonyi, en el que nos llama a cambiar en 180 grados nuestra mirada y nuestra actitud hacia el territorio Esequibo en reclamación.
El segundo es un texto de Emiliano Terán Mantovani que nos llama a pensar en la posibilidad de hacer, del territorio Esequibo, el segundo Yasuní del planeta.
Ambos textos irrumpen contundentemente en el debate.