Lamentamos constatarlo, pero los grandes periodistas de nuestra patria brillan desde hace días por su ausencia. Mejor aún: nuestros personajes más "importantes" no dan todavía señales de vida. Qué agudo contraste con el discurso que ellos mismos profesan, a saber, que entre otras cosas la conducta del "revolucionario ideal" ha de ser pura valentía.
¿Pero quién será el primer periodista de alta reputación que se pronuncie respecto al caso Mandinga y Dando y Dando?
(Es decir, respecto al caso de la censura de dos de sus más altamente reputados colegas).
Hmm, se trata de una prueba, nada más... Una evidente, afectada al catálogo de dificultades propias de toda revolución, y que cualquier "revolucionario", desde el mismo instante en que asumió tamaño título, hubo indistintamente jurado no dudar en expiar.
Una prueba que es constante, como la misma revolución. Perenne, sin intervalos de "reposo".
Pero el silencio que estamos experimentando está preñado de presagios, y cada minuto que pasa sin respuesta adquiere la forma de una lamentable confirmación: ¡Usurpación, traición, fraude a la patria!
A la dignidad, la libertad, la justicia...
¿Dónde están pues nuestros tantos revolucionarios cuyo talento se disputan nuestros diarios chavistas, de verbo diáfano, virtuosos de la tinta, vigilantes confirmados, irrestrictos denunciantes del oprobio y guardianes apolíneos de la pulcritud revolucionaria?
El pueblo, por su parte, está ahí, siempre fácil, a la intemperie de su día a día, ejerciendo su deber a la vista de todos, su derecho, su revolución, su verdad intrínseca. ¿Pero dónde están sus portavoces oficiales?
¿DONDE, si ni siquiera aún es Semana Santa...?
¿Es que siguen al cargo de sus sendos y sagrados puestos de responsabilidad?
Camaradas, cada día que pasa sin que veamos la menor reacción, o para decirlo con más delicadeza, la menor señal de "inquietud" de su parte, es un insulto a la dignidad de nuestro pueblo!
¡ ¿ QUÉ SILENCIO ES ESTE ? !
Un simple comunicado, en dos palabras, sería suficiente. Sabemos, en cambio, que practican un comercio de justificativos a puertas cerradas. PERO:
EL PUEBLO ES EL PRIMERO, EL UNICO EN TODO Y NO ACEPTA OTRO METODO QUE LA TRANSPARENCIA MAS ABSOLUTA EN LA GESTION DE SUS BIENES MORALES Y MATERIALES, Y PUEDE EN TODO MOMENTO REVOCARLE SU CONCESION (INCLUYENDO LOS MEGAFONOS PRESTADOS) A CUALQUIER EMPLEADO PUBLICO BAJO INDICIOS DEL MENOR ABUSO.
Una vez más, no aceptaremos excusas, sólo EXPLICACIONES EXHAUSTIVAS respecto a la presunta censura aplicada a los comunicadores ALBERTO NOLIA y TANIA DIAZ.
No sin epidémica vergüenza nos sentimos obligados a denunciar igualmente un anacronismo remarcable por parte de nuestra Intelligentsia criolla: frente al caso de Mandinga y Dando y Dando, es decir, lo más grave de la actualidad venezolana, algunos de nuestros más insignes intelectuales sólo se muestran para publicar citas de Jesús de Nazareth que corroborarían que sí fue "el primer socialista".
No es que estos abonos no sean buenos, incluso reveladores y muy útiles a la maduración ideológica de nuestro proceso. Pero...
Escalofriante la facilidad con que podemos tumbar en un aburguesamiento intelectual. Marx lo dijo: los filósofos han creado muchas visiones del mundo, pero lo importante no es cómo definirlo, sino cómo cambiarlo!
El pueblo venezolano no está dispuesto a negociar su aprecio por Alberto Nolia ni Tania Díaz, es suficientemente grandecito y ha sufrido lo necesario (?) para reconocer lo que es bueno cuando lo tiene enfrente. Exigimos, pues, la restitución inmediata de estos espacios de opinión a nuestros medios y abogamos por una consecuente penalización de toda la cadena de responsables de esta censura fascista.
CON NOLIA Y TANIA RODILLA EN TIERRA!
xavierpadilla9online.fr
